Capitulo 1

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Octubre, comienzo de clases

Park Jimin se encontraba al borde de los nervios, estaba por comenzar su primer año del bachillerato, hoy era su primer dia de clases. Luego de la repentina muerte de su madre hace unos pocos meses en que habia perdido el rumbo y un nuevo comienzo parecía lo mejor para él en estos momentos. Después de sus vacaciones de verano dijo adios a todo para mudarse a Seúl, un nuevo lugar, una nueva vida, nuevos amigos, un nuevo comienzo.

Pasó su mano por su cabello rubio peinandolo hacia atrás, un acto reflejo de sus nervios, sus manos temblaban y las pasaba planchando sus pantalones repetidamente mientras entraba al salon de clases. Había muchas personas, más chicas que chicos pero ninguno le resultaba conocido, siguió su camino hasta encontrar un asiento vacio en una esquina al final del salón y ahí permaneció mientras los estudiantes entraban al salón, cada uno parecía de un mundo completamente diferente.

Jimin era un chico tranquilo y delgado, con un estilo casual pero no descuidado, que ama usar lentes y gorros para ocultarse de los demás, podria pasar todo el dia escuchando musica y viendo a la nada o solo haciendo garabatos en su cuaderno mientras tararea. Se recostó sobre el escritorio con un solo audifono en la oreja izquierda para atender cuando la clase diera comienzo, mientras solo tarareaba haciendo figuras con su dedo sobre la superficie cuando unas risas captaron su atención, dirigió su mirada a la puerta mientras por la misma entraban tres chicos pero solo el castaño capturó toda su atención, su sonrisa encantadora lo mantuvo cautivado hasta que por un segundo sus miradas se toparon y jimin se perdió en sus ojos cafés, al menos hasta que los tres tomaron asiento unos puestos por delante del rubio cortando todo contacto visual posible entre ambos.

El profesor llegó al salón dando inicio a la clase, se presentó y pidio a todos que hicieran lo mismo siguiendo el orden en como estan sentados, pasaran al frente y se presentaran con sus nuevos compañeros cosa que a muchos les disgustó y lo dejaron saber con sus quejidos. Jimin no quería, es muy timido, retraído, sus nervios siempre lo traicionaban dejandolo en pena frente a todos, su único consuelo era que segun su posicion seria la ultima persona en hablar, lo que le daba tiempo a pensar que decir sobre sí mismo, total, nadie lo conocía y su idea era tener un nuevo comienzo, asi que en teoría podía decir lo que quisiera y dejar los tiempos de bullying en el pasado.

Todos fueron pasando sin que al rubio les importara mucho, solo hacía garabatos en su libreta de forma distraída hasta que una voz peculiar retumbó en sus oídos, era el castaño, ni siquiera vió cuando se levantó solo atinó a oir su melodiosa voz presentarse ante todos con una sonrisa encantadora que a todos hacía suspirar - soy Jeon Jung-Kook pero pueden decirme Jungkook - sonrió encantadoramente, Jimin estaba seguro que todos habían notado lo atractivo que era el chico - tengo 14 años y me gusta el baloncesto - terminó con un guiño sin destinatario, o eso pensó el rubio.

Después de un rato de que los estudiantes fueran y vinieran le llegó el turno al rubio de presentarse, se levanto con su audífono puesto aún en su oreja, sus manos temblaban mientras caminaba al frente y escuchaba los murmullos y risas de sus ahora compañeros de clase. Al llegar al frente lo primero que noto fue al chico, Jungkook, que lo miraba fijamente con su barbilla reposando sobre su mano, Jimin intentó sin exito ignorar su mirada lo que lo puso aún más nervioso, respiró profundo, cerró sus ojos por un segundo y dijo todo de corrida y sin respirar para luego dirigirse rapido a su asiento mientras los demás seguían con burlas y murmullos.

Luego de una hora totalmente incomoda sintiendo las miradas constantes de los demás la clase por fin culmino y el rubio solo quería salir de ahí. Apresurado intentó recorger sus libros torpemente pero como siempre su suerte no lo ayudó y al intentar salir tropezó con un cuerpo que no vio hasta estar en el piso, era un chico de cabello negro que se reía - Ay, disculpa no te ví - insinuó con burla mientras el rubio comenzaba a recoger sus libros, a su lado pasó otro chico, era un poco más alto y bien parecido pero pateo uno de sus libros, era otro amigo del castaño - Disculpa estaba en mi camino - se rió chocando la mano con su amigo mientras salían.

El rubio ya molesto iba a contestarles pero una voz lo interrumpió - chicos por favor, no hay que ser tan malos - dijo Jungkook a modo de burla mientras miraba a jimin a los ojos - es solo un niño - aseguró regalando un guiño al rubio mientras los demás solo reían.

El castaño se burlaba de él, sin embargo, jimin seguía pensando que ese chico era muy atractivo, no había dudas de que era un tonto, pero un tonto muy atractivo. Logró volver en sí gracias al sonido de la campana, ya todos habían dejado el salón así que no tuvo más que recoger sus cosas y salir a su siguiente clase pensando si su vida aquí sería diferente o si el castaño y sus amigos serían quienes le harían la vida imposible por el resto del año.

Y tú lograste enamorarme... Donde viven las historias. Descúbrelo ahora