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Giovani mira la puerta confundido cuando escucha un portazo, intenta quejarse pensando que era fito pero es eme.

"¿Esta dogo?" le pregunta cuando entra a la casa refregandose los ojos, mientras deja sus cosas en uno de los sillones.

"No, fue con el padre no se a donde" responde

"Voy a ir a dormir a su cuarto ¿le decis porfi?" responde, antes de salir del cuarto, pero algo lo obliga a deterla, quizas era la voz o la respiracion agitada, o como no lo mira a los ojos y lo saluda con abrazo como suele hacerlo.

"¿Por tan apurad-Por que estas llorando? ¿Que te paso?" pregunta "Sacate la mano de la cara, Eme" ella niega intentando pasar de largo para la habitacion pero la mira serio y le saca la mano, dejando ver lo que sospechaba, todo el pomulo colorado resaltaba en su piel palida. "Eme ¿que paso? ¿Francisco te hizo algo?" le pregunta, por mas que lo intente no puede aguantarlo y un puchero aparece antes de largarse a llorar.

"Volvia de la academia y... en el colectivo me estaban mirando mal y susurraban cosas, estoy muy cansada y ni siquiera los mire, parece que eso los enojo mas porque se bajaron conmigo y los saque cagando no se que paso senti el golpe nomas... Estoy cansada, es como la tercera vez en la semana que pas-" el lo mira enojado.

"¿Por que no me llamas? Te dije que voy a buscarte" se queja, ella agacha la cabeza. "Perdon, no te quise hablar asi... Vamos, vamos a buscarlos y me decis quien es, que me lo digan a mi" responde serio buscando en la mesa la llave del auto.

"No, es inutil, siempre va a haber alguien que diga algo... siempre, yo me la aguanto pero ya fue mucho por esta semana y-" el niega rapidamente.

"¿Como que esta semana? ¿Paso mas veces?" pregunta pero ella no contesta. "No tenes que aguantarte nada ¿que decis? Vamos, no te bajas del auto, decime quien fue y los cago a trompadas, corta" ella niega.

"No gi, gracias, ya esta, mañana va a pasar de nuevo y la semana que viene tambien y... No se por que me afecta si pasa siempre pero... me tengo que acostumbrar... Quiero dormir, ya despues no le voy a dar tanta bola, no es la primera vez que me pegan una piña" responde intentando reirse pero se le caen las lagrimas, cuando ve que tiene intensiones de irse la detiene.

"No ¿a donde vas? Quedate aca" responde antes de salir a la cocina y volver con un repasador cubriendo un puñado de hielos, agarra su mano atrayendola al sillon y sentandola en sus piernas. Le quita el pelo de la cara antes de apoyar los hielos.

"Despacio, me duele" se queja cerrando los ojos.

"Perdon, perdon... nunca hice esto, siempre me lo hago a mi" responde haciendola reir, no por el chiste sino por la cara apenada con la que la mira. Ella le sonrie acariciandole la mano que agarra los hielos.

"Esta bien" le susurra. "Esta muy frio, gi, ya esta ya esta " se queja alejando la cara pero el niega, tomandole el menton y acercandole la cara de nuevo.

"Se te esta hinchando, saca la mano" la reta mientras la escucha quejarse por lo bajo. "Que terca que sos loca, por dios" agrega

"Igual que vos ¿que me decis?" se queja haciendolo sonreir.

"Decime como estaban vestidos, el pelo, algo, voy a buscarlos" responde, su sonrisa se elimina instantaneamente su rostro seria con voz tajante aparece. Ella niega.

"No te voy a dar data para que vayas a pelear con nadie ¿estas loco vos?" sonrie.

"No me tenes que cuidar, Eme, yo me la banco, que me importa, voy y les piso la cabez-" ella se rie rodando los ojos. Uno de sus brazos va hasta su hombro mientras se acurruca en su pecho, respira ondo y se seca los ojos.

"Ya fue" le sururra.

