12

264 38 11
                                    

—Oh Riki .-se expresó con tristeza la monja —¿por qué nos dejaras? ¿Qué le diré a los niños?

El pelinegro solamente suspiro mientras jugaba con sus manos. Hoy había decidido ir a la iglesia para avisar su retiro, quería salir de ahí lo más rápido posible para no toparse con Jake.

Aunque quería verlo una última vez, pero se conocía perfectamente y si lo hacía caería otra vez, y ahora solo quiere lo mejor para él y su hijo. Le dolía mucho dejar a Jake pero este... prefiere un puesto que a lo que quiere su corazón.

—y-yo realmente no quiero dar detalles madre .-balbuceo y miró a un cristo en la pared —solo dígales que... es para que su lindo Ni-Ki este bien .-sintió sus ojos cristalizarse y los cerró de inmediato —tengo que irme... muchas gracias por el tiempo que me recibieron aquí y por todos los ratos hermosos que pasamos

—no tienes nada que agradecer Riki, sabes que esta es tu casa y las puertas estarán abiertas cuando quieras, por favor visítanos de vez en cuando

Riki asintió lentamente pues él ya no iba a regresar a este pueblo. Se levantó del asiento para abrazar a la madre y así salir de la oficina viendo a todas direcciones caminando a un paso rápido.

No vio a nadie y eso le hizo tranquilizarse pues es lo que quería.

Un poco.

Soltó un suspiro caminando a dirección del trabajo de su hermano, lo esperaría hasta que saliera y así ir alguna plaza o lugar para platicarle todo.

Tenia miedo, ahora tenía miedo de contar sobre su embarazo y le rechazarán igual que Jake.

Pero sabía que Seongie no era así, por eso su amigo Jungwon se había enamorado de él.

Se sentó en la banqueta frente al local de trabajo de su hermano, faltaban 10 minutos para su salida. Paso su mirada a las calles las cuales eran muy hermosas, esa imagen la guardaría en su mente por siempre, las casas de colores llamativos, de las cuales colgaban papel picado unas a otras y así hacer una linda decoración colgante.

Le dolía irse de su pueblo donde había nacido, crecido y vivido muchas etapas lindas y como malas. Pero tenía que irse

Por él y por su próximo bebé.

—¿Riki? .-levantó su vista y sonrió al ver a su hermano frente a él —¿Qué haces aquí pequeño?

—oh uhm yo...-Los nervios volvieron —t-tengo que hablar contigo Seongie

El mayor ladeo un poco su cabeza y después asintió un tanto lento

—esta bien Ni-Ki~ no tienes porque ponerte así nervioso y no digas que no lo estas, te conozco .-soltó una pequeña risa —vamos a la casa para hablar allá .-estiró su mano al menor para ayudarle a pararse

—oh no hyung... es un tema muy .-hizo una mueca dejándose ayudar y así estar de pie —m-muy delicado y no quiero que mamá se de cuenta

—me estas asustando tonto .-balbuceo con un puchero y después asentir —vayamos al...

—No! Mejor aquí ya que en otras partes hay mucha gente .-Le interrumpió

—ay... Ni-Ki desde hace tiempo andas muy bipolar .-Le abrazo por los hombros —vamos dile a tu hermano mayor que pasa

—Seongie y-yo... me iré del pueblo .-soltó sin rodeos, giro a ver al mayor el cual tenía un rostro sin expresión alguna —estoy... esperando a uhm... u-un b-bebé .-sus manos temblaron

—a ver, a ver, Riki ¿que? Mi cabeza no puede procesar lo que acaba de escuchar .-frunció el ceño llevando su mano a su frente —¿irte de aquí? ¿Por qué? ¿Quién te embarazo? ¿Qué? ¿Cómo que embarazado? ¿Cuando? ¿Queee? .-repitió histérico y después taparse la boca

𝐏𝐄𝐂𝐀𝐃𝐎 // 𝐉𝐀𝐄𝐊𝐈Donde viven las historias. Descúbrelo ahora