Capítulo O7

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─JungKook es un Omega, un Omega puro.

Las palabras de Jin se quedaron flotando en el aire por un momento, hasta que JungKook se levantó de golpe y comenzó se alejó del escritorio.

─¡No! ¡Esto es una locura, una maldita locura! yo no... yo no soy como ustedes, es imposible yo...

─Tranquilo, JungKook, respira, le va a hacer daño al bebé─. Dijo JiMin mientras se ponía de pie y trataba de calmarlo.

La mención de su hijo logró tranquilizarlo, pero aún se podía notar alterado, y JiMin reaccionó por instinto, lo abrazó al tiempo que comenzó a liberar su aroma, JungKook se dejó envolver en los fuertes brazos, mientras el suave aroma del alfa lo relajaba.

─JungKook se que esto es difícil─. Comenzó a hablar Jin cuando lo vió más sosegado─. Toda tu vida has pensado una cosa y ahora sabes que no fue así. Pero no lo veas como algo malo, al contrario, ser lobo tiene sus ventajas.

El rubio solo escuchaba, su capacidad de habla estaba adormecida por el momento, JiMin lo soltó de su agarre y lo llevó a sentarse nuevamente.

─Jin, nunca me había topado con una situación así, ¿le afecta en algo que su lobo no se haya desarrollado?

─No necesariamente, si fuera un Omega común tal vez sí sería un poco más delicado, pero estamos hablando de un Omega puro, su lobo no está inactivo del todo, solo está o estaba dormido. Y al entrar en contacto contigo que también eres un alfa puro despertó. Por eso es que quedó en cinta. Lo voy a canalizar con el médico especialista en lobos, él podrá ayudarlos mejor.

JiMin asintió y volvió su atención a JungKook que permanecía en silencio, le preocupaba que todo eso le afectará al bebé, y también pensaba en la reacción que su lobo había tenido desde que lo había conocido, hasta el momento se había negado a escuchar lo que para él eran tonterías sin sentido, pero ahora.

─Jin, ¿hay alguna posibilidad de que sea un error?─. Preguntó JungKook.

─No hay falla, JungKook, pero ya te dije que no debes de preocuparte el que seas un Omega no es malo, pero ya de eso te hablara el especialista.

JungKook asintió, tratando de mantenerse tranquilo. Jin llamó al especialista y los invitó a ir a verlo, el beta que los atendió le explicó a JungKook todo lo que había pasado con su lobo y lo instó a buscar sus orígenes, entre las manadas solo las familias de más renombre y antiguas eran las dadoras de Omegas y Alfas de sangre pura.

También le dió un medicamento que le ayudaría a su lobo a desarrollarse de manera sana y que no afectaría a su cachorro, JiMin que no se había separado él ni un segundo, prestó atención a cada cosa que dijo el médico, esperó a que terminara de explicar, antes de externar sus propias dudas.

─Doctor, ¿qué pasa con su destinado?

JungKook volteó a verlo con sorpresa pues había leído el término cuando había buscado la información sobre él.

─Con seguridad en cuanto su lobo termine de despertar, y al ser un adulto joven en perfecta condición, su destinado lo llamará si están cerca.

JiMin ya no dijo nada más, sobre sus propias dudas sobre el comportamiento de su lobo, ahora lo importante era JungKook y ayudarlo. Terminaron la consulta y volvieron a la mansión, ninguno de los dos habló durante el camino.

─JungKook, debemos hablar─. Le dijo en cuanto llegaron.

─Ahora no por favor, necesito procesar que está pasando, mi cabeza es un caos ahora, durante veinticinco años he creído ser un humano común y corriente y ahora resulta que soy algo distinto.

─Lo entiendo, pero creo que debemos de comenzar a buscar tus verdaderos orígenes, dijiste que el medallón que cargas lo tienes desde pequeño, tal vez esté relacionado con tu verdadera familia, si me lo permites puedo investigar.

