once

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agustín esperaba en la puerta del colorado con ansias

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agustín esperaba en la puerta del colorado con ansias. no sabía bien que le estaba pasando, solo tenía en claro que podía besar por horas a valentín sin cansarse y sin impedimiento alguno.
ingresó a la casa una vez su colorado le dio lugar y después de darle un abrazo se sentó en el sillón, dejandole espacio a valentín para que se siente a su lado.

- ¿mientras más lea más voy a mejorar la escritura? ― pregunta agustín mientras intenta leer de corrido un libro que valentín le dió
- exactamente, o al menos eso decían los videos que ví
- ¿viste videos para ayudarme?
- por supuesto, no te buscaste cualquier profe
- voy a tener que aumentarte el sueldo entonce' ― dijo, esta vez levantando la mirada, chocando con los ojos marrones de valentín que lo analizaban por completo.
- ni siquiera me pagas ― agustín rió y se animó a robarle un piquito al contrario. valentín quedó atónito, pero volvió a darle otro, esta vez profundizandolo más ― lo tomo como sueldo, espero que me pagues por clase ― el morocho rió nasalmente y un sonrojo se pintó en su rostro
- ¿de qué se trata el cuento?
- son varios cuentos cortos en un libro, quiero que leas "La casa de Asterión", es difícil de explicar. pero leelo y decime, a mi me parece triste.
- no me gustan las cosas tristes
- a mi sí, no hagas maña ― ambos rieron y el morocho dejo caer su cabeza sobre las piernas del colorado, mirandolo desde abajo, conectando sus miradas y tirandole un besito al aire a valentín, provocando que este se ría y convierta sus cachetitos en un precioso rosa carmín.

la tarde siguió así, ellos leyendo y dandose algún que otro beso y compartiendo risas contagiosas. al finalizar la clase agustín llevó a valentín a la granja de fede, donde paseaban entre los árboles de la mano, se acariciaban y volvían a besarse; una y otra vez.

 al finalizar la clase agustín llevó a valentín a la granja de fede, donde paseaban entre los árboles de la mano, se acariciaban y volvían a besarse; una y otra vez

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gaucho ― 𝗴𝗶𝗮𝗹𝗲𝗻Donde viven las historias. Descúbrelo ahora