El novio del Rey [MuzDou](+18)

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-Ahh~ S-Señor Muzan~- Gimoteaba Douma sumiso abrazado al cuello del mayor, quien estaba recostado encima suyo dándole besos en el cuello mientras acariciaba y pellizcaba uno de sus pectorales sobre la ropa.

-Eres toda una delicia, definitivamente vas a ser uno de mis novios. Cuál es tu nombre?- El ojirrojo mordió el cuello del más alto y gruñó encantado apretando con fuerza el colchón reprimiendo sus ganas de destrozarlo.

-M-Me llamo Douma.- El peliplata se acercó tímido y dejó un suave besito en sus labios. -N-Nunca tuve novio, de hecho, usted es mi primero en todo, primer beso, primera vez, primero en todo. E-Es que siempre soy muy obediente y recto, pero como es mi cumpleaños quise ser felíz.-

Muzan sonrió con ternura y tomó sus mejillas con una mano. -Entonces te voy a hacer felíz toda la noche, precioso.-

El Kibutsuji saltó directo a sus labios en un apasionado beso de lengua, en el cual el Loyola intentaba torpemente seguirle el ritmo del beso.

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-Tu! Abre la puerta! Quiero a mi chico!- Gritó furioso Shinobu.

-No. Vete si no quieres que te haga daño.- Kokushibo estaba de brazos cruzados en la puerta de la habitación viendo con el ceño fruncido al pelinegro de puntas moradas.

-DOUMA! SOY SHINOBU! MÁS TE VALE QUE NO TE ENAMORES DE ÉL!- Gritó el menor y cuando Kokushibo avanzó tres pasos hacia el corrió nuevamente al salón principal con su amigo y su hermano.

-Y bien?- Preguntó con curiosidad Kanae.

-Me voy.- Shinobu gruñó celoso yéndose del bar luego de pagar su trago y el de Douma, quien al final no pudo probarlo.

-C-Cómo está Douma?- Preguntó Kotoha preocupado dejando el dinero de su trago para seguir de cerca a Shinobu.

-Con el ano abierto.- El Kocho menor gruñó furioso y pateó una piedrita del suelo caminando hasta el auto de su hermano mayor.

-Nos vemos Mario!- Kanae dejó el dinero de su trago y corrió tras los menores.

-Mi pobre Doumita.- Kotoha sollozó preocupado y se abrazó a si mismo. -Si fuera más fuerte podría haberlo protegido.-

-No te culpes Koto.- Kanae se acercó y apoyó un brazo en el hombro de su amigo. -Dou ya tomó su decisión, si el quiere divertirse es su derecho, tiene 23 años ya. Lo importante es estar ahí para el siempre que nos necesite.-

-Eso lo sé.- Suspiró con tristeza. -Es solo que... Me había ilusionado tanto con el. Quería darle un beso hoy por su cumpleaños.- Sacó del bolsillo de su pantalón un sobre. -Le escribí una carta con mis sentimientos, pero no creo que valga la pena dársela.-

-Por qué no? Solo va a tener sexo, no es que se va a enamorar de el. Ya sabes como es el Rey, siempre tiene sexo sin compromiso, con los únicos que tiene compromiso son sus novios, como el guardaespaldas o el bailarín de pelo fucsia. Seguramente ni el ni Dou vayan a crear sentimientos por el otro en una sola noche de sexo. Además vas a tener que cuidarlo cuando regrese. Le diré a mi hermanito que hoy dormiremos en su casa, a mi también me preocupa que Dou no quede paralítico.-

Ambos rieron bajito y llegaron al auto, donde Shinobu estaba fumando un cigarrillo mientras escribía en su celular.

-QUÉ TE DIJE DE ESA MIERDA?!- Gritó furioso Kanae quitándole el cigarrillo, el cual tiró al suelo para apagarlo con su pié. -Hoy vamos a dormir en tu casa, no quiero que hagas una estupidez mientras no estoy. Ahora sube atrás.-

Shinobu solo gruñó bajito para luego subir al asiento trasero azotando la puerta en el proceso.

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-Mmm~~- Douma veía encantado a Muzan mientras chupaba su pene, viendo el musculoso cuerpo del mayor contraerse de placer.

-Carajo~ Tu boca es tan cálida y húmeda...- Jadeó Muzan acariciando suavemente el cabello platinado del menor que tenía la mitad de su pene en la boca, mientras el mismo se masturbaba la otra mitad. -Definitivamente vas a ser mío por siempre.- Se mordió el labio inferior y apretó el cabello de Douma, bajando su cabeza para meter su pene por completo en la boca del menor.

-Mmm~!- El peliplata cerró sus ojos con pequeñas lagrimitas saliendo de estos, removiéndose al sentirse ahogado y comenzó a respirar agitado por la nariz mientras sus manos torpemente intentaban quitar las manos de Muzan de su nuca.

-Aguanta bonito, ya casi me vengo.- Jadeó ansioso Muzan, dando una suave pero profunda embestida a Douma, llenando su boca y garganta por completo de semen.