Satoru Gojo es un niño alegre y lleno de energía viviendo en un país donde los seres con poderes no podían caminar libremente.
Casualmente un día conoce a otro niño muy peculiar y con una trágica historia, de quien rápidamente sintió un apego especi...
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ACLARACIÓN: SALTEEN ESTE CAPITULO Y LEAN PRIMERO "SILENCIO" (cap. sgte.) LUEGO VUELVAN ESTE. (Hubo un error técnico, sorry)
"Libertad"
Dazai
No sé exactamente en qué momento de mi vida me convertí en lo que soy. No puedo recordarlo bien.
Solo tengo vagos recuerdos de una casa sencilla, un patio con césped y una madre sonriente. Casi que puedo oír su risa tan apacible y contagiosa, como si fuese la misma voz de un ángel riendo en el cielo.
Ángeles en la Tierra... ¿Es eso posible?
...
Una vez leí un libro en donde un príncipe divisó a un soldado cometiendo una injusticia. El principe, guiado por su corazón, asesinó a aquel soldado para salvar al esclavo. Todos pensaban que el príncipe debía ser condenado. Que su sangre llevaba la sangre de un mismo demonio. Sin embargo para algunos, el nacimiento de ese príncipe representaba la salvación en momentos de crisis. Pues en ese entonces habían mandado a asesinar a todos los bebés nacidos en esa época para controlar la población de una raza. Esa persona creció y liberó a su pueblo. Aunque lo logró cometiendo muchos asesinatos a personas inocentes en el camino.
No obstante, fue él mismo quien implantó una regla en la humanidad. Una regla que rige hasta éstos días...
...No matarás...
¿Quién tenía la razón entonces...?
Bueno. No es como si sirviese de algo analizarlo ahora.
Pero aveces me planteo, ¿acaso fué un error el haber nacido?
Todo pareciera indicar que sí.
Pero entonces, ¿quién merece vivir y quién merece morir?
Si nos basamos en la apología de la vida y sus creencias, el acto de vivir es un regalo. ¿Pero quién puede quererte tanto como para obsequiar algo tan gentil como una vida?
¿Quién es digno y quién no?
¿Y si fuese al revés?
¿Y si uno recibe una vida sólo para ser castigado hasta la muerte? Una persona que nace sin ser digna. Así lo siento yo. Así lo sentí hasta ahora, cuando comprendí que todas esas teorías son puras estupideces. La vida solamente se basa en vivir a como de lugar, en luchar o rendirse; matar o morir. Ser o no ser...
Al fin y al cabo para muchos, yo ya estoy muerto.
Sin embargo, hice una promesa. Y es a causa de esa promesa lo que me mantiene en un limbo. Un limbo para quienes deseamos la muerte con todas nuestras fuerzas.