CAP 52

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Murmullos se escuchaban por todo el poblado. Los habitantes estaban manteniendo la distancia de una iglesia bastante silenciosa.

HOMBRE 1: Malditos malnacidos.

MUJER 1: No puedo creer que haya pasado esto.

NIÑO 1: Mamá, ¿estarán bien?

MADRE 1: Claro que sí hijo mío.

Un joven de pelo rosa apretaba los dientes por culpa del enfado.

...: ¡No voy a dejar que le hagan nada a mi padre!

Agarró un cuchillo de su saco y corrió hasta la iglesia.

HOMBRE 2: ¡Espera Draco! ¡es muy peligroso!

No hizo caso y corrió hasta la iglesia posicionándose en la parte trasera del edificio. Abrió la puerta y entró por una pequeña trampilla.

Entró al sótano de la iglesia y miró la puerta que estaba delante de él. Respiró hondo y con determinación colocó su mano sobre el pomo para girarlo y empezar a abrir la puerta con cuidado.

La puerta fue abierta mostrando a una pelirroja de 21 años entrar a su habitación compartida con su hermana pequeña.

SCARLET: ¿Dónde lo habré dejado?

Buscaba por toda la habitación su objeto hace poco adquirido, frustrándose por no encontrarlo. La pequeña de las pelirrojas llegó a la habitación dando pequeños saltitos mientras jugaba con uno de sus juguetes.

IRENE: "viendo a su hermana" ¿Qué buscas?

SCARLET: ¿No sé si habrás visto como un objeto envuelto con un pañuelo blanco y que estaba atado con una cuerda?

IRENE: Hmmm, no me suena. ¡Ah espera! ¡Creo que lo he visto aquí!

La pequeña de las pelirrojas corrió hasta un mueble algo pequeño que era usado para guardar herramientas o trapos sucios. Lo movió hacia delante usando la fuerza de sus pequeños bracitos hasta que ahí metido vio un objeto envuelto con un pañuelo blanco atado con una cuerda.

IRENE: "agarrándolo y mostrándolo" ¡Aquí está!

SCARLET: ¡Asombroso! ¡¿Cómo sabías que estaba ahí?!

IRENE: Porque me acuerdo que lo encontré debajo de tu cama mientras buscaba algún indicio de cochinadas tuyas y me regañaste por ello diciéndome que lo ibas a esconder en un lugar dónde jamás lo iba a encontrar. Pero ibas tan enfadada que lo escondiste aun cuando yo estaba presente.

SCARLET: "con una gota al estilo anime" Si que iba enfadada entonces.

IRENE: Tanto que tus dientes se afilaron, tus ojos se volvieron completamente rojos y unas marcas rojas aparecieron por tu cuerpo.

SCARLET: Tampoco hay que exagerar.

Un fuerte grito se escuchó fuera de la cabaña llamando la atención de las dos pelirrojas.

SCARLET: ¿Quién está gritando?

IRENE: ¡Quiero verlo!

Se fue corriendo dejando una nube de polvo con su forma que aún sujetaba el objeto de la pelirroja mayor.

SCARLET: "mirando la nube de polvo" Me lo das por favor.

La nube sonrió y se lo entregó.

SCARLET: Muchas gracias. "sonriendo"

Fuera de la cabaña la pequeña pelirroja miraba a todos lados buscando la fuente de esos gritos. Vio a su padre estar junto a un hombre de 30 años que recuperaba aire y estaba sudado dando indicios de haber corrido un buen trayecto.

El almirante SanjiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora