El Regreso de los Mikaelson/ Ameli Mikaelson Petrova #4

Capítulo 9: Querido tío Kol

Nueva Orleans

-Elijah, soy yo, otra vez - Rebekah intenta dejarle un mensaje de voz a su hermano - No estoy para nada preocupada porque deberían haber llegado hace como veinte minutos. - le recuerda - Llámame, por favor. -

- Tardan demasiado. - se queja Kol - Deberíamos irnos. - mira hacia los túneles -

- No abandonaremos a la familia - niega Rebekah -

- Marcel podría estar haciéndolos pedazos ahora mismo. - le recuerda -

- O puede que no tenga suficiente cobertura en las alcantarillas. - sugiere con calma - Vendrán Kol, lo sé. - asegura - Y ahora que estamos a solas quiero decirte gracias. -

- ¿Por qué? - Kol frunce el ceño -

- Por venir a buscarme. - le responde - Y poder estar aquí, enfadada contigo. -

Rebekah le dedica una sonrisa sincera que Kol no duda en devolver.

Justo en eso, los demás salen de los túneles.

- ¡Nik! - exclama Rebekah al ver el estado de su hermano y se acerca ayudarlo -

- Ya lo abrazarás luego, tenemos que irnos. - dice Freya -

- Marcel viene detrás de nosotros. - recuerda Hayley -

Ameli sale de las alcantarillas, seguida de Katherine y los muchachos.

Rebekah queda estática al verla, reconociendo sus ojos.

- ¿Ameli? - cuestiona -

La aludida sonríe.

- Hola, tia Bekah. - saluda -

- ¿Ameli? - suena otra voz y la bruja mira al responsable -

- Tío Kol. - sonríe con felicidad -

Ameli se acerca a sus tíos y los abraza. Kol y Rebekah la reciben con cariño, aún sin poder creer que esa mujer era su sobrina. Rebekah acaricia el cabello de su sobrina y Kol deposita un beso en su frente.

Elijah y Rebekah ayudan a Klaus a caminar pero una voz los intercepta.

- Que lindos que son los reencuentros - dice Marcel, apareciendo frente a ellos - Pero estoy ya aqui - le dice a Hayley antes de mirar a cada uno de los presentes - No debieron volver. Ninguno -

- Es lo que hacen las familias. - le responde Hayley - Luchamos por los nuestros. -

- Eso dicen, pero a mí no me funcionó ¿verdad? -

- Por el amor de Dios - se queja Kol - No eres un Mikaelson, supéralo ya. ¿No tienes una ciudad que dirigir? ¿Vampiros que echar? -

Marcel lo mira enojado y se dispone a acercarse a Kol pero Rebekah se coloca delante de su hermano, sabiendo el efecto que tiene sobre Marcel.

- Ni se te ocurra. - le dice - Si quieres matar a uno, tendrás que matarnos a todos. - Dylan, en el fondo, pasa saliva con esfuerzo -

- No me provoques Rebekah. - le dice Marcel con frustración - Ni me amenaces. Sabes de lo que soy capaz -

- Ya basta. - dice Klaus, colocándose junto a su hermana - Ya basta Marcel, has ganado. Nueva Orleans fue nuestra ciudad, ahora es tuya. Para siempre. -

- ¿El gran Klaus Mikaelson la derrota? - pregunta incrédulo - ¿Qué es esto? ¿Otra distracción? -

- Ninguna de las dos. - responde Klaus - A pesar de tu terrible comportamiento, te ofrezco una oportunidad para la paz . Si intentas matarnos a todos, cometerás un error. Quien sobreviva buscara venganza y traerá a nuestros enemigos a la ciudad, siguiendo nuestros pasos. - lo mira - Aunque a pesar de todo el dolor que causaste, no te veo capaz ,y lo digo porque te conozco, de lastimar a Ameli o a sus amigos inocentes. -