10- Vida soñada

798 28 0
                                    

Me agarró de su cuello desesperadamente mientras abría la puerta de la habitación, Joao me besaba con desesperación y descontrol. Al igual que yo.

Suspiré contra sus labios cuando caí encima de la cama, sintiendo sus manos recorrer mi cintura.

Me separó de el luego de que bajara sus labios hasta mi cuello, pose mis manos en sus brazos y seguí gimiendo de placer.

Apenas nos bajamos del auto subimos entre besos y caricias al departamento.



Me despierto y veo que al lado mío no hay nadie, no como esperaba. Esperaba que si estuviese alguien.

Me tapo con la sábana de mi cama y me siento, viendo alrededor, buscando alguna señal de que Joao este aquí. Pero no lo está.

No busco más porque ya se que se ha ido aún que no entiendo el por qué. Me levanto de la cama unos minutos después y entro a la ducha.

Me doy una ducha corta y salgo para vestirme. Hoy no tenía planes hasta la tarde así que me puse mi ropa cómoda y baje hasta el comedor pequeño que tenía, prendí la televisión y coloque el primer programa me ví.

Saque un plato y me hice mi desayuno que consistía en; Pan con mermelada y mantequilla, jugo y para agregar ya que tenía hambre, cereales. Una vez que termine de comer me quedé viendo televisión en el sofá y me levanto a lavarme los dientes.

Cuando vuelvo, recuerdo lo de anoche. No evito la sonrisa divertida que esbozo en mis labios al recordar que dormimos juntos e hicimos más cosas.

Tomo mi móvil y me decido por escribirle.

Olivia: ¿Por qué te fuiste tan temprano?

La respuesta no tardó en llegar.

Joao: tenía cosas que hacer, perdóname.

Me quedo pensando en su respuesta, hasta que veo un mensaje más.

Joao: necesito hablar contigo... Hoy en la tarde, en mi casa o en la tuya.

Reviso mis planificaciones y reviso mis horas libres.

Olivia: puedo a las siete y media, en tu casa.

Estaba claro que en mi casa siempre nos juntábamos y quería estar en la suya un poco de tiempo antes de que esto acabase.

Joao: ok, ya sabes la ubicación. Te veo en la tarde.

Cierro mi móvil y lo dejo a un lado.

La mañana transcurre con normalidad y cuando dan las una y media de la tarde, agarro mis cosas y salgo de mi departamento. Me había cambiado de ropa y me había arreglado un poco más de lo que estaba en la mañana.

Hoy tenía que almorzar con Pablo y luego iría con unas amigas al centro comercial.

Llegó al restaurante donde acordamos vernos. Me siento en una mesa reservada y esper pacientemente hasta que el llegue.

La campanilla de la entrada suena y creo que es Pablo, por lo que me volteó pero me llevo la sorpresa de que no es el, si no Joao. Juntos un par de chicos más. Supongo que sus amigos.

Me quedo viendolo fijamente, uno de sus amigos se da cuenta y le susurra al oído algo. Enseguida se voltea a verme y me sonríe de lado.

Le devuelvo mi sonrisa y justo en ese momento entra Pablo junto a Pedri. No sabía que vendría también, pero me alegro de que así sea.

¿forever?//João FélixDonde viven las historias. Descúbrelo ahora