𝟎𝟐𝟏

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BeomGyu sabía que sería un mal día desde que despertó tarde esa mañana por culpa del despertador que nunca sonó, lo sospechó un poquito más cuando al llegar a la escuela TaeHyun lo esquivó sin darle una sola mirada y definitivamente confirmó que era un día terrible cuando su lobo se removió eufórico dentro de su pecho y su lubricante natural escurrió por sus muslos.

¿Y que era peor que ser golpeado por tu celo repentinamente a mitad de la calle? BeomGyu trataba de convencerse de que nada peor podría pasarle mientras TaeHyun lo llevaba en brazos hasta su casa.

Sin embargo, el destino quiso demostrarle que absolutamente todo podía salir peor cuando, al llegar a la puerta de su hogar, besó a TaeHyun como despedida mientras expulsaba feromonas de excitación gracias al celo.

Y no, lo malo no fue haberle provocado a su novio una erección gracias a su olor y la lascivia del beso, lo malo fue cuando una mano tosca y violenta se enredó en su cabello para apartarlo lejos de TaeHyun de un jalón.

Porque su espantoso día solo podía empeorar con la inoportuna llegada de su furibundo padre.

"¡¿Que mierda estás haciendo, maldito omega?!" le gritó el alfa a la cara, la voz de mando deslizándose con tanta facilidad por su tono haciendo que BeomGyu cayese de rodillas.

Recibir una voz de mando tan intensa justo en medio de su celo no era la experiencia más grata del universo.

"¡Largo de aquí!" bramó el señor Choi mientras intentaba lanzarse contra TaeHyun, quién miraba todo con enormes ojos aterrados.

TaeHyun vió en cámara lenta como el puño del hombre se alzaba dispuesto a estamparse contra su rostro y él estaba tan asustado que no se sentía capaz de huir, estaba totalmente paralizado. Gracias a la diosa luna, YeonJun interfirió a tiempo al ver el alboroto que se había creado.

"Ni se le ocurra golpearlo" gruño YeonJun mientras colocaba a TaeHyun tras su espalda. "Es un omega, si lo golpea lo denunciare" amenazó, aunque por dentro se sentía intimidado por el salvajismo del alfa más viejo.

"¿Un omega?" el susurro impresionado de la madre de BeomGyu llegó hasta sus oídos, pero TaeHyun no tuvo el valor de mirarla.

"¡Tu maldito hijo se revuelca con uno de su misma calaña! ¡Lo que nos faltaba!" rugió el señor Choi con evidente asco reflejado en su rostro antes de girarse hacia BeomGyu.

El omega peliazul se encontraba llorando de rodillas frente a la puerta, el aroma de su celo era opacado por su olor a desesperación y terror, pero eso no frenó al señor Choi de jalar los cabellos del omega para levantarlo de forma violenta.

"Eres la peor desgracia de esta familia, maldita puta" gruño el hombre antes de soltar un estridente puñetazo al rostro de BeomGyu.

El golpe fue tan brutal que BeomGyu cayó de espaldas dentro de la casa, casi quedando inconsciente con un solo golpe. Se sentía aturdido, mareado y adolorido, pero aún así pudo escuchar los gritos indignados de YeonJun y el llanto aterrado de TaeHyun.

Mierda, ellos no tenían por qué haber visto eso.

"¡Voy a denunciarlo! ¡Si le hace algo voy a-!" pero el gruñido de YeonJun fue interrumpido por el sonoro estruendo de la puerta principal siendo cerrada con brusquedad.

Y lo peor solo estaba por comenzar.

Enseguida sintió una patada más llegar a sus costillas y el aire se esfumó de sus pulmones al instante, podía ver el rostro furioso de su padre gritarle sin parar, pero su cerebro era incapaz de entender todo lo que estaba diciendo.

Solo escuchaba su propio llanto y los aullidos desesperados de su aterrado lobo en su interior. El dolor en su cuerpo iba aumentando con cada impacto que recibía y ya no era capaz de distinguir si era por la golpiza o por los malestares típicos del celo.

really don't care.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora