Resolución

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Sakura terminó su jornada y por casualidad se topó con el joven que aunque no sabía su nombre la invitó a salir, sonrieron incómodos

—Vi a su novio— le avisó

—¿Eh?—

—Su novio entró al hospital y estuvo hablando con unas enfermeras, traía flores— contó

Sakura había encontrado de pronto unas flores en su escritorio, él había sido, suponía que el comentario de su ayudante de que tenía un novio muy atento era por eso

La Haruno sonrió

—Él es un gran ninja y un gran hombre, supongo que es bueno que es suertuda— dijo con una sonrisa, sus compañeros le habían dicho que estaba muerto por coquetear con la novia del contenedor de un bijū y decidió deshacerse en halagos para que Sakura fuera benevolente al contarle

Ella se quedó pensando, ya no tenía rencor o enojó, él era lo que el joven decía, se dió cuenta que posiblemente tenía mucho que aprender de Naruto aún, entre eso, como tener un corazón tan amable, de consuelo y sin rencor, aunque tenía uno parecido estaba consiente que él le ganaba en eso

—Sí, realmente lo es— dijo tranquila

Ella sabía como era Naruto.

—¿Va ir con él?—

—Sí. Debo— respondió

Ambos pensaban cosas distintas, el ninja de la niebla esperaba que no se enojara por lo que había hecho aún sabiendo los rumores desde la guerra ninja de una relación entre ellos, que en esos tiempos solo era un rumor. Sakura esperaba que como siempre comprendiera su sentir.

—Buen viaje— se despidió para ir al departamento de su pareja

Naruto estaba sentado comiendo ramen instantáneo viendo el televisor, se sentía un estúpido por no preguntar por los detalles de la declaración a su pareja, se suponía que eran novios aunque nunca se lo habían dicho

Tocaron a su puerta, él se extrañó, no esperaba a nadie, al abrir vió a la mujer en la que había pensado todo el día, él naturalmente se le formó una sonrisa en su rostro, después recordó que tenía que limpiar, con una risa nerviosa levantó lo que pudo con su único brazo, —Lo siento, Sakura-chan, con un brazo es más difícil limpiar—

Ella se le quedó viendo mientras unas cosas se caían de su agarre con una sonrisa estúpida y tratando de tomarlas con su mano

¿Realmente había la posibilidad de que alguien que creció así había actuado en su contra?. Era posible, pero con Naruto puede ser que solo había sucumbido a la estupidez e inexperiencia. Ella también sufrió por eso. El amor te hacía ser un poco irrazonable. Sumado que era solo un niño.

La peli-rosa entró y se sentó en el sofá sin decir una palabra, él la veía con atención, dejó todo en un clóset y se sentó a su lado. Ella se veía apenada, tenía la mirada baja y su puño en el pecho, a el Uzumaki le pareció extraño, se suponía que ese era su papel.

—Naruto— llamó estremeciendo al joven que la veía —¿Lo hiciste con mala intención?— ella sabía la respuesta pero quería escucharlo de su voz

—¡No!— gritó poniendo su puño en el corazón —Yo sólo me quedé embobado en tí, hasta había olvidado que estaba transformado—

—¿Porqué me querías besar? Lo recordé bien y lo que pensaba de tí era que eras molesto y que estabas obstaculizando mi camino al amor—

—Yo lo sabía, lo hacía con intención de que no mirarás a Sasuke, quería que me mirarás a mí— confesó —El era mi rival en la atención de Sakura-chan. Estaba celoso.—

Cabos sueltos [NaruSaku] [✓]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora