Por qué la mente del ser humano puede ser muy poderosa, muy astuta, muy miserable, muy turbia, muy revuelta.
Capaz de crear grandes soluciones, como también grandes destrucciones.
Capaz de jugar con las facultades mentales de unos, como de perturba...
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La casa de los Kim estaba ocupada por la ambulancia del psiquiátrico a esas horas.
Los médicos sacaban a Nam de la casa y sin problemas lo subieron a la parte trasera de la camioneta. El muchacho parecía estar drogado, no comprendía nada de lo que sucedía en su entorno ni tampoco que era lo que pasaría ni que iba a suceder con el cuando sus pies estuvieran dentro de esa ambulancia.
-Por favor hijo, hazle caso a todo a los doctores. Ellos te van a ayudar y te prometemos que iremos a diario a visitarte- decía su madre mientras trataba de retener el sentimiento de culpa que sentia por dejar que aquellos tipos completamente desconocidos se llevarán a su hijo el cual estaba siendo tratado como si fuera un "loco"-
-¿Volveré pronto?- pregunto está vez el chico de cabello castaño oscuro, un tono muy oscuro casi como el del chocolate amargo-
-sostuvo con cariño las mejillas de su hijo- estaras muy pronto de regreso cariño, eso te lo prometo, solo será una temporada, después regresaras con nosotros- dijo para después dejar un dulce beso sobre la frente de su hijo-
-¿Prometes que irás a buscarme? ¿Qué Volverás por mi?- preguntaba insistentemente el chico de los ojos oscuros-
-Te lo prometo mi niño- da un último abrazo a su hijo antes de soltarlo y dejar que los médicos se lo llevaran-
-Sonrie con melancolía, antes que los doctores obligarán a Kim a subirse al vehículo- Gracias mamá-
Finalmente Nam partio, sus padres esperaban que fuera poco tiempo, querían estar con su hijo, con su Nam alegre de antes. Sabían que pronto volverían a ver a su hijo como nuevo.
Grave error haberse fiado, haber tenido confianza en ese lugar...
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La ambulancia llegaba al hospital. El chófer estacionó el vehículo frente al lugar. Los médicos sacaron a Nam del interior, para guiarlo.
Por alguna razón, el interior del lugar se sentía frío y provocaba un terrible escalofrío sobre la espina dorsal de Namjoon, se sentía como un preso siendo rodeado de guardias caminando a través del largo pasillo donde lo único que había a su izquierda y a su derecha eran habitaciones selladas con materiales duros y resistentes como hierro, metal o barrotes para evitar que los pacientes escaparan de los cuartos de encierro.
