ENTRE REJAS DORADAS /TAEKOOK/

8

El mes transcurrió rápidamente para Taehyung, quien se sumergió de lleno en sus responsabilidades como guardaespaldas de Jeon. Las rutinas, aunque intensas, resultaron ser llevaderas para ambos. 

Taehyung observó cómo el joven Jeon asistía a diversas clases, absorbiendo conocimientos en matemáticas, comunicación y lectura, historia, modales, vestuario, dibujo y pintura, así como física. Durante ese tiempo, Taehyung se aseguró de mantener un perfil discreto, siempre atento a cualquier posible amenaza.

Sin embargo, a pesar de la proximidad constante, Taehyung notó que las interacciones entre él y Jeon eran limitadas. Los diálogos se reducían a despedidas cortas, y aunque Taehyung estaba cumpliendo con su deber de proteger al joven, comenzó a sentir un vacío emocional. Se dio cuenta de que nunca había entablado una conversación real con Jeon, y eso le generaba cierta tristeza.

Jeon, por su parte, se mostraba reservado y distante. Aunque Taehyung lo veía sonreír mientras leía libros, la barrera entre ellos parecía infranqueable. Taehyung anhelaba una conexión más profunda, quería entender al joven que estaba protegiendo. Sentía curiosidad por sus pensamientos, por lo que le apasionaba, por sus sueños y anhelos.

Una tarde despues de clase, el sol comenzaba a ponerse cuando Taehyung, con una curiosidad genuina, abordó el tema de la escritura con Jeon mientras caminaban por los terrenos de la mansión.

—Joven Jeon, ¿alguna vez ha intentado escribir algo de si mismo? Digo, con toda la pasión que pone en la lectura, me pregunto si también disfruta expresarte a través de las palabras—, preguntó Taehyung, esbozando una sonrisa amable y curiosa*espero y no se moleste* piensa estando nervioso.

Jeon, momentáneamente sorprendido por la pregunta, desvió la mirada antes de admitir tímidamente con una pequeña conrisa, —Bueno, sí, de vez en cuando lo he intentado. No es algo que comparta con mucha gente—.

La respuesta pareció abrir una puerta a una parte más íntima de Jeon, y Taehyung se sintió aliviado al ver que su pregunta había sido bien recibida. —Eso suena genial. ¿Qué tipo de cosas le gusta escribir? ¿Historias, poemas, tal vez diarios?—

Jeon sonrió levemente, dejando entrever un destello de confianza. —Principalmente pequeños fragmentos, pensamientos. A veces, solo trato de plasmar lo que veo a mi alrededor—.

Taehyung sonrió de vuelta, contento de haber descubierto esta faceta más personal de Jeon. —Eso suena fascinante. Debería mostrarme algún día, si se sientes cómodo, por supuesto—.

Jeon asintió, sus mejillas coloreadas por la atención de Taehyung. —Sí, tal vez algún día lo haga. No es nada extraordinario, solo algo que hago para mí mismo—.

El joven Jeon sorprendió a Taehyung al devolverle la sonrisa y decir, —Es interesante estar contigo, Taehyung. —.

La declaración tomó a Taehyung por sorpresa, pero le llenó de alegría. A medida que se dirigían hacia la mansión, notó que Jeon estaba más directo y abierto que nunca. Luego lo vio despedirse de el y entrar dentro de aquella puerta, taehyung aun esta atónico y sus mejillas se sienten calientes, definitivamente esta nervioso.

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hoy tendrán que ir de cabalgata por los alrededores de la mansión, eso es lo que le informaron, tambien vendra Hobi y yoongi, ahora mismo se dirigen a las cabañas, jungkook se mantiene serio y puede notar su inquietud en la mirada, sus manos están juntas , *esta nerviso?*, piensa taehyung, es entonces donde le viene un pensamiento, *tal vez no sepa cabalgar*, piensa intrigado, pero no decide preguntar, no ahora.