Capitulo 8: El escudo de la Ira y Lecciones Aprendidas

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Era de noche y se podía ver el camper estacionado junto al camino. Al entrar, todos estaban dormidos. Ben descansaba junto a Raphtalia, y a su lado estaba el martillo que le había regalado Raphtalia. Con una leve sonrisa, Ben bajó de la cama y se acercó a Raphtalia, que aún dormía. Observando a ambos lados, tomó suavemente la mano de Raphtalia, queriendo medir el brazalete que ella llevaba.

"¿Pasa algo, papa?" .-dijo Filo, soñolienta y medio dormida.

"No pasa nada, hija. Sigue durmiendo" .-respondió Ben con una leve sonrisa. Filo solo asintió y volvió a cerrar los ojos, entregándose nuevamente al sueño. Mientras tanto, Ben escondía discretamente un broche de oro con gemas celestes. Con cuidado, retiró su mano del brazalete de Raphtalia.

[Flashback]

Estaban disfrutando de un picnic, un merecido descanso después de enfrentar tantas peleas y problemas. El abuelo y el nieto pescaban tranquilamente en el muelle de un lago en medio del bosque, mientras Gwen ocupaba una mesa del lugar con su computadora.

"Abuelo, una pregunta" .-dijo Ben con duda, observando a su abuelo Max, quien le prestó atención mientras retraía el hilo de pesca.

"¿Cuál es, Ben?" .-respondió el abuelo Max, mostrando curiosidad mientras ajustaba el anzuelo.

"Si me gusta una chica, ¿qué puedo hacer?" .-Preguntó Ben con inseguridad, y el abuelo Max soltó una leve risa, aunque luego se controló y lo miró.

"Bueno, Ben, si alguna vez llegas a enamorarte, y te aseguro que sucede cuando menos lo esperas, realmente amas a esa persona en las buenas y en las malas. Un regalo que puedes hacer es darle cosas que le gusten. Eso me funcionó cuando era joven, y las mujeres no han cambiado mucho en ese aspecto. Pero una cosa, Ben, es que debes tener cuidado. El amor es como un espejo que refleja tu lado malo, especialmente cuando no es correspondido. Te vuelves envidioso, celoso, prejuicioso y resentido. Tienes que enfrentarte a todo tipo de emociones, pero no hay razón para que te sientas avergonzado. Así que, nunca, bajo ninguna circunstancia, mientas, aunque sea acerca de tus sentimientos" .-aconsejó el abuelo Max con una sonrisa antes de volver a lanzar el hilo de pesca con nueva carnada.

"Gracias por el consejo, abuelo" .-dijo Ben con una leve sonrisa, agradecido por las palabras de su abuelo.

"¡Los mataré!" .-gritó Gwen con enojo, rodeada de insectos que intentaban robar la miel que trajo para preparar pan con miel. Ambos hombres solo rieron ante la situación de su prima/nieta.

[Fin del Flashback]

Ben comenzó a reírse al recordar eso y siguió trabajando en el regalo para Raphtalia. Ya era de día, el abuelo Max tomó las llaves y arrancó el camper para dirigirse al pueblo. En el camino, recogieron a una mujer que estaba gravemente herida, pero gracias al escudo de Ben, lograron curarla.

"Gracias, pero deben dar media vuelta. Es peligroso ir por allí" .-advirtió la mujer seriamente.

"Escuché sobre un pueblo que tiene una enfermedad, ¿es cierto?" .-preguntó Rook con duda, observando a la mujer.

"Sí, pero ese pueblo ya está perdido" .-respondió la mujer con seriedad.

"Ben, ¿iremos, verdad?" .-preguntó Gwen seriamente, mirando a su primo.

Ben 10: La Leyenda del EscudoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora