Confrontación (parte 1)

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Cerca del mediodía, Loki se encontraba en su oficina personal, ubicada dentro del edificio principal de Valhala. Ya que, aunque muchos miraran a menos al peliverde por ser omega, él hace tres años utilizó toda su "influencia" y "poder" como hijo de Odín para exigir que le asignaran una oficina privada, similar a la que tenía Thor.

Sobre todo, porque, aunque no era algo que el ojimorado hiciera muy seguido, lo cierto es que él había estudiado administración de empresas y por ello, a veces se ocupaba de las gestiones y la economía de algunos negocios menores del consorcio; aunque definitivamente, su trabajo principal casi siempre consistía en atender a cualquier nuevo inversor o similar en el que Odín pudiera estar "interesado" (motivo por el que conoció a Qin para empezar).

Por ello, ya que el peliverde no atendía muchos asuntos (pues su padre y hermano no le asignaban mucho trabajo), este no tenía un horario fijo dentro de la empresa y peor aún, desde que conoció al azabache, sus visitas a la misma se habían vuelto mucho más irregulares, por lo que él decidió ir esa mañana a su oficina, para atender sus "pendientes", pues a pesar de su apariencia, a Loki le gustaba tomarse en serio su trabajo (aunque fuera el poco que tenía) pues así demostraba que no era un simple junior mimado y tonto.

Por ese motivo, esa mañana el Nordic había ido a "visitar" su oficina, hiendo vestido con un pantalón de vestir y un chaleco negro, una camisa morada y una corbata blanca (luciendo así de forma profesional pero encantadora); aunque tras un par de horas revisando algunos papeles y leyendo varios artículos que le interesaban, él estaba a punto de terminar con todo su trabajo "atrasado"; lo cual era excelente pues había quedado de recoger al emperador para acompañarlo al hospital donde trabajaba Tesla.

No obstante, cuando comenzó a apagar su laptop y acomodar todo sobre su escritorio, para su gran sorpresa, entró su hermano mayor a su oficina -Buenos días Loki...- dijo el pelirrojo con calma mientras se acercaba a su escritorio -Que bueno que te encuentro porque quiero que te encargues de algo- comentó Thor al tiempo que colocaba frente al ojimorado una carpeta con información.

Por su parte, Loki solo levantó una ceja algo fastidiado por el sorprendente tino de su familia para siempre arruinar su ánimo (aunque siendo sinceros, para el peliverde bastaba encontrarse con cualquiera de ellos para fastidiarse) -mmm... pues ya que, "jefecito"- comentó Loki con ironía, sentándose nuevamente al frente de su escritorio para estudiar los papeles que le acababa de entregar el más alto- ¿De qué se trata? Por qué debe haber un motivo por el que tú mismo no puedas encargarte de esto...-

-No dije que no pudiera. Dije que quiero que tú te encargues de esto, por favor- contestó con calma el ojiambar mientras tomaba asiento frente al menor -No es nada complicado: solo debes terminar de coordinar de los detalles del trato y el diseño de unas farmacias que Olympus Farm va a colocar en algunas de nuestras plazas...- Estas palabras de inmediato causaron que el omega levantara la mirada de los papeles, para dirigirla al más alto, pues algo comenzaba a olerle mal...

-Espera... ¿y quién es el representante de Olympus con el que trabajaré en todo esto? -cuestionó Loki al tiempo que entrecerraba los ojos con un tono de voz cargado de desconfianza.

-Hermes por supuesto- respondió el alfa tranquilamente. Aquella respuesta tan monótona de parte del mayor, comenzó a llenar de frustración al peliverde.

-Yap...- dijo el ojimorado mientras cerraba la carpeta para luego ponerse de pie- ¿y el viejo sabe de esto? Porque... aunque ya seas el GRAAN vicepresidente de Valhalla, te recuerdo que Odín sigue siendo el presidente vitalicio de TOOODO esto- comentó con mucho sarcasmo al tiempo que comenzaba a rodear su escritorio llevando en su mano la carpeta –¿O acaso tan seguro estas de que tu "papito" te ama TAAANTO que no te va a castigar aunque organices reuniones secretas entre Hermes y yo?- para ese punto el omega ya se encontraba parado al lado del pelirrojo pero este solo seguía mirando hacia el frente con su típica expresión estoica.

Durante una miradaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora