A Crown of Iron

Capítulo 12.

Viktoria Newton Parks

Londres es lindo pero hace mucho frío, llegamos ayer, resulta que tenemos una mansión y queda cerca de High Garden. Las putas mansiones parecen castillos. Estoy decidiendo que ponerme, hoy es el almuerzo con los Morgan. Tengo dos opciones en mente, un vestido negro, ya que el negro es elegancia y me gusta mucho ponerme ese color o un vestido rojo, el rojo es kriptonita para los Morgan. Me coloco el atuendo que escogí, es un conjunto que consta de un top y falda, ambos color negro. El top con escote en v, manga larga, la manga es laterna. La falda es 5 dedos por encima de la rodilla, al principio es pegada pero después lleva pequeños vuelos. Me coloco unas botas negras de tacón que llegan debajo de la rodilla. Dejo mi pelo suelto, no llevo nada de maquillaje, no me gusta usarlo, agarro mi abrigo y bajo encontrándome con mi padre y mi hermano, mi padre lleva un traje color gris, mientras mi hermano lleva unos vaqueros negros y una camisa blanca con los primeros 2 botones abiertos. Subimos a la camioneta y en unos 5 minutos llegamos a High Garden. Es muy grande, esta si tiene más pinta de castillo la nuestra.

Una señora con uniforme, nos abre la puerta y nos lleva hasta la sala, en esta esta Alex y una mujer rubia quien supongo que es Sara, es muy bonita pero no encuentro parecidos con Christopher, el es la copia idéntica de Alex. Observo los sillones y en estos está Christopher, con su mirada fija en mi, me pone nerviosa pero tampoco es que vaya a darle el gusto de ver eso. Dos señoras vienen y reciben nuestros abrigos, le sonrió un poco y le agradezco, no vuelvo a mirar a Christopher, si lo hago voy a empezar a temblar, juego con la manilla en lo que veo como Alex saluda a mi padre con un abrazo, viene a hacer lo mismo conmigo, pero yo simplemente le estiro mi mano, todos nos miran, Alex la toma y sigue con mi hermano, miró a Chris y este me mira con una sonrisa burlona por lo que acabo de hacer. Mierda, no puede ser, siento tensas las mejillas osea que me sonroje, porque a mi. Miro a Tadashi y esta que se caga de la risa, maldito cabron, levanto mi brazo y le doy tremendo zape en la cabeza, creo que me pase, sonó muy duro. Mi padre me mira mal y los demás están que se parten a reír pero no lo hacen.

Sara viene a donde yo estoy, espera para ver si me abraza o no, veo que hace el ademan de abrazarme, pero le estiro mi mano para que la tome. Lo hace haciendolo con ambas manos.

-Estas muy grande Viktoria-me sonríe, se ve que es una buena persona.

-Tampoco es que haya crecido mucho, quedó estancada en 1.63- dice Tadashi intentando molestarme.

-Igual que tus neuronas, tampoco se desarrollaron bien- se ríe un poco sabiendo que me molesto lo que dijo, Sara y Alex se ríen, su hijo también lo hace pero solo un poco para seguir con esa estúpida sonrisa hermosa que tiene en su bello rostro.

-Es un placer volverte a ver Sara- me sonrie para continuar con Tadashi.

Veo como Chris saluda a mi padre con un apretón de manos mirándolo inexpresivo. Sigue conmigo y antes de que pueda pensarlo me da un beso en la mejilla, siento su sonrisa mientras me sigue besando ese lugar. Se separa, me mira con una sonrisa, mientras yo lo miro, sigo atónita por lo que acabo de hacer. El no es así, ni me hubiera saludado, que le sucede, estará en sus días del mes.

-¿Viktoria, verdad?- sigue sonriendo

-Si, tu debes ser Christopher-asiente con la cabeza, por lo menos logre que la voz no me temblará y me salio muy segura.

Alex nos dice que sigamos al comedor, caminamos a el, estoy nerviosa, juego con mi manilla sintiendo como esta detras de mi y con su mirada fija en mi espalda. Alex se sienta a la cabeza de la mesa, a su derecha se sienta Sara, yo me hago a su lado y antes de que mi hermano se siente frente a mi Chris toma ese lugar, haciendo que Tad se siente al lado izquierdo de Alex y por último mi padre quien se sienta en la otra punta de la mesa. Comemos con tranquilidad, mejor dicho los demas comen con tranquilidad, me siento tensa y nerviosa, se que me está mirando pero no quito la mirada de mi plato, lo miro como si fuera lo que más me importa en el mundo y es la verdad, bueno, en este momento. Terminamos de comer y se llevan los platos, así que saco mi teléfono y me pongo a jugar con la calculadora, estoy loca, pero es mejor que sonrojarme.

-Oigan, debo decirles algo-nos dice mi padre intercalando su mirada entre Tadashi y yo-Alex me dio la idea de transferirlos a la academia de Londres y ya lo hice, ustedes estarán en el mismo grado que Christopher.

El universo definitivamente me ama. Ya se me olvido como se respiraba, me pongo pálida y seria. Miro a Tadashi y este ya me estaba mirando, mueve sus labios diciéndome que respire y me calme, tomo un poco de agua. El silencio en la mesa es muy tenso y tampoco ayuda que Chris me siga mirando esperando a que de una respuesta. Miro a mi padre y decido hablar.

-Debiste habernos preguntado qué opinábamos, nuestra opinión también cuenta-lo miró seria pero le hablo calmadamente. No dice nada, solo se queda callado, se levanta y anuncia que va al baño.

-¿Cuanto tiempo se llevan?-nos pregunta Alex, miro a Tadashi para que responda.

-Yo nací a las 11:58 del 8  de marzo y Sadashi nació a las 00:28 del 9 de marzo-responde mi hermano.

-¿Sadashi?-pregunta Christopher mirándome, será que no se cansa de solo verme.

-Si, por ser mellizos querían que tuviéramos nombres similares, ambos tenemos 4 nombres. Yo me llamo Jennie Viktoria Diane Sadashi, y mi hermano se llama James Vincent Daniel Tadashi-le respondo mientras me mira y pone una sonrisa ladeada, yo creo que este tipo nunca había sonreído tanto como hoy, debe ser que hoy no tomo su desayuno de alacranes.

Pasamos un rato más con ellos, cuando ya eran las 7 nos despedimos, me despedí de Sara y Alex dándoles la mano pero Christopher volvió a hacer lo mismo que cuando llegamos, me beso la mejilla y coloca su mano en mi cintura, simplemente lo deje hacerlo y ya, le sonreí un poco y después pasó a despedirse de mi hermano. Llegamos a casa y mi padre nos dijo que mañana viajaremos a Los Ángeles para empacar nuestras cosas y irnos a vivir a Londres. Va a ser dificil, pero mas enculada de Christopher no puedo estar, tal vez ignorándolo voy a dejar de sentir eso.