El detective Mitsuki había querido ser policía desde que era un niño, en cuanto tuvo la edad entro a la academia y poco a poco fue abriéndose camino en ese mundo, siempre fue un policía honrado y dedicado, trabajo hasta lograr su ascenso a detective y aunque después de tantos años trabajando en eso no era un iluso y sabia que no todo se podía resolver siempre del mejor modo él seguía confiando en el sistema y creía en una repartición igualitaria de la justicia para todos, así como había visto que cualquiera por más inocente que pareciera podía ser capaz de cualquier cosa igualmente creía que la gente podía ser inocente y tenían derecho a una investigación justa, es por eso mismo que este caso le crispaba los nervios, sabia que cuando se trataba de personas famosas empezaba mal el asunto pues tenían a la prensa y a sus jefes encima de ellos para apurarse a resolver las cosa como fuera y eso muchas veces llevaba a una pobre investigación y ese era el caso aquí, solo habían lanzado supuestas pruebas sin detenerse realmente a hacer un análisis concienzudo de ellas, lo mas importante era poner el ejemplo y acabar rápido con todo, incluso al principio Mitsuki también quería eso y estaba contento con que terminara pero analizando un poco más las cosas no eran tan fáciles, faltaban huellas, había testigos que habían visto a otra persona, había alguien que se infiltro en la casa de la pareja, es decir habían muchas dudas y sentía que la cosa no cuadraba pero parecía que en el departamento a nadie le interesaba esto, ya se había decido sobre quien echar la culpa y no querían saber más, esto en verdad lo estaba molestando e incluso le quitaba el sueño, así de dedicado solía ser el detective y como si no tuviera suficiente en el trabajo todavía llegaba a su casa y su esposa que adoraba a su actor favorito Saijou Takato desde que era niña también lo acosaba con preguntas, sus propias teorías y le decía que tenia que ayudar al pobre Takato que seguro estaba sufriendo mucho, así que cuando el detective recibió la llamada de este para que escuchara su versión de las cosas decidió dos cosas, la primera que lo escucharía y dependiendo de lo que le dijera si podía lo ayudaría y la segunda conseguirle una actividad a su esposa para que dejara de estar viendo dramas televisivos y adorando actores.
Después de ese primer encuentro con Takato donde le explico absolutamente todo, de investigar todo lo que este le dijo, de sopesar todas las pruebas y pensarlo mucho el detective creía que se había cometido un error y empezaba a confiar en la inocencia de Azumaya Junta, ahora la cuestión era probarla, se había estado con Takato estos últimos días cuando este le propuso algo sumamente arriesgado, él sabia donde encontrar a la mujer, él era la persona que ella quería lastimar así que ¿porque no usar un micrófono? Era seguro que hablaría para jactarse frente a él y así lo que dijera podría usarse para ayudar a la defensa de Junta, al detective esta idea no le gusto para nada, sabia que nunca era bueno implicar a civiles en las investigaciones, sin embargo se dio cuenta que con su ayuda o sin ello Takato ya estaba listo para actuar, el hombre estaba desesperado por ayudar a su esposo y haría lo que fuera así que prefirió ayudarlo para que no se metiera en una situación aún peor, obviamente nada de esto era de manera oficial pues la policía ya había dado carpetazo al asunto, así que un día y sin decirle a nadie el detective simplemente tomo prestado un aparato de transmisión y le explico a Takato como funcionaba, juntos armaron su pequeño plan, sintiéndose seguros que al ser una transmisión en vivo ante cualquier eventualidad el detective que estaría cerca escuchando podría correr a ayudar ¿que podía salir mal? Mitsuki sabia que muchas cosas, que la repuesta no podría ser tan rápida, aunque estuviera escuchando, no podía hacer nada si la mujer decidía atacarlo al menos tardaría un par de minutos en llegar, minutos que en muchos casos suelen ser vitales, sin embargo se guardo todos sus temores y decidió ayudar, si bien esto ponía incluso su carrera en juego, no le gustaba ser parte de un departamento corrupto que ponía inocentes en la cárcel solo para verse bien, él creía en la justicia y era por lo que trabajaba.
