fuego de dragón

5

—Que haces aquí?...-hablo Daemon enojado para luego sacar a t/n de la habitación

—Daemon...-t/n-

—que estaba habiendo la princesa aquí, Aemond...-dijo otto-

—ella solo vino a despedirse de su tío...-dijo en un tono burlón mientras miraba a Daemon-

esto hizo que Daemon enfureciera, por su cabeza pasaban mil cosas que el joven príncipe podría haber hecho con t/n y que así sería imposible impedir que no se casara con el

—LA TOCASTE?...-dijo Daemon agarrando a Aemond-

este solo rio y miró a t/n

—AEMOND, HABLA...-volvió a hablar Daemon-

—no crees que lo mejor es que su primera experiencia sea conmigo y no con cualquier prostituto o cualquier otro?...-Aemond-

Daemon solo lo miro con tanto odio, sabía lo que ambos sentían, él lo sintió con Rhaenyra y también le pidió la mano a viserys, estaba haciendo lo mismo que hizo este con su niña, intentar cuidarla

—Dame a t/n como esposa y viviremos aquí, no le faltará nada, la respetaré y cuidaré, solo déjame tomarla como mi esposa

—Aemond!!...-dijo Alicent-

—ni aunque fueras el ultimo hombre de este mundo te daré a t/n como esposa...-dijo este para luego agarrar a t/n por el brazo y llevarla con su madre-

•••
Daemon no le dijo nada a Rhaenyra de lo que acababa de pasar, solo dijo que esta estaba en el jardín y que se le había pasado la hora, al ver que todos ya estuvieran listos para viajar, partieron a dragonstone.
El día había transcurrido tranquilo para los viajeros, eran 4 días de viaje así que en el camino los hermanos jugaban, hablaban de cosas, molestaban, había sido un viaje tranquilo, menos para la joven, que no dejaban de pensar en ese beso con Aemond, sabía que había estado mal pero al mismo tiempo quería volver a repetirlo, en el viaje ella no hablo con Daemon, tenía miedo  de que dijera algo o que la regañara por haber estado ahí y que sus hermanos se enojaran con ella.
•••
—Aemond, podrías decirme que hacías con t/n...-hablo alicent-

—nada madre, solo vino a despedirse y nada más...

—mira niño, se que te gusta molestar a tus sobrinos y todo, pero no te acerques a t/n de nuevo...—otto-

—por qué no? es mi sobrina

—no y punto...-dijeron para luego retirarse-

El beso con T/n daba vueltas en la cabeza de Aemond, quería volver a besarla pero no sabía cuando la volvería a ver y no quería esperar tanto tiempo.

mientras tanto Alicent fue a ver al rey, estaba agobiada de tener que estar cuidando a su hijo hormonal.

—Hola, cómo te encuentras..

—Rhaenyra?

—soy alicent, viserys, Rhaenyra acaban de partir, dijo que volvería en un dragón cuando dejara a los niños.

—fue..lo único que quería...—dijo con pocas fuerzas-

—de que hablas?

—la canción de hielo y fuego real, la profecía, el heredero al otro del que aegon hablaba...-dijo viserys entre balbuceos-

—Aegon?

—El he...heredero a..al trono...-dijo viserys-

Alicent no dijo nada y solo salió de la habitación pensando en lo que habían dicho el rey. La noche llegó y todos fueron a descansar, la reina no había podido pensar en otra cosa más que en lo que dijo viserys, como era posible que él dijera eso ahora y su heredera era Rhaenyra, sin entender Alicent se recostó hasta quedarse dormida
En la mañana, Alicent se preparó y cambió, sus pensamientos sobre lo que dijo viserys ya no estaban presentes hasta que su criada le dio una noticia que cambiaría eso.

—estás segura?...-Alicent-

—si mi reina, yo misma lo vi...

viserys había muerto mientras dormía, en paz con la idea de que sus familias habían estado juntos y compartiendo un día antes, la reina entró a la habitación y lo vio, el cuerpo sin vida del rey, la mano del rey también fue avisado de esto y también estaba con Alicent, salieron de esa habitación para que las hermanas pudieran encargarse del cuerpo del difunto.

—Aegon..

—que pasa con Aegon...-otto-

—hablé con él ayer y...dijo que Aegon tenía que ser el sucesor, el verdadero heredero al trono de hierro

—estás segura?

—si, fue su última voluntad.

—entonces Aegon será coronado rey en el pozo dragón frente a miles de personas, tenemos que buscarlo y decirle sobre esto...

—está bien..

—me encargaré yo...-dijo otto-

la reina asintió, aunque no estuviera de acuerdo, mando a ser criston a buscar a Aegon, en esto, el príncipe Aemond había escuchado la conversación.

—para que buscan a Aegon?...-entrando en la habitación-

—hijo...

—que pasó madre

—tu padre, a fallecido y Aegon será coronado rey, pero no sé en dónde está

—acompañaré a sir criston, conozco los gustos de Aegon y lo traeré ante ti

el príncipe y el sir salieron a la ciudad para buscar al príncipe mayor, lo buscaron el la calle de ceda, sin encontrarlo, y continuaron buscando hasta que vieron a los gemelos Arryk y Erryk, estos habían sido mandados por Otto en busca de Aegon, el príncipe Aemond y Criston los siguieron y esperaron hasta que uno de ellos salió con el príncipe Aegon, al salir sir criston se puso en frente intentado agarrar a Aegon quien salió corriendo pero fue atrapado por su hermano

—Suéltame hermano!!

—debes cumplir tu beber

—padre?

—si

—SUÉLTAME! no tengo deseos de reinar, no quiero cumplir con el deber, no estoy preparado...-intentado soltarse del agarre de Aemond-

—eso no te lo voy a discutir...

—déjame ir y encontraré un barco en el cual huir para nunca ser encontrado...-dijo agarrando la cara de su hermano-

en eso ser criston se acercó y habló

—la reina espera...-dijo el ser agarrándolo del hombro-

Aemond había recapacitado unos minutos, sabía que él sería el siguiente en la sucesión y había pensado dejar libre a su hermano, pero órdenes eran órdenes.
Al llegar a la fortaleza Aegon fue encerrado en su habitaciones hasta el día siguiente, ya que este se podría escapar y huir, el día pasó rápido, la reina estaba triste por su pérdida pero debía actuar rápido ante esta situación.
Helaena al enterarse de lo que estaban por hacer su madre y abuelo intentó huir, iría con Rhaenyra, estaría a salvo allí y no tendría el odio de su hermana, ya que ella y Rhaenyra tenían una buena relación, pero algo le impedía hacerlo, eran su familia y no podía irse, sería una traidora, entonces solo espero el paso de la noche hasta la mañana que sería la coronación de Aegon...