El rubio asintió, se quitó el collar y se lo entregó antes de subir las escaleras y entrar a la habitación donde había estado. JiMin lo vio alejarse, mientras se preguntaba si lo que sentía su lobo sería cierto.




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Un Omega, el solo pensar en esa palabra lo hacía sentirse extraño, no sabía nada de ese mundo del que se suponía era parte, al que se suponía pertenecía. Las dudas sobre su propio pasado ahora lo atormentaban más, ¿Por qué sus padres lo abandonaron a su suerte? ¿Que no se supone que ellos debían de saber que le haría daño no estar cerca de ellos?

Su teléfono sonó y lo sacó de sus pensamientos, su mejor amigo lo llamaba y no dudo en contestar, necesitaba de alguien conocido que lo apoyara y ayudará a pensar en todo lo que le estaba sucediendo.

─Kookie ¿dónde estás? Te fui a buscar a la escuela y me dijeron que pediste permiso, estoy en tu casa y la chismosa de tu vecina dijo que desde anoche no estás.

─JiMin me obligó a venir con él a su casa, pero eso ahora no es lo importante, Tae, necesito verte, ¿puedes venir?

─Claro, pásame tu ubicación y voy para allá.

Quince minutos después, Taehyung estacionó su auto en la entrada de la mansión, vio con asombro el enorme lugar, antes de entrar. Una chica lo hizo pasar mientras le avisaba a su amigo, JiMin iba saliendo de su despacho cuando lo vio.

─¿¡Quién se cree usted para obligar a JungKook a vivir aquí!? ¡No es su dueño!

─¡No lo obligue! Pero su lugar es aquí, que no se le olvide que por culpa de ustedes él lleva a mi hijo en su vientre.

─¡Eso no le da ningún derecho a imponerse sobre él!

Los gritos de ambos alertaron a JungKook que iba bajando, y a Hoseok que entraba a la casa en ese momento.

─¿Qué está pasando aquí?─. Dijo llegando al salón al tiempo que JungKook.

─¿Tae, qué pasa?

─Pasa que este imbécil no puede hacer lo que quiera contigo solo porque vas a tener a su hijo, JungKook y yo no lo voy a permitir.

─JiMin explícate, ¿cómo que estás obligando a JungKook?

─Las cosas no son así, luego te explico, Hoseok, ahora déjanos solos.

─No, señor, aquí me quedo y me vas a explicar que demonios pasa.

JiMin bufó furioso, entre su terco hermano, el tipo que se le enfrentaba y sus propios pensamientos sobre JungKook lo tenían a punto de explotar.

─Tae vamos a hablar a otro lado por favor yo te explicaré lo que sucede─. Dijo JungKook tratando de mediar la situación.

Su amigo asintió y lo siguió al patio, bajo la atenta mirada de JiMin, que gruñía en su garganta con molestia.

─Aplaca a tu lobo, ese humano no es rival para ti, hermanito. Ahora dime qué está pasando y quiero la verdad.

Mientras el alfa se sentaba a explicar todo lo que había sucedido desde el momento en que la junta le había ordenado tener un heredero, JungKook le explicaba a Taehyung toda su situación, su amigo no podía creer todo lo que estaba sucediendo, era algo de locos.

─Bebé, esto es increíble, pero no estás solo lo sabes, yo siempre voy a estar contigo─. Dijo mientras lo abrazaba.

JiMin que iba con Hoseok a buscar a JungKook vio negro al momento en que el castaño abrazo al chico, no supo que pasó solo soltó un gruñido de posesion y se abalanzó contra ellos.

─¡Suéltalo!─. Gruñó mientras el castaño cayó al piso sorprendido.

─¡JiMin!─. Gritó JungKook cuando vio las intenciones del alfa de golpear a su amigo.

─¡No lo vuelvas a tocar, él es mío, es mi Omega!








pregnancy › jikook.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora