Beastmen || Harem

04

—HO SI SISISIISIS, PAPAS DORADAS, AL VAPOR COMO SEA!!

Celebró, adiós a la época de las cavernas! Hola edad dorada de la patata!

Entusiasmada tiro todas las plantas de patata a su bolso, solo faltaba que encontrará la forma de hacer sal y podría vivir como en cuna de oro en este mundo.

[Felicidades!! Has completado tu mision!
Ten tu recompensa!

Has recibido 10 monedas del sistema!]

Ignorando está notificación siguió recolectando patatas, cuando verifico que había recolectado todas las de esta zona puso la ruta a su hogar en el mapa, y de esa forma empezó a silbar mientras caminaba.

No lo podía creer!! Este definitivamente era el día más feliz de su vida!!

Hace cuánto tiempo del apocalipsis de su tierra que no había comido patatas en tan buen estado!?

No podía esperar a llegar a su cueva y empezar a cocinar estás deliciosas papas, tanta deliciosidad le hacía babear.

Deteniéndose en seco pensó con seriedad—Mmm...no suena tan mal pescado con pa- HAAAA!!! DIOS EN TODO SU ESPLENDOR!!—grito aterrada mientras sentía como era agarrada por el gorro de su chaqueta.

YA NO ESTABA EN LA PUTA TIERRA!!

Ahora estaba como a dies metros sobre ella!!

No vomites, no vomites, se repetía viendo como se elevaban más y más, alzó su mirada viendo a una especie de pájaro enorme que la observaba fijamente mientras volaba.

Dios! Acaso este hijo de su pájara madre nunca le dijeron que mirara al frente mientras volaba!?

—Mira en frente!! Frente!!!—grito— le estoy gritando instrucciones a un pájaro! Me volví loca!!—rio maniacamente mientras se aferraba con fuerza de su chaqueta.

Este es su fin? Será devorada por este pájaro? Se comerá su carne mientras utiliza sus huesos como mondadientes cuando termine?

En ese momento cuando estaban por pasar el follaje de los enormes árboles salió disparada como una bala una serpiente roja como la sangre, en el corto lapsus que pudo ver de esta vio en su mirada una sed asesina enorme!

Estampó contra el ave de tal forma que logro que está golpeara contra un árbol, y por la fuerza del impacto desgarro el corro de su chaqueta causando que quedará libre!

—LIBERTAD!!!—grito en el aire mientras salía volando de las garras del ave.

Si! Sabía que dios no la había olvidado! Desde hoy me arrepentiré de todas las veces que le dijo a su jefe estaba enferma pero en realidad estaba de viaje con sus bendiciones en la playa! O cuando dijo que se propondría una meta ese año pero nunca la cumplía!

O tambien-

Puff

Lo escucharon? Ese fue su cuerpo quedando KO contra un árbol.

Cambio punto de vista.

En la aldea garra de aguila todo era pacífico.

Claro, si no cuentas que vivían en un bosque extremadamente peligroso y sus siete hembras.

El era de los muchos sin pareja, y se mantendría así.

Nació solo y morirá solo, no necesita nada ni nadie, el romperá el ciclo de sus antecesores, no dejará que una hembra le quite su independencia y autonomía solo para servirles y ser pagado con una mínima mirada de condescendencia.

El dios bestia pudo haberlas bendecido con el don de dar la vida y las respetaba por ello ya que ellas eran las que poblaban la tribu.

Pero su actitud arrogante y su desdén por los demás le repugnaba, por muy bellas y hermosas que fueran el se aria respetar.

Si en el milagroso caso escogiera una compañera para tener su nidada de polluelos, el esperaba que...lo amara.

Pero ese es solo un sueño infantil del que era una vez una cría tonta he ingenua.

—Josh! El jefe te llama!

Saliendo de sus pensamientos asistió al otro aguila, emprendiendo vuelo a la casa del jefe de la aldea, su hermano.

Al llegar observo con mirada crítica el lugar, la compañera de su hermano y sus demás parejas no estaban por lo que lo alivio un poco.

Enserio no quería lidiar con sus exigencias a primera hora del día.

—Hermano!

—Fer, para que me necesitas.

Fer, el jefe de la aldea y su hermano mayor de la primera nidada de su difunta madre, es una bestia triple marcada al igual que el pero a diferencia de lo que muchos en la tribu piensan no existe rivalidad entre ellos, poco les importa quien es el mas fuerte en realidad.

El único problema es la pareja de su hermano, quien enojada por haberla rechazado innumerables veces para ser su guardian o pareja difunde terribles cosas sobre el.

Aveses se sentía tan despreciado por su tribu, solo por rechazar a una hembra era un paria, lo único que lo mantenía en pie era su hermano quien no creía nada en lo que decían pues conocía a su pareja.

Pero no podía hacer nada contra ella si no quería que cortaran su vínculo.

—Por el dios bestia Josh! Acaso no puedo solo llamarte para saber cómo está mi hermano menor —dijo burlón mientras se asercaba para rodearlo por los hombros en un abrazo.

Rodando los ojos correspondió el abrazo rápidamente— Sabes que no me gusta venir...aquí hermano.

Separándose el Alcón mayor cerro los ojos apenado— Lose Josh y en serio perdóname por no poder hacer nada...

Negando le dió una suave sonrisa— No hay nada que perdonar hermano, se que estás limitado y yo no podría vivir con la carga de que te conviertieras en una bestia desrraigada solo por oponerte a tu pareja.

La mirada de Fer se oscureció por unos momentos, recordando a su pareja y el trato caprichoso y horrible que le daba a su hermano pequeño, la amaba, dios bestia era conciente de ello pero también amaba a su hermano y era conciente de lo rechazado que se sentía por el trato de la aldea a él.

Apretando los puños suspiro impotente recomponiendo se para mirar serio a su hermano, que al ver que ahora había dejado su actitud de familaridad se enderezó en su sitio para oír ahora no solo a su hermano sino al jefe de la aldea.

—En los límites de nuestro territorio al norte de aquí se a visto un grupo de bestias desrraigadas, rastreamos la cueva donde se quedaban pero...—paro tomando aire como si le costará decirlo—solo encontramos a una hembra y Josh, apenas era una cachorra.

La ira subía a su cabeza rápidamente y las venas de su cuello se marcaron con rabia contenida.

Monstruos.

Eso eran, como se atrevían a robar a una cachorra!

Sentía tanta impotencia y ira en su interior por lo que dijo su hermano y por lo que quedaba implícito en lo que le paso a la pobre cachorra.

—Ya hemos enterrado su cuerpo, he eliminamos a la mitad de los desrraigados pero dos escaparon —asercandose a una cesta tomo un cuero enrollado, para extenderlo por el suelo— aquí fue donde encontramos a la cachorra—señalo un punto negro dibujado con carbón de forma brusca— y aquí se encontró otro rastro de una hembra, creo que esta escapo o la mantuvieron en otra cueva como repuesto.

Rápidamente se arrodillo frente a su líder.

—Cuales son mis órdenes.

—Rastrea y trae a la hembra sana y salva tanto como puedas, te llevarás un grupo de seis águilas más para que puedan recorrer más terreno y si encuentras a las bestias desrraigadas restantes, matalos. —termino fríamente.

—Si, por mi honor lo are.