Viktoria Newton Parks
Es Alex el papá del amor de mi vida, digo del coronel. Alex se acomoda en su lugar para hablar.
-Estamos haciendo investigación para descubrir el paradero de Christopher, lo único que sabemos es que esta con Antoni Mascherano. Cuando tengamos la información, iremos junto con un grupo de soldados a sacarlo de ahí- nos dice mi suegrito, digo Alex
-¿Y yo que ver con eso?- no se que tengo que ver yo con eso
-Tu iras con el grupo de soldados para ayudar con el rescate de Christopher- respondió mi padre
-Pero..-fui interrumpida por el golpe de los puños de Alex contra la mesa
-¡SIN PEROS, MALDITA SEA, ES MI HIJO!-grita Alex
-Bueno, ya entendi, paz y amor, a ver, repite conmigo. Inhalo paz y vomitó amor-me mira mal como si fuera lo más infantil del mundo-Hay calmate Alex, te vas a explotar de lo rojo que estas, si sigues así vas a envejecer más rápido.
Se levanta y se larga azotando la puerta. Mi padre me da un beso en la cabeza y se larga. Me levanto y me encuentro con Nice, le digo que ya nos vamos y nos dirigimos al ascensor. Ya en el auto camino a casa, me debato que debo hacer con esta situación. Estoy dentro de mi libro favorito lo cual es super increible aunque lo malo es que hay mucha muerte y yo no soy capaz de matar ni a un zancudo.
-Nice, necesito hablar contigo. Para en alguna cafetería por aquí cerca.
-Como ordene.
Le contaré todo a Nice, supongo que es mi hombre de confianza, todos los millonarios tienen uno y supongo que él es el mio. Debo decirle para que me ayude, no se cuando ni como poder volver, por lo menos debo aprender a defenderme y este tipo tiene pinta de que ha estado en lugares muy peligrosos. Llegamos a Clifton's Cafeteria, se ve un buen lugar sinceramente. Nos sentamos en una mesa cerca a la ventana. Observo a Nice tomando su cafe.
-Nice, cual seria tu reaccion si te digo que soy de otro mundo y que estoy atrapada en un libro osea este mundo-Le preguntó como si fuera lo más normal del mundo, el me mira como si estuviera loca-Mira, te voy a explicar todo lo que pasó y no quiero que te espantes, debes tener la mente despejada y lista para entender-asiente-Por lo que te conté ya debes saber que no soy de este mundo, vengo de otro mundo y la verdad no se como llegue aqui, solo recuerdo que estaba en mi colegio específicamente en mi salon sola y después una luz me cegó y todo se oscureció, cuando desperté estaba aquí.
Nice analiza todo y después de unos segundos reacciona.
-Entonces usted no es la Viktoria que conocemos, es una Viktoria de otro mundo que quedo atrapada aqui.
-Exacto Nice, gracias al cielo entendiste.
-Señorita, ¿Por qué me está contando esto a mi?
-Pues se ve que eres confiable y eres algo así como mi "hombre de confianza", tu debes conocerme, asi que cuentame, como soy, que me gusta, que no me gusta, todo ese tipo de cosas.
-Pues...a usted le encanta el color rosado, le encanta maquillarse, pintarse las uñas. No le gusta el color negro, ni la ropa ancha, ni la comida grasosa. Usted es una persona que odia a todo el mundo, no le gusta ayudar a nadie, ni nada de eso.
-Oh, entonces qué asco me doy, soy una castrosa-no puedo creer que los millones se me subieron a la cabeza, que porquería, voy a necesitar lavar mi cabeza con agua bendita para que no se me pegue eso- Nice, necesito que me enseñes a manejar armas y a pelear cuerpo a cuerpo.
Al llegar a la masión, subo a mi habitación. Casi me da un infarto al ver a mi hermano sentado en mi cama, la escena es muy rara, ambos nos miramos pero no decimos nada así que decido entrar y cerrar la puerta, me siento en el otro extremo mirándolo fijamente igual que el a mi.
-¿Que haces aqui Tadashi?
-Estas rara, desde la mañana y se que no es cosa de un solo dia porque cambiaste hasta tu manera de hablar. Dime que te sucede o quien eres.
Puta mierda, se dio cuenta, ¿que hago?, ¿le digo o no le digo?
-Ok, pero no puedes decirle a nadie, esto queda entre Nice, tu y yo-él asiente-No soy tu hermana, osea si pero no...yo vengo de otro mundo-el muy idiota se empieza a reír como retrasado, me dan ganas de pegarle un puño. Cuando ve que hablo enserió, para de reir y me mira sorprendido.
-Es imposible.
-No es imposible. Yo estaba en mi salon, sola después una luz me cegó y todo se oscureció, cuando desperté ya estaba aquí. Esto es un libro, mi libro favorito, pero mucho antes de que pase lo que pasa en el libro. Claro que ni tu, ni Nice, ni mi padre, ni yo somos personajes del libro, es muy raro todo lo que pasa, necesito volver antes de que cambiemos la historia.
-¿Que?¿Por que, que sucedería si se cambia la historia?
-Creo que algunos personajes desaparecerían, eso lo vi en una película.
-¿Quedaron atrapados en un libro?
-No, en una película, pero supongo que es la misma cosa. Aunque si existimos nosotros, sería cambiar un poco el libro, es una posibilidad.
Salgo de la habitación y voy donde Nice.
-Nice, podrías comprar ropa para mi por favor-asiente-Pero que sea ropa negra y ancha, pantalones, busos, chaquetas, tenis, botas y medias.
Le entregó una de mis tarjetas de crédito, no son mias pero lo tomo como un préstamo, después devolveré el dinero. Subo a mi habitación, Tadashi no se encuentra, voy al closet y saco toda la ropa y los zapatos, le pido a uno de los sirvientes que lleve cajas a mi habitación. Empaco todas las cosas en las cajas, ropa, zapatos, bolsos, menos algunos que son blancos, también me voy a quedar con los tenis, son muy cómodos y bonitos. Cuando termino de empacar todo, le pido al mismo sirviente que lleve esas cajas a donarlas a personas que lo necesiten, asiente y se va.
Debo hacer algo, no puedo morir aquí, es muy probable que también muera en mi mundo, pero tampoco puedo hacer cosas demasiado grandes y cambiar la historia, no quiero que nada le pase a el. Lo más probable es que nunca nos encontremos, solamente ayudare con su rescate y desapareceré de su vida.
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A Crown of Iron
FanficDespertar en una habitación que no es la tuya es raro, y mucho más si es en tu libro favorito. Les voy contar mi historia, como llegue a este mundo, como lo conocí a el, como nos enamoramos, como me convertí en la persona más poderosa y como le di...