Capitulo 2

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Recordaba ese día perfectamente, ese día, el mas desagradable y triste de mi vida, cuando perdí a mis padres, el día que nos quedamos huérfanos de padres. Me acuerdo que al día siguiente de leer la carta se nos llevo al judgado para saber con quien nos quedaríamos, nos dieron a elegir entre nuestra abuela o nuestro hermano que para ese entonces ya era mayor de edad ( 20 años). Elegimos quedarnos con nuestro hermano, apenas conocíamos a nuestra abuela y no nos queríamos separar de nuestro hermano, ya que a el no le cae muy bien y aprovechando de que era mayor de edad podía vivir solo. El podría ir diciendo que le elegimos para fastidiar pero realmente no lo quisimos por eso, nosotras le necesitamos, estábamos pasando por un mal momento y queríamos una persona mayor que nos apoyara y no que nos dijera que teníamos que comer porque estábamos muy desnutridas.

Cualquiera diría que estaba viendo las hojas caerse de los arboles cuando realmente estaba recordando un mal momento. Sentada en el suelo enfrente de la ventana de un hermoso día de otoño, no había sol, las nubes lo estaban tapando, amenazando con llover, pero aun así había bastante luz para ver a cualquiera que paseara por las calles o estuvieran sacando a su perro por el parque. Mi hermana siempre quiso tener un perro, pero a mi hermano nunca le gustaron, dice que cuando ella se independice podrá tener todos los perros que quiera, pero mientras viva en su casa no.

De repente un camión de correos paro enfrente de nuestra casa, era una carta. Mire extrañada, ¿para quien seria? Que curiosidad. Llamaron al timbre y rápido me levante para abrir.

-¡Ya voy!

Abrí la puerta y un joven ( y guapo) estaba esperando en el otro lado.

-¿Valeria García?- ¿Para mi? Que raro, a lo mejor es alguna denuncia por ruido de cuando me ponía música a todo volumen cuando mis hermanos se iban al centro comercial.

- Si soy yo.

- Firma.-Firme, me dio la carta y se fue. Que frio

Me pregunte que era. Una denuncia no era, ni tampoco una carta de algún familiar dando dinero. Me senté en el sofá y empecé a abrir la carta.

- ¿¡Quien era!?- Se escucho del cuarto de mi hermana.

-¡Una carta para mi!

Se escucharon pasos de una niña corriendo, y aunque tuviera 14 años se ilusionaba cuando escuchaba la palabra carta. Cuando Esmeralda se sentó y la termine de abrir, la empecé a leer, no era una de esas cartas que te dan una mala noticia, todo lo contrario, era una buena, muy buena.

- ¡¡¡AAAAHHHH!!!- Empecé a gritar estaba super emocionada, no como mi hermano que cuando empezó a escuchar mis gritos bajo de su habitación corriendo, asustado.- ¡¡ME HAN ADMITIDO!!

Me habián admitido en las pruebas para ser chef del restaurante mas lujoso de España.

- ¡¡SII!!- Mi hermana grito, parecía que en vez de haber sido admitida yo, hubiera sido admitida ella.

-Enhorabuena, hermanita- Me revolvió el cabello y parando cuando recibió un quejido por mi parte- ¿Cuándo son las pruebas?

- Dentro de un mes, así que tengo que estar preparada hasta entonces, ya veréis vais a acabar el mes reventados, os voy a hacer tanta comida que no os va a entrar.

-¡Si!¡Si!¡SIII!- Dios mío si alguien veía que se estaba comportando así porque iba ha hacer comida, pensaría que en esta casa no nos dan de comer.


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Gracias por leerlo <333

Espero que os haya gustado aunque haya sido un poco corto, pero es que no se me viene nada a la cabeza y es muy difícil escribir esto :(

Glow heartsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora