Bell vivía en un reino lejano, pero no era un ciudadano corriente, era el guardian de una pequeña niña que encontró en una fría noche de invierno.
Este chico llega a Orario con la compañía de la pequeña ¿qué futuro les deparará a ambos?.
Bell había tenido bastantes problemas para cuidar a la pequeña niña pero aún así no se rindió, busco mejorar a su manera y lo hizo.
Había logrado sobrevivir 8 años con ella y tenían una vida medianamente normal ya que la guerra se había intensificado mucho en ese tiempo.
También tuvo que mejorar su puesto en la guardia para poder obtener más dinero, con el pasar de los años se convirtió en un guerrero impresionante con la alabarda, en el campo de batalla lo conocieron como "golpe de rayo" por la fuerza, velocidad y letalidad de sus golpes.
Ahora Bell con 26 años se convirtió en un gran padre de una pequeña niña que encontró en la calle hace ocho años.
Ahora la pequeña tiene el nombre de Clara Cranel, es una niña muy bondadosa y le encanta ayudar en lo que pueda, ella tiene un sentimiento de pureza y bondad bastante grande para la época en la que viven.
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Bell - Hola Natasha, vengo por mi hija - entrando a la sala.
Clara - ¡Papá! - corriendo a abrazar a Bell.
Bell - Mi pequeña - abrazándola - ¿cómo estás, te has portado bien, no has causado problemas? -
Clara - Estoy bien papá, no he causado ningún problema con la tía Natasha -
Bell - Me alegra oír eso mi niña, ¿donde está Natasha? - acariciando le el cabello.
Clara - Está preparando té, me dijo que esperara aquí, por cierto papá, ¿no tienes ninguna herida? -
Bell - ¿Por que la pregunta hija? -
Clara - Como siempre llegas a casa con algunas heridas le pregunté a la tía Natasha si me podía enseñar a curar heridas -
Bell - Gracias por preocuparte por mi, estoy orgulloso - soltando unas cuantas lágrimas por lo que está haciendo su hija por el.
Natasha - Hola Bell, llegas justo a tiempo para el té -
Bell - Hola Natasha, espero que el té no me decepcione -
Natasha - Ya sabes que no -
Todos se sentaron en la mesa para tomar té pero no duró mucho tiempo ya que llegaron algunos guardias al lugar.
Guardia 1 - ¡Capitán necesitamos su ayuda! - grita el guardia todo alterado.
Bell - Es mi momento de descanso, ¿no puede ser en otro momento? - dice algo enojado.
Guardia 2 - Es algo urgente capitán, el comandante quiere verlo -
Bell - Si el me llama debe ser algo urgente entonces, lo siento hija, Natasha, tengo que irme otra vez -
