𝚅𝙸𝙽𝙲𝙴𝙽𝚉𝙾 𝟸 || "𝓘𝓵 𝓶𝓪𝓵𝓮 𝓷𝓸𝓷 𝓻𝓲𝓹𝓸𝓼𝓪 𝓶𝓪𝓲" Version 2.

19| One more clue.

𝚅𝙸𝙽𝙲𝙴𝙽𝚉𝙾 𝟸: 𝙸𝚕 𝚖𝚊𝚕𝚎 𝚗𝚘𝚗 𝚛𝚒𝚙𝚘𝚜𝚊 𝚖𝚊𝚒.
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Ubicación Desconocida

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Jang Han Seok miraba la vista que tenia desde la ventana con cierta repulsión, se preguntaba mientras le daba vueltas a su pistola como es que había terminado en el lugar donde estaba. 

Un día, era el presidente de una de las compañías más poderosas de Corea del Sur, liderando desde las sombras, ganando dinero y poder en cualquier área política. Y en un abrir y cerrar de ojos estaba en una cabaña apestosa abandonada en un bosque, escondiendose como si fuera una rata de alcantarilla de un gato sarnoso y apestoso.

Mientras más pensaba en Vincenzo Cassano, más se daba cuenta del odio que tenia por el mafioso y de lo mucho que lo queria torturar. Quería verlo sufrir, quería que suplicará por su vida. Ya no le importaba si su sunbaenim salia lastimada o si moria, al final del día si a ella le pasaba algo Vincenzo estaría destrozado... ¿No?

— Dejala ir, te prometo que no me opondre ni resistire pero por favor Jang Han Seok... Dejala ir.

Fue lo que esa vez había dicho Vincenzo, aquella noche en que Han Seo también perdió la vida.

— Mi pequeño cachorro —dijo con una sonrisa de lamento— ese pobre bastardo.

Aunque no le gustará admitirlo realmente quería a Han Seo. Pero, no como un hermano, más bien como una mascota. Si. Esa era la mejor palabra para definir como el veía a su medio hermano. Siempre era tan servicial, siempre buscando su aprobación, no importaba cuanto lo lastimara el era leal... justo como una pequeña mascota.

Toda su vida iba bien hasta que ese maldito mafioso arruino todo. Y él le haría pagar muy caro todo lo que habia perdido.

— ¿Solo estás pensando y ya estas muriendo de aburrimiento? —preguntó Young Soo entrando a la habitación, tirando a la mesa su teléfono celular y un folder para sentarse en la silla enfrente de su socio.

— Tsk, solo estoy pensando... Cuál seria mi siguiente movimiento para destruir a ese bastardo —dijo casi en un murmuró, mirando aun las aves pasando. Queria agarrar la pistola y dispararles.

— Veo que estás muy concentrado Han Seok, no recuerdo que fueras así...

Lee Young-Soo miro a Han Seok con una ceja arqueada, se le veia muy tranquilo para todo el torbellino de ira que poseia el ex empresario. De alguna forma, Young-Soo estaba impresionado el como su amigo habia caido tan bajo. Cuando se conocieron en la preparatoria las cosas eran realmente distintas y Han Seok era el verdadero terror de la escuela.

No podría decir que lo admiraba del todo, en ese entonces su familia pasaba por una crisis tras el divorcio de su padres. Él y su pequeño hermano habian tenido que mudarse a Estados Unidos con su padre debido a la incapacidad de su madre para cuidarlos, o eso habia dicho el psicólogo. Tal vez el verdadero incapaz de cuidar de sus hijos era el imbécil de su padre, Jackson Lee, un bastardo abusador.

Nunca tuvo el coraje de enfrentarse a su padre, y muchas veces permitio que este golpeara a su pequeño hermano y lo llamara marica por no defenderse. Pero cuando conocio a Han Seok, fue que obtuvo el verdadero valor y tal vez, lo que le hizo conocer la palabra amistad... una muy retorcida amistad.