4AM- emevani

46.

"Hey, hola... ¿puedo sentarme?" le pregunta suave, casi como en un susurro. El se seca rapidamente los ojos y asiente.

 "¿Que haces aca? Le dije a joni que no le dig-" ella niega rapidamente, tranquilizandolo.

 "Vos me lo dijiste, amor, tranqui" le sonrie sentandose a su lado con un ramo de flores en sus brazos. Intenta ignorar como se le estruja el estomago cuando la ve ahi. Con el. En esa situacion y en ese lugar. 

"Fue hace... un monton" responde sin creerle. 

"Me acuerdo de todo lo que me decis... Se que es muy personal y ya me voy, pero te busque y no estabas y... me acorde, no se, no queria que pases algo asi" le explica nerviosa, acariciando su brazo. 

El asiente entendiendo. Ella lo mira ignorando la angustia que sentia. Era demasiado bueno escondiendo lo mucho que habia sufrido toda su vida. Ella si podia notarlo y desea poder tomar todo ese dolor y quedarselo. Era ridiculo pero estaba segura que si podria lo haria sin cuestionarlo. 

"No te vaya, por favor" habla tomandola  desprevenida. Ella le sonrie y se acomoda a su lado. Toma una de sus manos y deja un beso en el dorso.

"Hola, miriam, soy Eme" sonrie sacando unos pañuelos de la mochila y limpiando la piedra con su nombre antes de dejar encima las flores. El la mira con los ojos llorosos. 

"Ya te conoce" le sonrie. 

"¿A si?" pregunta emocionada. 

"Mas vale, amor, le hablo siempre de vos... la chulita" responde haciendola reir. 

"¿Y que crees? ¿Le caigo bien?" pregunta, el no admitiria que muy dentro de el sintio alivio cuando la escucho. Como si ella no se hubiera muerto. Como si estuviera en algun lugar cerca. Eso creia el. 

"Mas vale, donde este te ama no tengo dudas" le sonrie  mirando las flores. "Te contaria que de chiquito era un bardo y me haria pasar un verguenzon" responde haciendola reir. "Se obsesionaria con vos, amaria tus ojos y diria que te quiere adoptar y... que me tengas paciencia" rie con los ojos llorosos. "Si estuviera aca... si pudiera agarrar el auto e ir a verla, te presentaria con ella sin dudarlo" admite provocandole un puchero y logrando que sus ojos llorosos. "Incluso si vos no perteneces a todo ese mundo de mierd-" ella niega interrumpiendolo. 

"Yo quiero estar a donde sea que estes con vos" susurra acariciando su menton y dejando un beso en su mejilla, el pasa un brazo por su cintura y la abraza escondiendo la cabeza en su cuello. 

"Eran sus favoritas" suelta de la nada, melancolico. 

"Me acorde de tu tatuaje y eso pense" le sonrie. Tenia una pequeña margarita tatuada por ella. Ella lo mira con los ojos llorosos. 

"Estoy segura que te ama muchisimo y que sigue con vos..." le sonrie, el agacha la cabeza y niega. 

"Soy un bardo, eme, mira en la que estoy metido, si estuviera aca seguro me hubiera recagado a pedos, mis hermanos y yo le cagamos la vida.. ¿Sabes la cantidad de veces que deseaba posta morirme? Yo la veia a ella y era tan infeliz con nosotros, con esa vida" ella lo mira triste.

"Vos no podrias cagarle la vida a nadie" le contradice sentandose de frente a el y tomando su rostro, el desvia la mirada para evitar que ella lo vea casi llorar pero suavemente lo obliga a volver su atencion a ella. "Ni vos ni tus hermanos tuvieron la culpa, como quizas para ustedes fue dificil que ella no les haya dado otra vida ¿y la odias por eso?" el niega obvio mientras ella le seca los ojos, el aclara la garganta.