Sentado en su regazo Matías tenía una pistola metida entre los labios de Gregory, el chico de rulos rubios aun temblaba mientras la falta de sueño se hacía notar en su rostro, en las ojeras marcadas y oscuras aunque sus ojos no se vieran, en su pullover azul sucio con sangre y mugre, realmente había ido muy lejos las cosas entre él y aquel morocho, pero la verdad es que se preguntaba.
¿Cuándo había ido todo tan mal?
Creía que sería solo el desprenderse de una sociedad consumista que vino tras la creencia que todo lo de fuera era mejor, de una crisis que lo hundió como a su hermana, con la lengua movió la boca del fuego de esta misma, haciendo que chocara con sus dientes, quedando en el lado de su cachete, pero como se escribió antes, esto ahora era demasiado tarde como para retroceder, primero había que ver los iniciales pasos hasta el abismo.
Se despertó renovado en la mañana, demasiado temprano para la hora en la que había regresado, pero algo en él lo despertó temprano ese día, podrá ser suerte, o mala suerte pero algo lo saco de la cama ese día, y para lo horrible que venían siendo estas semanas, sinceramente lo agradecía.
Lo único que lo hartaría seria nuevamente seguir la rutina, el mate para el desayuno, capaz encontrar algo de pan viejo que aún no haya desarrollado moho, o comer galletas de agua, se había gastado todo ayer teniendo en cuenta que se dio el lujo de una hamburguesa demasiado barata y probablemente dudosa procedencia, ¿Le pediría plata a su hermana?, no, no sabía cómo era su situación porque esta no compartía mucho como venía en su bolsillo, pero tampoco la pondría en aprietos, por suerte recordó que aquel morocho ayer le había pagado de más los dos fernet que se tomó, sonriendo un poco inconscientemente por él, debía tener la plata en el cajón de arriba de su pieza, capaz compraría algo para comer hoy, no tenía muchas ganas de cocinar, capaz algunos ingredientes para guardar en la casa y cocinar ahí.
El haber dormido bien lamentablemente fue una ilusión muy estúpida suya puesto que un grito lo saco de ese estado de trance.
-GREGORY
Noto que estaba a punto de quemar su fiel pullover azul, quitando su brazo rápidamente del fuego, por un momento se le paso por la cabeza dejar la mano ahí... ¿Qué mierda pensaba?, debe ser el cansancio que creyó falsamente que se había ido, pero si se sentía más fresco por alguna razón, se giró para ver a su hermana la cual aún parecía un tanto cansada.
-¿Eh?, ¿Qué pasa?
Pregunto tratando de parecer tranquilo, ganándose el suspiro cansado de Judith.
-¿Qué no te dieron nada para el insomnio en el hospital ayer?
Parecía bastante enojada de que ayer hubiera ido al médico al reverendo pedo o que la tortura de tener que salvar a su hermano de matarse a sí mismo por accidente debido al cansancio era peor que criar un bebe, aun recordaba esa charla con sus amigas "Lo vas a tener que despertar como a los bebes", un escalofrió le recorrió la espalda a Judith, no, él no iba a ser un bebe.
-Me dijo que no hay abastecimiento de medicamentos y que no me los puede recetar
-Pero ese es un pelotudo, vos también cagon ¿Por qué no le dijiste nada?
-Trate y el médico me dijo que si quería ver gente echa mierda de verdad vaya a ver las personas que andan en las reuniones de la iglesia, ¿Me vas a seguir rompiendo las bolas o te hago el mate?
Sinceramente ya sentía que una casa tan grande se hacía más chiquita desde que ninguno de los dos tenía ganas o en el caso del chico rubio, gente, con la cual salir de su hogar aunque sea a caminar y dar vueltas, esa casa de madera que ahora se sentía de esa madera con la cual hacen las casas de las muñecas, harta, su hermana solo puso sus dedos en su cien, harta de su situación de insomnio, mordiéndose el interior del cachete para no putearse con su hermano, lo entendía, él no estaba con una buena situación pero ya estaba harta de cómo se comportaba, no le dijo nada, pero murmuro un muy audible "Ándate a la mierda Gregory".
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¿𝘿𝙤𝙣𝙙𝙚 𝙩𝙚𝙣𝙜𝙤 𝙡𝙖 𝙘𝙖𝙗𝙚𝙯𝙖? (Gretias)
FanficPerder toda esperanza para encontrar la libertad, para encontrar una vida libre de todas las cosas que lo atareaban y lo estaban convirtiendo en solamente un esclavo de la sociedad, perder toda esperanza para ver la libertad en el amor que le ocasio...