Vive en nosotros

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Existes en versos,
Te adueñas de ellos,
Tiñes con tus ojos marrones el folio,
Y me dejas ahí,
Imaginando que lo he escrito yo.

Debes saber que una parte de mi alma está perdida en algún lugar contigo,
Por eso debo regresar por ti y por mi,
Uniéndonos una vez más,
Volviendo a decir: Si.

Te he imaginado,
Miles de escenarios,
Miles de posibilidades en que tu me respondas un beso,
O una sola posibilidad en que tu y este pobre preso,
Puedan cumplir sus anhelos.

Dices desprenderte de todo lo que fuimos y te mientes,
No puedes,
Eres cautiva tanto como yo de esto,
Y morir no está en sus planes.

Es tan vivo,
Aunque no se note,
Aún vive y se desliza entre corrientes de viento,
Esa que peina tu cabello cuando sales,
Te recibe en las mañanas al despertarte,
En las noches antes de dormir se cuela por tu ventana acariciando tus fríos pies,
Te da una caricia y desaparece otra vez.

Nunca le dimos nombre,
Siempre nos divirtió sentirlo más presente entre los dos,
Tanto así,
Que rompía las barreras,
Fuimos capaces de sentir un poco más
Nada era singular,
Abrazaba,
Nos abrazaba...
Con un tacto etéreo,
Sin peso en los huesos.

Era capaz de herir,
Pero también de hacernos feliz,
Ahuyentaba pensamientos,
Capacidad racional,
Volvernos un poco tontos,
Risueños y elocuentes,
Nos ponía sus manos en las espaldas empujandonos al placer más y más.

La última vez que nos vio,
Lloró,
Desangra aún,
Está perdida,
Sigue desojando las flores,
En su afán por decidir si volverá a buscarnos,
Pero esta más cerca de ti,
Aunque no la puedas ver,
Esta ahí contigo...
Sigue esperando por mi.

Ander Leefrank

Pensamientos PerdidosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora