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VII

Taylor había regresado un poco exhausta de sus shows en México, había tenido 4 fechas magnificas que la ayudaron a recargar energías para el ultimo tramo de la gira de 2023, mientras que por otro lado Travis se había mantenido ocupado con sus practicas en Kansas. Su pequeño secreto todavía no había sido descubierto, para tranquilidad de ambos, ya que podían conocerse sin apuros, sin expectativas y sin que nadie mas interfiriera.

Las finas gotas de lluvia caían abrumadoramente sobre la ciudad de Nueva York y la cantante se encontraba acurrucada en el sillón con la compañía de sus tres gatos. Cuando terminaba un fin de semana de shows siempre prefería permanecer en casa haciendo lo menos posible, ya que sus pies todavía dolían a causa de los altos zapatos que usaba al bailar, y también su garganta estaba un poco tensa después de tres horas seguidas entonando cada canción. Con una de sus manos revisaba su teléfono mientras que con la otra dulces caricias eran depositadas sobre la barriga de Benji, sus ojos se deslizaban de tweet en tweet intentando matar el tiempo, pero sin darle demasiada importancia tampoco.

No había visto a Travis hace casi dos semanas, si bien los mensajes y llamadas no habían escaseado lo extrañaba tanto que sentía que no podría resistir otra hora mas sin estar entre sus brazos. Pero sabía que ambos tenían una agenda demasiado ocupada y que no tenia nada de que preocuparse ya que él había tomado cada oportunidad que se le presento para dejarle en claro que realmente quería estar con ella. O eso pensaba.

Cuando sus ojos comenzaron a hacerse pesados hizo todo a un lado para ponerse de pie, no era horario para quedarse dormida asique se giro sobre sus talones en busca de una reconfortante ducha. Sus pasos eran cautelosamente seguidos por unas minúsculas patitas peludas que no querían dejarla sola, ella solo sonrió, era un regalo del cielo tener a tres mascotas que le brindaran tanto cariño. Al llegar al baño se quedo parada bastante tiempo frente al cristal que reflejaba su imagen, a pesar de las casi invisibles bolsas moradas que yacían bajo sus ojos ella se sentía bien, después de 6 años difíciles había llegado a una paz mental que nadie o casi nadie podía corromper. Coloco música en su celular y se quito la ropa para meterse en la bañera.

Se dejo envolver por la calidez del agua y dejo caer su cabeza hacia atrás mientras buscaba en su Spotify el álbum perfecto para este momento. El agua estaba dando resultado, sus pies comenzaban a sentirse mas aliviados y su cuerpo no se quedo atrás. Amaba estar en tour sin importar que tan destruida terminase, siempre daría el 200% de si para que todos los que hayan comprado un boleto tuvieran la mejor experiencia de su vida, era lo que hacía y su pasión mas grande. Pero era hasta un poco abrumador dar tantos pedacitos de tu vida a personas que quizá no lo apreciarían de la manera que ella lo hace, o que quizás no le den de regreso la misma emoción y calidez. Y no, por supuesto que ella no hablaba de sus fans, sino de las personas que a lo largo de su vida conoció y nada de lo que ella les ofreció para que se queden alcanzo.

Pero no quería pensar mucho en aquello ahora, una vez en alguna parte leyó que uno atrae aquello a lo que mas le teme, y lo ultimo que anhelaba en estos momentos es rebobinar el casete y volver a lugares por los que ya había caminado.

—¿Si? —Dijo atendiendo una llamada que llego justo a interrumpir sus pensamientos —¿Hola?

—Nena, soy Travis.

—Oh, ¿Ya estas aquí? —pregunto ansiosa, después de tantas horas privada de su compañía, lo que mas deseaba era verlo. —Salgo de la bañera y bajo a abrir.

—No Taylor, algo surgió y no he salido para NY aun, llamaba para decirte que no se cuanto me retrasare.

—¿Paso algo?

—Nada de lo que tengas que preocuparte, cuando termine me tomare un avión hasta allí, ¿Si?

—Está bien... — no tenía ánimos ni siquiera después de estos de preguntar que era aquello tan importante para el que lograra hacer que moviera asi sus planes, pero seguramente todo tendría una explicación, o eso creía —Llámame ni bien estes viniendo, te quiero.