XI. Pollita

166 32 3
                                    

«Plan»

Mirando a Kaia, la cuál está vestida de pollita y me hace querer tomar sus mejillas para comerlas, es la niña más tierna que jamás había visto, su coleta alta, su falda amarilla con plumas pegadas, la blusa de tirantes, las medias y los zapatitos del mismo color, me hace sentir el padre más orgulloso y emocionado de todo el preescolar, pero se que no es cierto, todos los padres aquí tenemos la misma visión, nuestro hijo es el mejor.

Y lo es, Kaia es la mejor a mis ojos, a los de Nina que le toma fotografías y mamá junto a papá que le animan a posar. Es su primer evento, el primero de muchos que no voy a perderme y puedo sentir ahora la emoción correr por mis venas, ya quiero verla participar en esa pequeña presentación de animalitos de granja.

Creo que voy a llorar.

-- Es hora de que todos los papis pasen a sentarse al frente, los demás familiares pueden disfrutar del evento en los lugares de atrás.

La maestra mayor anuncia por el micrófono y puedo ver cómo todos comienzan a andar, a lo lejos, veo como Nayla viste de una mariposita morada mientras que Mew le carga, Gulf va a su lado, y no puedo creer que ni para este evento su padre biológico haya venido. Mew hace un mejor trabajo después de todo.

-- ¡KAIA! -- grita ella.

Mi pollita voltea para saludarla, agita sus manos y recibo el saludo de Gulf junto con el de Mew.
Veo a Kaia, pero a la vez ella voltea al frente, hacía la puerta. Así que me pongo en cuclillas.

-- Tal vez él tráfico sea muy largo... -- le veo -- te prometió anoche que vendría ¿No? -- ella asiente

Porque así fue, anoche, Mean le prometió venir y ser puntual, son las nueve con quince, pero él no se aparece, no me manda algún mensaje o siquiera llama. Si no viene, voy a matarlo.

Me pongo de pie, Nina me ve furiosa y mamá junto con papá están en silencio.

-- Nosotros nos merecemos mucho más una silla allá enfrente, que él. -- cruza sus brazos -- además, ¿En donde está?

-- Nina... -- mamá le regaña

-- Es cierto. -- le ve -- No se merece aquel lugar, mamá. ¿Tres semanas hablando tras un celular y ya se merece el cielo?

Suspiro, se que tal vez tiene razón pero Kaia le quiere ahí, en esa silla y yo no puedo quitársela. Se que todos se molestaron cuando supieron lo que pasó, eso de que tuve que someter a Kaia a una prueba de paternidad, papá se molestó mucho y Nina casi fue a sacarle los ojos. Mamá ha sido la más sensata pero se le nota la molestia a través de sus ojos, tuvieron que aceptar que Kaia quiere una relación con él, pero no lo entienden del todo, les cuesta aceptar al igual que a mí al principio, que sea como fuese es su papá y Kaia no tiene la culpa de nada.

-- ¡Ahí viene! -- grita mi hija que estaba perdida en su mundo mirando hacía la puerta, todos volteamos -- ¡P'Mean! ¡Aquí!

Agita sus brazos y da pequeños brincos, su falda rebota pareciendo que quiere volar pero le faltan las alas. Vemos cómo Mean viene caminando, se ve incómodo pero no se rinde en acercarse.

-- Hola... -- saluda al llegar -- perdón por tardar pero había tráfico..

Solo mamá le saluda a fuerzas porque papá y Nina se voltean. Me ve un segundo, desvío la mirada así que él se acerca a Kaia, tomándola en brazos, le da un beso en la mejilla que ella recibió gustosa.

-- Que hermosa. -- le alaga -- Mi pollita es la más adorable de todo el preescolar.

Kaia sonríe, yo concuerdo con él por primera vez y aquella Miss nos pide de nuevo ir a tomar lugares.

¡PAPÁ EN APUROS! MP ADAPTACIÓN Donde viven las historias. Descúbrelo ahora