Valeria, una chef de un restaurante de lujo con un bondadoso corazón la apuntan a un concurso de comida participando en nombre del restaurante, donde todos confían en ella .Pero lo que no sabe es que allí conocerá al amor de su vida, un joven apuest...
Faltaba un día para las pruebas y estaba super emocionada. Se podría decir que estaba saltando por las paredes (hablando metafóricamente), pero en verdad lo único que hice esa mañana fue quedarme encerrada en la cocina con Esmeralda, yo cocinando y ella comiendo y estudiando. Es, tenia un examen la siguiente semana, de historia, y en mi opinión, lo llevaba bastante bien.
-Oye, ¿y que tal con Izan, ehh?-Me había olvidado de el, Izan es el hermano de la mejor amiga de Esmeralda. Después del café en mi casa quedamos para tomar algo al día siguiente y desde ese día no le he vuelto a ver.
- ¿Qué insinúas?
-A ver, Val, es muy guapo y se ve que esta interesado en ti. Podrías intentar conocerle, como amigos.- Sabia que quería decir otra cosa mas.
- Sigue
- Es solo eso, bueno a ver no te vendría mal tener novio, y así nos dejas a nosotros en paz.
- ¿Acaso te quieres librar de mi?- No me miro, solo se dispuso a mirar al techo.- Serás
No pude terminar la frase porque justo llamaron al timbre.
- ¡Ya voy yo!- Dijo Esmeralda.
Se escucho la puerta abrirse y cerrarse. Silencio.
-¿Quien era?- Se escucho desde el cuarto de mi hermano.
-¡ Son Izan y Leire!- ¿Izan? ¿Qué hacia el aquí? Leire lo entiendo, es la mejor amiga de mi hermana, ¿pero Izan? A lo mejor solo había venido para traer a su hermana.- Estáis de suerte- empecé a escuchar atrás mío- mi hermana esta preparando mucha comida.
-¿A si?- Ese era Izan.- ¿Y que celebráis?
- Nada, solo que mañana tengo unas pruebas para ser chef de un restaurante aquí de la zona.
- No sabia que para ser chef tenias que pasar unas pruebas- Dijo Leire.
- No para cualquier restaurante, pero si para uno de lujo. Bueno esto ya esta. Es, llama a Ronan.
. . .
Izan se fue pronto, al parecer solo había venido a traer a su hermana y se iba al trabajo. Trabajaba de enfermero, que oportuno, si su hermana se hacia daño el sabría que hacer, lo malo es que trabajaba muchas horas y su hermana siempre se tenia que quedar con sus abuelos o con nosotros ya que sus padres hacían muchos viajes de trabajo. Por eso, Leire se estaba quedando con nosotros los días anteriores.
Me fui a mi habitación a ordenarla ya que por la tarde iba a venir Sam, y aunque fuese mi mejor amiga y sabia que yo no era muy ordenada, quería que viera que había cambiado (mentira) y ahora diese buenas vibras como las chicas de Pinterest o Instagram. Lo que mas tenia que recoger era el escritorio lleno de libros de cocina, apuntes, bolis y mas cosas. Si me pongo música tardare menos y será mas divertido pensé, aunque muy en el fondo sabia que me iría a distraer e iría a bailar enfrente del espejo en la primera canción que me saliese en aleatorio.
Después de recoger fui a darme una ducha fría para despejarme, relajarme de el sentimiento de que alguien me vigilaba. Cuando me metí en la ducha sentí ese sentimiento aun mayor, aunque por suerte mía, nosotros teníamos una puerta de cristal para la ducha en vez de una cortina y así podría ver quien entraba al baño. Y aunque tenia diecinueve años, seguía creyendo en esos cuentos chinos que me aparecían de vez en cuando en Tik Tok, en los que entidades flacas y blancas te espiaban. Y esos recuerdos que volvían por la noche eran unas de las razones por las que no podía dormir, y cuando si podía, se me aparecían en pesadillas.
Cuando salí de la ducha, llamaron al timbre y abrió mi hermano, pensaba que era Sam, pero al escuchar el estúpido saludo que hacia mi hermano cada vez que veía a un amigo, me confirmo que no estaba en lo correcto. Me vestí y salí del baño, llevaba una camiseta de Doraemon y unos pantalones azules, parecía estúpido pero era mi pijama favorito, aunque yo ya no veía Doraemon, pero de pequeña me gustaba, no era mi serie favorita, pero me podía pasar dos horas enfrente del televisor viéndola.
-Hola, Vale- Ahí estaba, Álvaro, el mejor amigo de Ronan, con esa sonrisa "coqueta" con la que esperaba enamorarme perdidamente de el.
- Hola, Al- El pobrecito se sonrojo, algunas veces me daba pena, no quería romperle el corazón pero no era mi tipo y me sacaba unos cuantos años mas.
- Venga Al, no intentes conquistar a mi hermana, no ves que ella no te quiere. Vamos a lo que has venido
-Bueno había que intentarlo.
Se fueron caminando con paso rápido a la habitación de mi hermano, no se que se tramaran esos dos pero hoy no era día de descubrirlo. Sam estaba a punto de llegar, me fui corriendo a mi cuarto para ver que estaba todo en orden, cuando me di la vuelta estaban allí mi hermana y Leire.
-¿Podemos coger tu ordenador, Val?- Dijo mi hermana mirándome con cara de pena
- No, que, no no.¿ Para que lo queréis?
-Para jugar con el
- No
- ¿Porqueee? - Ahora hablaban las dos, mirándome con cara de pena
- No, no y no, mi ordenador es muy caro, y no quiero que me lo rompáis como el otro ordenador.
-Pero esta vez te lo cuidaremos, porfaaa.
- No y punto. Y como os vea con el ordenador os vais ha enterar. ¿Queda claro?
-¿Entonces a que podemos jugar?- Que pesadas.
-Hay juegos en el sótano, mirad cual os gusta mas.
De repente el timbre sonó y espere que fuera Sam salvándome de aquella situación. Corrí a la puerta para abrirla.
- ¿Qué cojones?
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Holaaa
q tal os ha parecido este capitulo??
lo siento por tardar tanto en publicarlo, pero tenia muchas cosas que hacer :(
