El porfiado [Titopo]

Pt.20: Buen dia Benito

Topo se quedó en el baño casi todo el día, pero a mediodía quiso ir a la cocina a comer algo, asi que se puso una chamarra para que Marre no le viera las cicatrices. Pues el le había dicho que había dejado eso hace mucho y si le veía con los brazos así se enojaria.

Se quedó en la cocina un rato, buscando que podría comer, y decidió picar algo de fruta, algo simple, pero con los brazos tan malheridos no podía ni mover las manos bien. Como consecuencia, terminó haciéndose una herida en la mano por accidente. Sentía que su día no podía ir peor, hasta que escucho que alguien tocaba la puerta.

Gustavo fue a ver quien era, y para su sorpresa no había nadie, solo había una carta firmada por Roberto. Y aunque con algo de miedo, Topo abrió la carta y comenzó a leerla.

Para ti, Gustavo      23/12/2019
Se bien que piensas que soy una mierda de persona, y lo soy, ¿sabes por qué? Por tu culpa. Espero arreglar las cosas contigo, solo que vos no podes hablar sin llorar, sos un cobarde e idiota. Te odio, por ahora.
-Roberto Musso.

La carta en sí no hacía sentido, pero las palabras subrayadas, le pegaron demasiado mal, el amaba a Roberto demasiado todavía como para que le dijera eso.

El guitarrista quería llorar pero no lo hizo, ya había llorado demasiado la noche anterior y no lo quería volver a hacer. Solo arrugó la carta y la tiro a la basura.

El resto del día, Topo no hizo nada más que pensar en esas palabras y estar acostado en su cama, pensando que talvez así se sentiría mejor, pero no fue así.

Marrero se estaba dando cuenta de que Gustavo tenía el ánimo bajo, e intento animarlo hablando con el y tratando de motivarlo, pero no le servía ningún intento de hacerlo sentir mejor.

—Topito, decime que te paso, ¿por qué si ayer estabas bien ahora te pusiste así?

—Bueno... una carta, Roberto me envió una carta y en ella solo me insultaba y me decía que me odiaba y... —el guitarrista no pudo seguir hablando, y comenzó a llorar.

—Roberto es alguien horrible, que no te ofendan las cosas que el te dice, nada de lo que el dice es cierto.

—¡Yo quiero que el me ame, que me valore como yo lo valoro a el, no quiero que me odie, es todo mi culpa!

—No es tu culpa, calma, es su culpa por no poder asumir la responsabilidad en sus emociones —Con eso, Santi logro calmar a Topo, el tecladista tenía que aparentar estar tranquilo, cuando en realidad estaba bastante enojado con Roberto, ya le había perdonado bastantes cosas y no podía seguir permitiendo las cosas. Se queria a vengar de Rober por todo lo que habia causado.

Justo ese día el se iba a regresar a su casa después de haber estado con Topo por 2 semanas, pero ya no lo haría, necesitaba quedarse con Gustavo un tiempo más para verlo mejorar un poco. A donde si iría seria a casa de Rober, le iría a visitar.

Por la noche, Marrero tomó sus cosas y se fue a su casa supuestamente, aunque solo dejó sus cosas tiradas en la entrada. Para después ir a tocar la puerta a casa de el vocalista, quien le abrió justo al momento.

—¿Marre? ¿Qué haces acá? No esperaba verte a esta hora...

—Bueno, hace tiempo no hablamos y quería pasar un ratito con vos.

—Es raro eso, pero esta bien, puedes pasar —Daniel le dejo pasar a Santiago, y ambos estuvieron hablando durante un buen rato, la cosa parecía ir bien, hasta que salió el tema del comportamiento de Rober hacia el guitarrista.

Roberto trataba y trataba de justuficar sus acciones, mintiendo y diciendo que el no era el que estaba mal de la cabeza y que no había hecho nada grave.

El tecladista trato de aguntarse el enojó, y solo le intentaba decir a el vocalista que lo que había hecho si estaba mal, el lo decía de forma pacífica. Pero Roberto se enojó con el y le metió una cachetada.

Ahí, fue que Marre perdió su paciencia, empujo a Rober al piso y tal como Rober lo había hecho con Topo, lo apuñaló con una navaja, casi 5 veces hasta que Daniel se desmayo.

Mientras eso ocurria, Topo estaba recogiendo su habitación, cuando encontró un celular, era el de Marrero, se le había olvidado.

Gustavo, aunque ya era bastante tarde, fue a casa de Santiago para poder regresarle su teléfono, pero se sorprendió al ver que no estaba en su casa.

Pensó en dejar el celular en una silla que había ahí, pero vivían en un país donde simplemente te volteas y ya hasta te robaron las agujetas, no se iba a arriesgar a que alguien se robara el teléfono de su amigo.

Se estaba por ir, hasta que escucho un grito proveniente de la casa de Roberto. Esto le llamo la atención, y fue corriendo a ver que pasaba. La puerta de la casa estaba abierta, y lo primero que vio Topo al entrar fue a Roberto en el suelo, y a Marre a su lado con la navaja en su mano. El guitarrista no supo que decir, solo fue a quitarle la navaja al tecladista, quien casi que estaba llorando.

—¿Qué carajo haz hecho, Santi?...
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Nota del autor✍️:

Valiendo vrga, wattpad no me deja leer 3 historias, y esas tres son mis favoritas 😔

En fin, me despido, chaoo