Wolfgang

Oídos sordos palabras claras

Seungmin veía el pueblo como algo nuevo, como lo mas extraordinario del mundo. Había pequeñas tiendas y casas, Felix y Jeongin veían de manera cariñosa al chico que con ojos de cachorro se acercaba a la fuente.

Sonrió al ver el chorro que salía y se iluminaba con el sol. Eran las tres de la tarde y había niños corriendo por todo el lugar, sus madres parecían concentradas en cuidarlos y platicar con otras madres, el omega se levantó y miro a un hombre vender lo que parecía algo esponjoso y de colores.

Felix se acerco al mirar como el omega miraba con cierta curiosidad.

"¿Quieres uno Seungmin?" pregunto Felix con una sonrisa alargada, Seungmin abrió los ojos y bajo la mirada negando suavemente. "Seungmin si lo quieres puedes tomarlo"

"No tengo dinero" susurro el omega mientras sobaba su brazo debido a un tic nervioso, uno que se fue generando uno que dolía y la razón dolía a un más. Felix sonrió enternecido y tomo la mano del omega para acercarse al señor que vendía el algodón de Azúcar.

"Escoge los que quieras" Seungmin miro a Felix y después al señor y señalo el azul y uno amarillo, después un rosa, miro un morado y también lo pidió sonriendo. El señor asentía y le pasaba lo pedido.

Felix pago el total y se sentaron enfrente de la fuente en una banca de piedra, extendió el algodón color amarillo a Felix y el rosa se lo dio a Jeongin, ambos omegas le sonrieron y al mismo tiempo abrieron su algodón, Seungmin tomo un pedazo entre sus dedos y sentía lo pegajoso y sonrió inconscientemente para después llevar eso a su boca, sintió como aquello dulce se deshacía en su boca y se giro a mirar a Felix.

"Esto es tan delicioso, hace tanto que quería probar esto. ¿esto es el algodón de azúcar?" pregunto hacia ambos omegas, los cuales dejaron de comer y asintieron. Se miraron entre ellos y observaron al más pequeño comer como si fuera lo mas sabroso del mundo.

"¿Lo conocías Seungmin?" pregunto Jeongin con una sonrisa algo fingida, guardando aquel sentimiento de llorar al ver la emoción en con la que el omega comía un simple dulce común.

"Si lo conocía, pero siempre lo veía de lejos. Mi madre enfermaba muy seguido entonces no salía conmigo y cuando salía con mi padre era un milagro se recordaba que yo lo acompañaba." Hablo el omega mientras limpiaba sus dedos los cuales estaban algo pegajosos por el dulce. Changbin le paso una toalla húmeda y regreso a su posición de cuidado. Jeongin miro la acción y asintió como un agradecimiento silencioso.

"Bueno siempre que quieras algo para probar no dudes en decirnos, incluso Chan buscara cualquier cosa por ti, ¿de acuerdo?" Seungmin asintió ante las palabras de Felix y se levantó de su lugar.

"Quiero regresar, quiero darle esto a Chan" dijo Seungmin mientras miraba a los cuatro presentes. Los alfas asintieron para que el mas alto se adelantara por la camioneta, mientras los omegas se levantaban para irse ya a casa.

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Sarah una niña caprichosa y berrinchuda, así siempre la describió Chan desde que se presento como amiga de su hermana. La chica era hija del mejor amigo de su padre y por eso se creía con un poco de autoridad en aquella finca.

Chan tantas veces la bajo de la nube inventada en la que flotaba, desde que se había hecho amiga de su hermana siempre decía que ella seria la omega del alfa sucesor, que seria la gran omega dirigente y caminaba con una arrogancia y falta de humildad por la finca. Su madre había intentado que Chan no fuera duro con ella, había entendido que era una chica herida su madre había muerto cuando era muy pequeña y que su padre parecía prestarle poca atención, pero después miro lo consentida que estaba, la forma en que su padre le daba todo.