𝑭𝒓𝒐𝒎 𝑳𝒖𝒔𝒕 𝑻𝒐 𝑳𝒐𝒗𝒆 ♥︎ (Asmodeus x Fizzarolli)

2- Salvación

Comenzaron a salir la luz de los rayos del pentagrama, significa que ya es de mañana, se dice que las criaturas del Demoniac Forest solo aparecían pocas veces en el día, pero ellos eran inofensivos, los que son más peligrosos diambulaban por las noches, Asmodeus sabía lo riesgoso al estar en ese lugar, pero no podía quejarse en ese momento ya que si volvía, sería la presa de Lucifer y los demás pecados, no tenía a donde regresar, lo único importante para él es sobrevivir con lo que tenía a su alrededor, procedió a levantarse poco a poco, asomó un poco su cabeza para ver si no había peligro cerca. 

Una vez que no sintió ninguna presencia que podía ponerla en peligro, decidió salir. Respiró y exaló aliviado, intentó usar un poco de magia, y en efectivo, tenia la suficiente energía para poder usarla en casos extermos, por ejemplo, con las criaturas del bosque. Se escuchó un ruido, provenía de su estomago, no había comida nada después de lo que pasó. Estaba cubierto de algunos cortes en su cuerpo, pero eso no le impidió en seguir adelante, además tenía que cuidar al niño que está dentro de él. Tardaría meses en desarrolarse poco a poco, pero no sabe como su cuerpo reaccionará ante a un embarazo, ningún pecado lo ha pasado, en ese tiempo trataría de conseguir todo lo necesario para él dia que diera a luz. "Sé que no puedes oirme, ya que no pasó ni un día pero te diré esto, no dejaré que seas la marioneta de nadie, no voy a permitir que te hagan daño, lo prometo... mi precioso hijo" dijo frotandose su vientre no desarrollado. Algunas de sus lágrimas recorrieron en su rostro, estaba muy asustado de que si algún dia lo atraparía, no podrá ver a su futuro hijo y estaría atrapado en un sello por toda la eternidad, asi que se limpió sus lágrimas y levantó su mirada hacia al frente, "No voy a permitir que esto suceda, sin importar el costo, no me rendire", dijo con determinación. Estaba dispuesto a protejerlo, ahora debía conseguir comida, se encaminó por el bosque, debía decir que quedó muy impresionado por la naturaleza del área, era muy pacífico.

Vio a lo lejos un inmenso lago, a decir verdad, no se imaginaba un lugar como este situado en este bosque, asi que aprovechó esto para asearse un poco, al momento de hacer contacto con el agua, se sintió en paz y en tranquilidad, ya no tenía que encargarse de esos estupidos deberes reales, se sintió libre, su paz se ve interrumpido por algunos ruidos provenientes de los arbustos, pensó de que se trataría de una criatura cerca, y así fue, Asmodeus se escondió en los grandes arbustos debido a su tamaño, cuándo levantó un poco su mirada pudo ver a la criatura que era de tamaño mediano, iba a permanecer oculto, pero al momento de bajar su cabeza, provocó un pequeño ruido y eso hizo que la criatura se abalanzara sobre él, Asmodeus lo esquivo rapidamente y empezó a correr para no ser asesinado, se escondió detrás de un árbol para no ser visto, estaba temblando del miedo, pensó que no había nadie cerca del área, tenía que pensar en el algo rápido o si no sería carne muerta, se le vino una idea a la mente, "¡HEY IMBECIL!" gritó llamando la atención del monstruo, quién rápidamente se dirigió hacia él y lanzó espinas de su cuerpo,"¡Ahg!¡Mierda!"  algunas fallaron pero le produjo cortes en su cuerpo, Asmodeus corrió lo más rapido posible, aun lo perseguía pero mantenía una larga distancia, le vastó ese corto periodo de tiempo para atacarlo con lo último que le quedaba de su magia, tenía que estar en una larga distancia ya que el ataque también podría hacerle daño a él y al niño en su vientre, el ataque funcionó, "Al menos.... esto bastará como comida..¿verdad?" dijo recostandose por un momento en el suelo, estaba agotado por usar su magia en ese ataque, pasarón algunos minutos, ya tenía un poco de magia y llevó el cuerpo del monstruo para cocinarlo, una vez que llegó, procedió a cortarlo con un cuchillo creado por su propia mágia y su carne lo puso en la fogata para que se cocinara.

Solo agarró una porción ya que eso debe durarle aproximadamente dos meses, agarró el pedazo y le dió un mordisco, sabía horrible como si se hubiera comido mierda de la basura, sus otras dos cabezas pensaron lo mismo, a pesar de que no coman, podían sentirlo. "Extraño mucho la comida de mi anillo..." se quejó en silencio, pero siguió comiendo, no podía tiralo por alguna parte, ya que esto bastará para su estadía en el bosque.