Las luces de los policías afuera de la casa, los vecinos curiosos y un cadáver fueron la noticia de primera plana de ese día.
....
— ¿Son novios?— le preguntó la chica
— Yo diría que...—
— Si, eso, somos novios, desde hace 3 años ¿Verdad bonita?— respondió mientras apretaba un poco el brazo de la chica.
— Definitivamente, monstruo— dijo con una sonrisa de esas que siempre traía
Empezaron a caminar lejos de aquel lugar, dejando a la chica atrás.
Realmente no eran nada, nada más allá de un obsesivo y su víctima, se conocieron hace 6 años en la universidad y desde entonces él se volvió su parásito personal.
Al inicio fueron amigos, pero pasó el tiempo y esa relación se deformó, él empezó a ser violento, pero fue muy gradualmente.
— ¿Por qué te vistes así? ¿Acaso te gusta que todo el mundo te voltee a ver? Eso es ser muy ofrecida—
No, jamás tuvieron una relación amorosa, pero él se volvió posesivo y cuando ella intentó poner límites él solo pedía perdón.
— Lo siento, no se que me pasa, de verdad, lo lamento, no lo volveré a hacer Eli, lo prometo, pero también entiendo si te quieres alejar de mi, adelante, eso es lo que siempre pasa, es porque soy estúpido—
— No, no digas eso Adrián, te perdono, descuida—
Elisabeth, una chica alegre, con muchos amigos, que amaba salir a bailar e ir a conciertos. Conoció a Adrián por un trabajo de equipo y desde ahí empezaron a hablar primero por mensajes y luego en persona. Con el tiempo él le contó su historia.
— Mi madre me abandono con mi padre y él es alcohólico, siempre está enojado, cuando era más chico solía golpearme, por eso me fui de casa—
Elisabeth sintió lastima por él, al conocer muchas cosas de su vida tuvo la necesidad de apoyarlo siempre.
— No, es que él es así porque no sabe cómo tratar a la gente, le da miedo que lo lastimen—
Siempre justificando cada acción de él.
— Ya se, pero además siento que ahora que lo conozco mejor entiendo muchas cosas de la vida, no todos viven vidas fáciles—
Pero parecía que él solo la estaba adiestrando.
— Tu hablas desde tu vida fácil, no sabes de la vida, la vida es difícil Elisabeth, no todos tenemos vidas fáciles como la tuya—
Y así fue como lentamente ella se dejó envolver por un montón de mentiras, ya casi no tenía amigos, o mejor dicho, solo él era su amigo. Y su verdadera cara salió.
— Tu, eres mía, ¿Oíste? Y no importa a dónde huyas, siempre, siempre te voy a encontrar—
Ahora que lo conocia más, sabía lo peligroso que podía ser contradecirlo, intentó escapar de él llendose a vivir a otra ciudad, incluso intentó poner alguna denuncia, pero al no tener pruebas era difícil. Terminó viviendo con él a pesar de no ser nada, solo vivan juntos y solo ella trabajaba.
Pero hoy era el día, había dejado que la golpeara más de lo normal y creía tener las pruebas suficientes para librarse de él, solo quedaba una cosa más por hacer... El vídeo...
Acomodó la cámara escondida y empezó a grabar una tarde normal.
— La comida— dijo mientras ponía el plato en la mesa.
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Finales Tristes
RandomPequeñas historias que se me ocurren y ocurrieron, no tienen gran contexto más allá del momento, pero quizás salga alguna buena historia de aquí algún día. La vida suele tener episodios tristes y trágicos, estos solo son algunos. "Quizás algún día...