"No, no fue nada, ¿que no me conoces? ¿Te pegan una piña y me voy a quedar aca comiendo una mandarina?" le pregunta haciendola sonreir.

"No, te podes quedar aca abrazandome... Me siento mejor cuando estoy con vos" susurra cerrando los ojos y acomodandose en sus piernas. El entrelaza sus brazos alrededor de su cintura, apretandola contra el.

"No se va a quedar asi, Eme, de verdad, de verdad te digo" responde enojado, lo conocia lo suficiente como para saber que estaba haciendo su mayor intento para no agarrar el auto y salir de ahi. "¿Me escuchas?" ella rueda los ojos. "Te estoy hablando no me ignores a mi" se queja clavando un dedo en sus costillas a modo de cosquilla haciendola reir. Levanta la mirada y lo observa.

"Hola" susurra con una sonrisita timida, tonta.

"Hola" responde el intentando sonar serio pero una sonrisa amenaza con aparecer en sus labios que fugazmente puede ver sus hoyuelos.

"Gi" suelta despues de un silencio en el que estan ahi, acompañandose, abrazandose.

"¿Eh?" responde cuando lo saca de sus pensamientos.

"¿Pensas que van a cambiar las cosas en algun momento? yo no le hago nada a nadie ¿por que me tengo que fumar que me miren asi o que me traten asi?" pregunta con la voz quebrada y un puchero en sus labios, el le acaricia la cintura. "Pelee con ines anoche y lo mas tranquilo que me dijo es que me van a matar algun dia y aunque quiera decir que no siempre termino pensando que tiene razon" responde

"No se que decirte" aclara la garganta nervioso sintiendose inutil. "Pero espero que si, no es tu culpa, y no tenes que estar pasando por esta mierda" murmura mientras ella juega con una de sus manos. "Y si no hacemos que cambie a la fuerza, voy le piso los dedos con el auto y no creo que tengan ganas de buscar bardo asi" se queja haciendola soltar una risa. Acaricia desde su pomulo golpeado hasta el borde de su ceja y desliza su mano agarrando el costado de su cuello. A veces se sentia perdida con la realidad porque ella conocia un giovani completamente distinto del que escuchaba hablar al resto y no saber cual era el verdadero la hacia sentir desesperada. "Ines es una vieja soreta y quiere asustarte pero vos te la bancas mas que todos nosotros juntos, no te va a pasar nada, me tenes a mi y a los chicos... bueno mas que nada a mi si son todos unos inutiles" se burla haciendola reir adormilada.

"Tengo algo que se que te va a levantar el animo" murmura, ella lo mira confundida. Agarra su mano y la lleva hasta su habitacion, saca una caja pequeña de la mesa de luz y se la da, se saca la campera y la cuelga aunque nunca lo haga, es solo para no verla y evitar los nervios, la incomodidad del momento.

"¿Y esto?" pregunta con la caja en su mano. Le hace una seña para que lo abra.

"Me dijiste que no podes dormir en la oscuridad y que ines cuando te rompio las cosas, rompio una lampara y no se... que se yo... no tengo ni idea si es una lampara pero me dijeron que tiene como una luz naranja asi como el cielo re piola, y nada, no s-" ella incluso cuando hace su mejor intento por quedarse y escucharlo termina abrazandolo con fuerza, se queja cuando salta debajo de sus brazos.

"¿Es una joda? Estas loco, Gracias ¿podemos probarla?" pregunta emocionada, el asiente rendido antes de que la conecte al lado de su mesa de luz. Sus ojos se iluminan cuando se enciende. "Es perfecta" sonrie antes de saltar y colgarse de su cuello abrazandolo. "Perdon, perdon" sonrie levantando las manos, alejandose. El se rie rascandose la nuca, nervioso. Era ridiculo, ella tenia plata y lo sabia, podria comprarse la lampara que quiera pero pocas veces la habia visto tan emocionada como en ese preciso momento y se sentia muy bien, algo dentro de el estaba bien si la veia bien a ella... 

4AM- emevaniDonde viven las historias. Descúbrelo ahora