- tiempo atrás (lugar desconocido) , (mes desconocido ) año 2001-
A través de los escombros y las sombras de una aldea desgarrada por alguna cosa, caminaba un hombre cuya figura se veía envuelta en una capa de desinterés palpable Su mirada, fría como el acero, recorría los restos de lo que alguna vez fue un hogar próspero, sin mostrar emoción alguna ante la devastación que se extendía a su alrededor Pasaba junto a los cuerpos caídos con una indiferencia impactante, como si la carnicería que lo rodeaba no hiciera mella en su alma
La luz tenue del sol filtrándose entre las nubes grises iluminaba su rostro curtido por la vida y por la tragedia que había presenciado Su expresión, inmutable, parecía haberse endurecido ante la crueldad del mundo que lo rodeaba Con cada paso, su presencia creaba un aura de indiferencia, como si estuviera desconectado emocionalmente de la desolación que lo rodeaba
El hombre avanzaba hasta llegar al centro de la aldea, donde la desesperación alcanzaba su punto culminante Al mirar a su alrededor, vio cuerpos yacientes en el suelo, cada uno contando una historia de pérdida y desesperanza La sangre pintaba un cuadro macabro en el suelo, narrando la brutalidad que había asolado la vida cotidiana de aquel lugar ahora arrasado
En el epicentro de la devastación, su mirada se posó sobre un niño pequeño, cuyos ojos, aún inocentes, reflejaban el peso de una realidad incomprensible. Parado en la desolación, el niño parecía perdido en sus pensamientos, con la mirada fija en el suelo, como si estuviera contemplando un abismo de dolor y pérdida Sus ojos, llenos de asombro y confusión, capturaban la atención del hombre indiferente, rompiendo momentáneamente su fachada de desinterés
La escena se volvía más conmovedora a medida que el hombre, que había caminado con un desapego aparente, se veía obligado a confrontar la imagen del niño en medio de la tragedia Aunque su mirada seguía siendo indiferente, una chispa de emoción, tal vez un rastro de compasión, se asomaba en la profundidad de sus ojos, revelando que, incluso en un corazón aparentemente insensible, la huella de la humanidad persistía
el silencio estaba persistente en aquel lugar donde ahora solo la muerte estaba presente ante aquello dos que pasaron los minutos ninguno hizo el intento para acercarse uno al otro solo encontrándose sus miradas cuando tanto el infante , como el adulto saliendo de sus pensamientos haciéndose notar primero la mirada del mas grande siendo unos ojos verdes apagados
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pero los mas resaltantes fueron los del niño teniendo En el centro del ojo, la pupila se ve rodeada por un torbellino hipnótico de dos aspas que se entrelazan en una danza visual Cada aspa, compuesta por líneas afiladas y precisas, se extiende desde el centro de la pupila hacia el exterior, creando una apariencia dinámica y en constante movimiento. Los bordes de las aspas resplandecen con un resplandor casi sobrenatural, enfatizando la naturaleza extraordinaria de la técnica maldita recién despertada
