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Liv era una chica como cualquier otra, con un don el cual destacaba, a pesar de que siempre se mantuvo en el anonimato por su pasado, no fácil tener un don, en el cual cada parte de tu cuerpo se fraccionaba como si tuvieras miles de cicatrices. Un don el cual ni siquiera ella misma podría controlar correctamente... En la actualidad, había sido entrenada, obligada a dejar atrás Cualquier cosa sobre el...

Al no tener una familia estable acabo de acogida con Inko Midoriya, la cual fue recomendada por el héroe que la había "salvado" tiempo atrás. Cuando entro en aquella familia pequeña pero acogedora no podía evitar pensar en el, siempre hubo complicaciones en sus entrenamientos, pero aunque era solo un año menor que izuku siempre se mantuvo a su lado a apoyarlo, no importaba que ella estuviera mal, por fin tenía una familia, no dejaría que se la arrebataran nuevamente.

                         Actualidad
                        ( 15 años )

Habiamos solicitado entrar a la UA, una academia donde habían estudiado héroes prestigiados. Y aunque haya sido solamente por petición de izuku, el verlo feliz me hacía sentir bien, El era la cosa más importante para mí en estos momentos, era igual de importante que el... Y aunque Deku había estado muy raro en los últimos meses, se había puesto a entrar como loco antes de la prueba de la UA..., había estado preocupándome demás, y que el no me contará nada no ayudaba.

- ¡No crees que es increíble este Lugar!- Hablo deku, con aquella sonrisa tan característica de el. Supongo que en verdad estaba feliz de estar aquí

Admito que era bastante linda la academia y aunque ya la conocía a la perfección tenía que enfocarme en mi presente y lo que de verdad importaba ahora.

- Si, supongo que está bien. - Le dedique una cálida sonrisa aportándole confianza, aunque realmente me estaban carcomiendo los nervios, sabía que estar aquí traería problemas.
- ( ¿Que pasa si fallo?) - preguntas pasaban por mi cabeza, definitivamente algo saldría mal..., me sumo tanto en mis pensamientos que ni siquiera note que deku estaba apunto de caerse, ¿en verdad le entusiasmaba tanto?, dirigí mi atención hacia un chico con pelobicolor, ¡Bingo!, el hijo de Endeavour, mi objetivo estaba ahí.

- ¡Deku!, oh dios, ¿Estas bien? - Corrí alarmada hacia el al darme cuenta que había estado a punto de caerse, si no hubiera sido por una chica de pelo café se hubiera estampado contra el piso. Corrí hacia el y lo mire esperando una respuesta.

- S-si, perdón, estoy muy emocionado - Sonrio avergonzado. Estaba por hablar hasta que una voz me interrumpió.

- ¡Hola!, Soy Ochako Uraraka - Aquella joven de cabello café sonrió, sin duda era alguien amable, interesante...

- Me llamo livie, pero me puedes decir Liv, un gusto - Mire a Midoriya el cual estaba completo rojo, parecía un tomate y este solo estaba balbuceando.  Antes de despedirnos de Ochako escuchamos una voz hablar por el parlante, así que supuse que darían inicio a la prueba.

- Bueno Ochako, fue un placer - Le dedique una sonrisa para después llevarme a deku arrastrándolo.

( El arco del Examen de admisión )

La prueba consistía en destruir a unos robots, cada uno daba un puntaje diferente, pero había uno que ni siquiera valía nada, supongo que por eso nos pidieron ignorarlo. Era insignificante pero bastante grande.

𝙃𝙖𝙨𝙩𝙖 𝙘𝙖𝙚𝙧 𝙡𝙖 𝙣𝙞𝙚𝙫𝙚 | ˢʰᵒᵗᵒ ᵗᵒᵈᵒʳᵒᵏⁱDonde viven las historias. Descúbrelo ahora