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Capítulo 3 - Presidenta

"Entonces, ¿cómo la detenemos?" preguntó Winn. Alex frunció el ceño. 

"Es demasiado lista como para dejar suficientes pruebas por ahí para convencer a un jurado. Y aunque lo hiciera, Luthor se limitaría a sobornarlos o amenazarlos. No estamos tratando con una ejecutiva corrupta normal. La única forma de acabar con ella es que Kara la desenmascare delante de todo el mundo. En otras palabras...", se volvió hacia su hermana. "Tienes que ganar la próxima vez."

Era la pura verdad. Los cuatro estaban sentados juntos en el apartamento de Alex, digiriendo las incrédulas noticias de Kara. No tenían recursos para enfrentarse a la directora general en la sala del tribunal. Winn era un gurú independiente de la tecnología y James era un fotógrafo algo conocido. Alex, al menos, pertenecía al cuerpo de policía, pero no tenía ni de lejos la influencia suficiente para investigar a los Luthor.

Alex odiaba hacer recaer la carga sobre su hermana, pero los poderes de Kara eran la única forma de acabar con Lena Luthor. Era una de las principales razones por las que había dudado tanto de que Kara se convirtiera en Supergirl. No era justo que ningún individuo, por poderoso que fuera, cargara con la responsabilidad de todo un planeta.

Por supuesto, Kara había insistido en que esa responsabilidad le pertenecía sin importar si lo quería o no. Y así nació Supergirl. 

 "¿Hubo suerte averiguando cómo inutilizó a Kara con esos rayos?" Preguntó James.

Winn asintió. 

"La verdad es que sí. Bueno... al menos tengo una teoría. Los poderes de Kara provienen del sol de la Tierra, ¿verdad? La radiación potencia sus células kriptonianas. Creo que Luthor encontró una forma de estropear ese proceso."

"¡Por supuesto!" Exclamó Kara. "¡Cielos, esos láseres eran del mismo color que el sol de Krypton! Cuando me golpearon, fue como si estuviera en Krypton de nuevo... sólo un poco más poderosa que un humano ordinario. Entonces, ¿cómo lo detenemos?"

"Eh..."

Alex sintió que su frustración regresaba. 

"¿No lo sabes?", preguntó.

Winn levantó las manos en un gesto apaciguador. 

"No estoy trabajando exactamente con muchos recursos aquí", comentó. "Puedo decir que los efectos siempre se desvanecerán con el tiempo... no pueden despojarte de tus poderes permanentemente. El sol amarillo de la Tierra siempre te los devolverá. Pero cómo detenerlos... no lo sé."

"¿Y el plomo?" James preguntó. "¿Eso no detiene la radiación... oh, cierto. Bloquearía nuestro sol de tener un efecto sobre Kara en primer lugar."

"Sí", Winn asintio de acuerdo. "Necesitamos una manera de bloquear sólo la radiación del sol rojo de golpearte. Seguiré trabajando en ello", prometió. "Tengo que admitir que fue una idea inteligente. Parece que funciona contigo casi tan rápido como la kriptonita."

James frunció el ceño. 

"¿Puedes evitar alabar a la xenófoba que intenta apoderarse del planeta?", preguntó, con voz amarga.

"No lo es." Alex giró la cabeza sorprendida mientras Kara continuaba, apresurada. "Xenófoba, quiero decir. No me ha dado la sensación de que odie a los alienígenas. Como Kara o Supergirl."

"No la defiendas, Kara", advirtió Alex. "Tuvo los mismos padres que Lex; ¿de dónde crees que salieron todas sus ideas sobre los alienígenas? Puede que Lena sea más paciente que Lex, pero eso no la convierte en una amenaza menor para ti o para otros alienígenas. ¿No son ellos la razón por la que ella quiere apoderarse del mundo en primer lugar?"