agustín habia pasado todo el día lamentandose por la discusión que tuvo con el colorado, tenia algo en claro y es que era un cobarde. no tuvo la valentía suficiente como para afrontar la distancia y los problemas que podria conllevar aquello. le daba miedo, y su mente colapsó al enterarse que su papá volvía de regreso al campo a pasar unos días con él. ¿qué le diría a su padre? ¿se lo tomaria bien? realmente no sabía que hacer, y no sabía como plantearselo a valentín tampoco. después de que el colorado saliera corriendo esa noche, agustín intentó seguirlo, pero su celular sonaba constantemente marcando una llamada entrante ,"papá" suspiro al leer. sin más que hacer, volvió a su casa con ayuda de juan, la quinta quedaba a 20 minutos de su casa y los chicos habian salido a buscar a valentín en la camioneta de federico.
- que pasó con valen? ― habló juan, rompiendo el silencio - nada.... es que tengo miedo - miedo de qué? - de nuestra... no sé que somos... no quiero alejarme de él juan, pero prefiero hacerlo ahora antes de que las cosas se pongan peor, además, mi papá... - tu papá? - volvió hoy - y? - no sé... no sé como se vaya a tomar eso y me da miedo - no es tu culpa enamorarte gordo, y tampoco es malo que te hayas enamorado de valen, ya te lo dije. si es por la distancia vos sabes que en vacaciones yo voy y no tengo drama de llevarte conmigo, hay lugar para los dos, además valen tambien puede venir y pueden hablar por teléfono - si eso me dijo el, pero ― suspiró ― nada... tenes razón
el resto del viaje transcurrió en silencio, por más que juan haya intentado sacarle conversación, agustín parecia demasiado sumido en sus pensamientos.
y ahora, juan esperaba impaciente a que el morocho salga de su casa para ir a salvar su relación y además, despedirse de su amigo. al llegar a la terminal juan comenzó a llamar al colorado desesperado, la realidad era que habian llegado sobre la hora y puede que valentín ya haya estado subido al micro. mientras recorrian aquel lugar, juan logró divisar la llamativa cabellera naranja de valentín justo en la ventana de la boletería
- VALENTÍN ― gritó, llamando la atención de todo el mundo menos del chico. valentin ni se inmutó hasta que matias le toco el hombro dandolo vuelta por fin. una sonrisa se dibujó en su rostro al ver a su amigo, e inevitablemente mostró sus dientes al notar la presencia de agustín a su lado. corrió como si de un capitulo de floricienta se tratase y abrazó con todas sus fuerzas al morocho - hola juan amigo del alma no? nunca yo, hijo de puta ― y ahora valentín estaba abalanzado sobre juan, abrazandolo fuerte como si quisiera asfixiarlo - podemos hablar?... en privado? - vamos
quizá y solo quizá en aquel cúbiculo del baño de la terminal, las disculpas de agustín se transmitieron en besos en vez de palabras.
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