El porfiado [Titopo]

Pt.30: "El niño más bonito de todo el mundo, sos vos mi amor"

Era de mañana, al día siguiente, Topo estaba en la cocina de su casa, preparándose un café, cuando le entra una llamada de un número desconocido.

—¿Aló? ¿Quién es? —pregunto Topo al contestar, no se suponía que debería contestar llamadas de números extraños por motivos de seguridad, pero igual, había algo que le decía que lo hiciera.

—¿Hola? ¿Hablo con Gustavo Antuña? —pregunto la voz del otro lado del teléfono.

—Si, si, habla con el, ¿qué necesita?

—Le hablamos del psiquiátrico del hospital "Vladimir Hernandez", hay un paciente que quiere pedir que le venga a visitar, apesar de la pandemia hay unas habitaciones donde pueden estar siempre y cuando hayan las medidas correctas de sanidad.

—¿Quién es ese alguien qué quiere que le visite?

—Roberto Musso, mañana es el día donde una visita puede pasar a estar con ellos todo el día, y el quiso habalrle para pedirle que fuera con el si es que quería

Gustavo se quedó helado, no tanto por el miedo si no por la felicidad, una felicidad que no debería estar ahí.

—Dígale que si, iré a verlo mañana en cuanto sea posible, gracias por llamarme.

El guitarrista colgó la llamada, se quedó quieto sin moverse ni hablar, estaba tan contento pero a la vez tan asustado, era una de dos, o Roberto quería arreglar las cosas con él, o simplemente... iba a ser un reclamo más por no sacarlo de ahí.

Igual, ya había aceptado ir, y no iba a dejar plantado a Roberto.

Prendió su teléfono una vez más, esta vez para llamar a Marre...

—¡Marre, a que no sabes lo que me acaba de pasar!

—¿Ahora qué? Son las 7 de la mañana Topito.

—Roberto quiere que lo vaya a visitar, ¡lo voy a ir a ver mañana!

—¿Qué? ¿Es broma verdad?

—No, no es broma, que bueno que no lo sea la verdad, lo extrañaba tanto...

—¡Sos un tarado! Ya nisiquera te lo voy a explicar, vos ya sabes que pasa y porque te digo eso, solo, cuídate y espero y te vaya bien.

Marre, sin decir nada más, colgó lo llamada, a Topo no le importo, el solo esperaba con ancia poder ir a ver al vocalista mañana.

~☆~

Al día siguiente, Topo se alistó, se tomó el café, se puso los zapatos y salió en cuanto pudo de su casa para ir al psiquiátrico.

Fue a pie, pues el lugar le quedaba cerca y además, no encontraba las llaves del auto como para sacarlo.

Llegó al hospital, con una sonrisa en su rostro, esperaba ansiosamente que le abrieran la puerta y le dejaran pasar con Tito, aunque mientras esperaba se puso a pensar, y a pensar, hasta que llegó a un punto donde esos pensamientos no eran del todo cuerdos.

"¿Y si Roberto me hace daño? ¿Y si me golpea? ¿Y si me regaña? ¿Y si me viol...? No, espera, el no sería capaz de hacer eso... creo"

Porfin, llega una enfermera, le abre la puerta y lo guía a la habitación donde se encontraba Roberto, la enfermera se fue y con nervio y miedo Topo se metió a la habitación.