Los dos hombres estaban listos, Takato se había preparado y estaba parado enfrente de la casa tocando la puerta mientras el detective solo podía rogar en su interior por que todo saliera bien, al principio parecía que sería así, el plan consistía en hacer confesar a la mujer, grabar su confesión con todos los detalles para así poder probar con hechos las palabras dichas y tras lograr hacer eso Takato debía salir, si las cosas se ponían un poco difíciles, el detective llamaría a la puerta y dependiendo de la situación lo auxiliaría, después de todo era una sola mujer y seria tomada por sorpresa pues no esperaba la visita ¿Que podría salir mal? Obviamente lo que ninguno espero es que ella ya había visto venir la situación, estaba preparada y más aún lo que ninguno espero es que le dispara a Takato, tras escuchar la detonaciones el detective Mitsuki no lo pensó dos veces y fue directamente a la casa para tratar de entrar, sin embargo nadie esperaba lo qué pasó y es que al escuchar que había alguien afuera la mujer enloqueció y empezó a disparar de nuevo, ya sin tener una clara idea de lo que pasaba adentro la situación se torno francamente alarmante, Mitsuki supo entonces que debía llamar por refuerzos antes de que las cosas se pusieran aún peor. No fue nada sencillo explicar lo que había pasado y porque estaban ahí, en ese momento recibió todo tipo de regaños de su superior además de la promesa de que las cosas no se quedarían así, sin embargo ahora lo importante era arreglar el desastre que se había armado, pues esto se había convertido en una situación de rehenes pues suponían que aún Takato estaba adentro con vida, un total de tres patrullas llegaron silenciosamente al inmueble pues lo cierto es que tampoco querían llamar tanto la atención y que la prensa se enterara del asunto, después de todo Takato era un actor famoso y no querían enfrentar nuevamente las criticas de los medios, así que esperaban llevar esto de un modo discreto al menos durante el mayor tiempo posible, lo primero que necesitaban era tener comunicación con los de adentro así que a Mitsuki se le ocurrió llamar al celular de Takato, después de un par de timbres una voz femenina contesto, la mujer sonaba tranquila como si nada estuviera pasando, en cierta forma siempre es mejor que el secuestrador tranquilo a que alterado haga una locura pero al mismo tiempo era impredecible tratar con alguien tan fría, después de las presentaciones había que ir directamente al punto.
-Que es lo que quiere - preguntó el detective.
-Lo que quiero es que todo el mundo sepa lo que estos infelices le hicieron a mi hija, que todo el mundo sepa la clase de personas que son...Mitsuki que conocía la historia realmente no podía entender lo que buscaba esta mujer, realmente estos dos nunca le había hecho a su hija, al contrario su hija era la que trato de fastidiarles la vida y ahora la madre continuaba exactamente igual.
-Bien pero primero necesitamos saber cómo está Takato, sabemos que le disparó, por favor permítanos llevarlo a un hospital.
-¿Cree que soy idiota?
-Necesitamos saber que esta con vida para poder negociar...En ese momento se escucho a la mujer gritarle a Takato que hablara, que dijera cualquier cosa, a lo que él respondió gritando el nombre del detective Mitsuki.
-Ya lo escucho, esta vivo y si quiere que siga así lo que quiero es que en vez de las patrullas que están afuera empiecen a llegar las camionetas de los noticieros y rápido.
Tras esta ultima frase, la mujer colgó, no podías ser peor, lo que menos quería la policía era que los medios se enteraran de la situación y lo que la captora deseaba era tener a toda la prensa encima.
Ya por la mañana en un lugar completamente diferente de la ciudad, otro hombre y su abogado mantenían una conversación completamente diferente dentro de un auto.
-No te alteres pero necesito que sepas que desde ayer no podemos encontrar a Saijou san.
Al escuchar esas palabras Junta se congelo.
-¿Que acabas de decir? Lo único que te pedí fue que lo cuidaras, no te pedí tu ayuda para escapar, no te pedí nada más y sin embargo vienes y me dices que no sabes nada de Takato san desde ayer.
El abogado noto como la vena en la frente del actor parecía a punto de estallar y como su mirada y su voz se tornaron de un frío asesino, tenía razón en que lo único que le había pedido este hombre era que cuidara a su adorado esposo pero después de todo él no era una niñera y se estaba esforzando mucho por ayudarlo a salir libre de los cargos de asesinato, cuando iba a contestar con estos argumentos una voz en la radio interrumpió dando un aviso especial.
Y en las ultimas noticias nos acaban de informar que el famoso actor Saijou Takato ha sido tomado como rehén y la policía en este momento esta negociando su liberación.
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Amor Verdadero (continua
FanfictionDespués de la boda vienen nuevos retos para la pareja, una historia del pasado de Junta, un crimen y una venganza, ¿sobrevivirá el amor verdadero?