En los límites del reino de Melromarc, se encontraban los héroes del escudo, espada y lanza, junto a sus séquitos, excepto Malty, quien estaba con el cura. Frente a ellos, el pontífice de la iglesia sostenía un arma de oración.
—Es hora de juzgar y purificar al impostor de la lanza y al monstruo del escudo —declaró el cura, alzando su arma antes de lanzar una potente corriente de magia en dirección a ambos.
Ben, con una expresión seria, dijo: —Piedra. —Una luz verde indicó su transformación, y la luz se desvaneció mientras avanzaba, protegiéndolos
y absorbiendo el ataque del cura.
—Vaya, vaya, eres muy persistente, como se espera de un monstruo como él —comentó el cura, elogiando a Ben mientras usaba ambas manos para detener su arma—. Pero la justicia de dios no cederá tan fácil —añadió con arrogancia.
La espada brilló antes de transformarse en una lanza de oro brillante.
—¿Qué es eso? —preguntó Ren, poniéndose en posición de combate al ver cómo el arma cambiaba de una espada a una lanza.
—¡Cuidado, Ben, esa espada es...! —exclamó Melty, advirtiendo a Ben.
Piedra frunció el ceño al ver esa arma y las intenciones de quien la portaba.
—¿Cómo cambió esa arma de una espada a una lanza? —preguntó Motoyasu, sorprendido y con dudas al observar ese poder.
—Ya no me cabe duda, esa arma es una imitación de las Cuatro Armas Sagradas —afirmó Melty, seria, y todos la miraron con atención.
—¿Una imitación de las Cuatro Armas Sagradas? —preguntó Raphtalia, sorprendida.
—Hace milenios, algunos aventureros intentaron crear las Cuatro Armas Sagradas, pero solo lograron una capaz de transformarse en las cuatro armas —explicó Melty, seria, detallando la historia.
—Teniendo esa arma, ¿por qué invocaron a los Cuatro Héroes? —preguntó Piedra, con dudas, mirando al cura que portaba esa copia.
—Esa arma requiere mucho poder mágico; incluso se decía que fue destruida hace milenios —suspiró Melty, mostrando seriedad al mirarlo.
—Parece que la iglesia de los Tres Héroes estuvo ocultando esto todo este tiempo —comentó Rook seriamente, poniéndose en guardia.
—Veo que estás muy bien informada, heredera al trono, princesa Melty, y no como ciertas personas que, en vez de estudiar la historia de este mundo, estuvo planificando atentados —replicó el cura, mirando a Motoyasu, quien frunció el ceño—. Toda la gente detrás mío está con Dios, y por eso oran, dándome su magia. ¡Con tal de purificar al monstruo del escudo, al traidor de la espada y al héroe impostor! Es la voluntad de Dios —afirmó el cura, hablando seriamente y de manera amenazante.
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Ben 10: La Leyenda del Escudo
FanfictionTras derrotar a Vilgax, Ben Tennyson se encuentra aburrido y sin nada que hacer. Su prima Gwen le presta un libro sobre una leyenda de cuatro armas legendarias. Ben comienza a leerlo y se queda fascinado por la historia. Sin embargo, lo que no sabe...