El papel secundario femenino carne de cañón en el apocalipsis

Capítulo 83

Jiang Qi se apresuró a llevar a la persona fuera del agua, un puñado de bola de luz hacia abajo, el agua de dos cuerpos todos secos.

"Manyue, no tengas miedo, estoy yo, tú ......"

Jiang Qi sintió que algo estaba mal y miró hacia abajo.

Se encontró con que la mano de Xia Manyue no sabía cuándo se había entrado por el dobladillo de su camiseta, y Manyue está tocándolo y acariciándolo al azar.

Quemada en un aturdimiento Xia Manyue: "Estoy tan incómoda, rápidamente dejame tocar ...... si toco no será incómodo ".

Jiang Qi: ......

Xia Manyue repente se esta actualizando, tres hombres, tres plantas y un pequeño cuervo están ansiosos, y otra ráfaga de soldados.

Pero esta vez estaba mucho mejor, su físico había mejorado bastante, y no se quedó dormida durante un rato.

Tumbada en la cama con fiebre, y con instrucciones de cocinar el pescado con la cantidad adecuada de especias.

"Hay guindillas detrás de casa, las he visto, crecen bien, coge algunas, hace mucho que no como picante, lo echo de menos".

Xia Manyue abrazó el peluche que su hermano sacó del espacio para ella, su carita enterrada en él, la mitad de la cara estrujada.

Xia Qingyang sacó un pañuelo de papel y ayudó a su hermana a limpiarse las lágrimas que estaban a punto de caerle por los ojos.

Shu Fei se sentó junto a su ventilador, el viento es muy fresco, trayendo una ráfaga de patio fragancia única.

Miró el sol de fuera y no pudo evitar escupir: "Sólo faltan unos minutos para que tengas que comer".

Jiang Qi está ocupado reparando el aire acondicionado de vez en cuando para mirar hacia atrás, ver a la niña confundida, todavía diciendo que quieres comer pescado a la parrilla, quejándose de que no hay brotes de soja, y ahora es demasiado tarde para enviar brotes de soja.

Jiang Qi no pudo evitar sonreír, el espíritu es bueno, un poco de descanso, pronto debería estar bien.

Por último, comprobó la instalación eléctrica, encontró el mando a distancia del aire acondicionado y pidió a Shu Fei que cerrara bien las ventanas y las puertas. Cuando se encendió el aire acondicionado y el aire fresco salió por los conductos de ventilación, todos suspiraron satisfechos.

Esto es bueno, todo el mundo, incluido el hombre planta y el ladronzuelo cuervo están apiñados en la habitación de Xia Manyue y no se van.

"No hay mucho combustible, así que si podemos ahorrarlo, por qué no dejamos la habitación de la Hermana Manyue abierta por la noche, y todos nos tiramos al suelo y dormimos en la sala".

Shu Fei no sabía de dónde sacó una mecedora y se tumbó en ella para balancearse.

Xia Qingyang sacó otra cucharada grande de fruta de baobab congelada y se la dio de comer a su hermana.

El pequeño cuervo ladrón también probó un bocado, sus ojos de judía negra se iluminaron con una bola de luz, chasqueando la mano de Xia Qingyang con el pico, en señal de que quería más.

El baobab recogió con entusiasmo su nuevo fruto y se lo dio al cuervito, porque estaba un poco caliente, también le disgustó al cuervo ladrón.

Sandía de Hierro seguía leyendo, de vez en cuando cogía un palo para pinchar a la Drosera, demasiado traviesa, para que se callara.

Jiang Qi estaba sentado en el borde de la cama, mojando de vez en cuando una toalla y secando el sudor de la frente de la niña.

Xia Manyue torció la cabeza para mirar una por una, y tuvo la sensación de la tranquilidad de los años, y cerró los ojos apaciblemente para descansar.