El enemigo?.... o el hermano

21.-El ASL

Pov: escritor

Los piratas de Shirohige estaban peleando contra algunos marines, normalmente no pelearían o tenían problemas con ellos pero esta vez era especial, su hermanito estaba en esa isla y lo necesitaban proteger.

Claro que los marines no eran nada para ellos, por muchos que fueran ellos son del grand line, y sengoku no había mandado algo capaz de combatirles, seguro estaban ocupados pensaron todos, lo que ellos no sabían era que Garp estaba en la isla.

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Mientras tanto el otro grupo estaba desenterrando a los cuerpos, más bien Ace lo estaba haciendo.

Ace ya había excavado más de la mitad SOLO y los demás solo lo miraban, estaba todo en silencio solo se escuchaban los suspiros y los sonidos de la pala al entrar rápidamente en la tierra.

Ace se empezó a desesperar cuando no vio nada, ni un hueso, ni ninguna moneda

-¿Me podrías ayudar? o por lo menos hablar?...

Dijo Ace entre suspiros, llevaba cavando aproximadamente medio hora y nadie había movido un dedo para ayudarle, ni Marco que es su pareja

Marco le dio algo de ternura verlo asi y iba a ir a ayudarle pero Shao wen lo detuvo haciendo que Marco frunciera el ceño.

-No vayas, él lo puede hacer solo, yo no entrene a un debilucho

Dijo Shao wen mirando fijamente a Marco, este soltó feromonas molestas.

-No me digas lo que debo de hacer, el es mi omega y si quiero le ayudo-yoi

Dijo casi en un gruñido, Shao wen frunció las cejas.

-tu qu-

Ace corto a shao wen de un grito

-¡Encontré algo de madera!

grito el azabache muy feliz

Shao wen sonrió y miró con superioridad a Marco.

-Yo crié a alguien capaz, sin necesidad de un alfa

Dijo este, a Marco se le salía una vena, mientras tanto Garp miraba todo con gracia, quien diría que su sobrino podría tener a un comandante de un yonko y a un espíritu raro bajo sus pies.

Ace se empieza a fastidiar con las feromonas de Marco pero aprovechar para descargar su enojo cavando.

-¡Callaros y ayudarme!

Grito Ace ya desesperado, sin darse cuenta ya tenía dos ataúdes desenterrados.

Cuando giró su cabeza se quedó en blaco al ver como casi rompió las tumbas de sus hermanos pequeños.

Ace suspiró y cogió los ataúdes.

-Ahora los llevais al barco vosotros.

Dijo Ace llendose.

Los demás lo siguieron, todos menos Garp.

-Mocoso, toma

Dijo este dándole un denden mushi, Ace se sorprendió.

-Llámame todas las semanas si falta, si algun dia no lo haces ten por seguro que iré a el barco de barbablanca, le dire a sengoku que os escapais teis

Dijo Garp con voz firme.

-vale adiós viejo de Mierda

Dijo Ace en una risa.

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Vista vio a lo lejos como se acercaban.

-¡¡Retirada!!

Todos al escuchar eso fijaron su vista al bosque viendo como se acercaban, y se fueron retirando poco a poco.

Cuando solo quedaba Marco, shao wen y ace por entrar, quitaron el ancla, claro estaba el strike y se podían subir hay, los marines no se movieron para capturarlos, había muerto bastantes muertes y había bastante heridos no podían darse ese lujo.

Ace arrancó el strike y se fueron muy rápido lo máximo que este podía, estaba ansioso por revivir a sus hermanos

-¡Ya estamos!

Grito Ace, de un salto llegó a la cubierta, Marco y Shao wen los siguieron.

Barbablanca iba a hablar pero Ace no lo dejo.

-Necesitamos, el cádiz y las frutas del diablo.

Dijo Ace, inmediatamente salieron las cosas.

-gracias sensei.

Barbablanca que estaba callado decidió hablar.

-Ace, hijo, este ritual o lo que sea... ¿Dónde lo harás? digo algunos de tus hermanos son sensibles

Dijo algo preocupado.

-No es nada traumático, pero si queréis vamos a la habitación de Ace

dijo Shao wen mirando de reojo a Marco, viendo como este se empezaba a enfadar.

-haremos votación-yoi

Dijo Marco

-Quien quiera ver el ritual levante la mano y quien no quiera que la baje-yoi

Automáticamente todos en la cubierta levantaron las manos.

-Salió mayoría-yoi

barbablanca suspiro y asintió

-Está bien hacerlo

Dijo Barbablanca con un poco de risa.

-Gracias viejo.

Ace sacó los cadáveres de sus hermanos y los colocó con el cádiz de por medio, las frutas las puso en los esqueletos y por último faltaba su fuego.

Ace miró a Marco y se levantó.

-Ven, necesito tu fuego si no esto no funciona.

Ace dijo eso sonriendo, a Marco se le derritió el corazón al ver eso, sin pensarlo puso fuego en su mano y la acercó al cadiz.

Mientras tanto Shao wen estaba en el nido del cuervo preparando la medicina de barbablanca, aunque estaba algo triste.

Ace puso su mano con fuego en el cadiz.

Shao wen estaba terminando de escribir una carta y terminando la medicina de Barbablanca.