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- Todo el contenido es puramente ficción.
- OS variados, en su mayoría con temática para mayores.
- Todos los personajes menos la protagonista son pertenecientes al mangaka Gege Akutami.
Gracias por leer! ❤︎
TW!!: Contenido sexual explícito, degradación y sumisión, trío sexual, oral.
En caso de no ser mayor de 16 años pido amablemente que se lea bajo su propio riesgo.
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POV: [[ _____ ]]
¿Qué estaba pasando? No había manera de que esto sea real.
Mis compañeros de rodaje estaban acariciandome con gentileza provocando que mi piel se erizara y mis mejillas luzcan como dos pequeñas cerezas. Satoru tomaba gentilmente mi mandíbula para que pudiera verlo a los ojos mientras Suguru plantaba pequeños y húmedos besos en mi nuca. Satoru sonreía de lado hipnotizandome con sus bellos ojos profundos, no podía resistirme.
— Sabés... Te diré porqué he sido algo duro contigo. — Susurró el albino tomando un mechón de mi cabello y jugando atentamente con él. — Necesito que hagas las cosas bien por mí, últimamente no ha sido fácil conseguir un buen papel. — Uno de sus dedos se paseaba sutilmente por el arco de mi nariz bajando hasta mi labio inferior para darle una caricia. — Lamento haber descargado toda mi irá en ti, el como me siento no justifica como te he tratado. Solo que verte tan llena de ilusión me da algo de envidia, ya que yo también era como tú en el pasado pero ya no es lo mismo para mí.
Gojo dió una risa melancólica viéndome fijamente, en cierta parte lo entendía, se sentía demasiado presionado y lo dejaba ver con sus tratos hacia mí. Muchas cosas comenzaban a tomar sentido luego de esto y mi charla con Suguru.
— No necesitas perdonarme, solo quería que sepas que estoy verdaderamente arrepentido, y que de ahora en más seré mucho más comprensivo contigo. — Dejó un pequeño beso en mi mejilla provocando que mi pulso se acelere por los nervios, Suguru rió suavemente cerca de mi oído y pude sentir su cálido aliento chocar. — La verdad tu golpe me tomó por sorpresa y hasta me dolió más de lo que esperaba.
— Estas últimas semanas traté de hacer recapacitar a Satoru sobre tí, básicamente sus disculpas también son en parte a mi trabajo. En otra ocasión si lo golpeabas no habría reaccionado así. — Confesó Suguru detrás de mí, giré mi cabeza levemente y lo miré con confusión. - He estado viéndote desde que comenzamos a trabajar y realmente eres alguien muy dulce y atenta pero la idiotez de Satoru no lo dejaba verte más allá de su egoísmo.
— Suguru siempre me insistía en conocerte mejor. Decía que eras una chica muy linda, pero ahora que te tengo así puedo verlo mejor. — Los ojos celestes de Toru me analizaron de arriba a abajo sin descaro, su típica sonrisa juguetona se dibujó en sus labios mientras se acercaba peligrosamente a mi rostro. — Aunque debo admitir que cuando te ví por primera vez con esa falda corta cuando nos conocimos tenías cierto encanto. — Su gran mano descansó en mi muslo apretando levemente por encima de la tela de mi pantalón, aún así solté un leve suspiro bajo su toque logrando que ambos hombres sonrieran.
