LUNA

Capítulo 59

Capítulo cincuenta y nueve

-Grace-

Carlos y yo nos levantado de nuestros puestos y salimos corriendo en dirección de donde se escuchaban los gritos de la prima de mi querido mate para saber qué era lo que estaba ocurriendo

Lo que nos encontramos nos dejo confundido a ambos ya que solo habían unos guardias bajando varias maletas

-¡No me puedes hacer esto! _ escuche la voz chillona y solo pude pensar en como Andrés podía aguantarla todo el día y todos los días

-Quiero evitar problemas _ gire mi cuello al escuchar aquella voz para observar a un Leandro con ojeras bajando las escaleras

Se veía cansado, parecía que no hubiera dormido bien desde hace menos. Pero eso no le quitaba lo guapo, ¿Qué demonios estoy diciendo? El es el enemigo

-¿Con quién quieres evitar problemas?... _ volvió a hablar aquella persona que ahora sabia que estaban corriendo de la casa _ ¿con la zorra de tu mate?

Di dos pasos dispuesta a acercarme a ella y hacerla que se comiera sus palabras de la forma más literal posible cuando sentí las manos de Carlos tomándome de la cintura alzándome un poco apartándome del suelo

-Suéltame que ahora si la mato _ intento zafarme de su agarre, pero no me deja. Claro que esto iba a ser algo imposible

-Daniela… _ habla mi mate colocándose sus dedos en el puente de su nariz y cerrando sus ojos _ no te estoy corriendo y muchos menos te estoy echando…_ aparto sus dedos y abrió sus ojos _ puedes venir cuando quieras, pero tendrás que avisarle primero a los guardias para que estos me avisen a mí y a mi luna a ver si alguno de los dos esta disponible en ese momento para atenderte… _ créeme que yo jamás estaré disponible para ella _ y además no se porque te quejas, vivirás bien con tu mate. Mande a cinco chicas del servicio para la casa de Andrés, estoy seguro que él te va a tratar como una reina

-¡Pero yo no quiero estar allá! _ hizo un puchero que mas que adorable daba asco

-¡No me levantes la voz y obedece! _ di un pequeño salto en mi lugar y Carlos también, cuando gire mi cuello para observarlo el aparto una mano de mi cintura y coloco su dedo en sus labios diciéndome con esa seña que hiciera silencio y no me lo tenia que decir dos veces para obedecer

Lo podía ver en los ojos de Leandro, se estaba conteniendo para no usar su voz de alpha con la única familia que le quedaba, era admirable como todavía la soportada

-No entiendo porque haces eso solo por una estúpida que ni te quiere _ lagrimas empezaron a salir de sus ojos, ¿esta chica no entiende el desprecio?

-Me canse… _ Leandro termino de bajar las escales y Carlos se hecho un poco para atrás conmigo todavía cargada _ ¡Guardias!... _ rugió y dos chicos más o menos de la edad de Carlos llegaron rápidamente _ sáquenla de aquí y no me interesa si le hacen daño, es mujer lobo, se cura rápido

Pasó por delante de mi y no sabia que estaba conteniendo la respiración hasta que la solté, tenía que admitir que me había dolido que pasara por delante de mi sin siquiera decirme buenos días o aunque sea dedicarme un hola

Sentí como Carlos me bajaba lentamente hasta que mis pies volvieron a tocar el piso, después de allí desapareció por la misma dirección que había pasado mi mate, quería pensar que no se había ido detrás de él, pero siempre olvido que es su alpha y sea como sea le debe respeto

Ya no quedaba rastro de las  maletas de Daniela y mucho menos de ella, había estado tan concentrada en el dolor porque Leandro no me saludo que no me di cuenta en que momento se la llevaron, ni siquiera la escuche gritar, observe todo el lugar y cuando mi vista callo en el piso me encontré con un pequeño pedazo de papel y me apresure a recogerlo, como soy tan curiosa lo desdoble y observe lo que decía en él

Pensé que me encontraría con una lista de maquillaje, comida o ropa, pero no, en vez de eso encontré una dirección anotada en el mismo y no solo eso también había una hora en esta; rápidamente lo metí en mi bolsillo por si en un futuro lo necesitaba y también porque escuche los pasos de alguien caminando en mi dirección

-Ey _ hablo Andrés llegando y colocándose delante de mi

-Ey _ respondí de la misma forma mientras intentaba sonreír y olvidar lo que había visto hace apenas unos minutos

-Lamento lo de… _ sabia que hablaríamos de Daniela, así que antes de que continuara hable porque como siempre terminaríamos discutiendo

-Olvídalo… _ intente restarle importancia _ es tu mate y te entiendo, la amas a pesar de todo y la defenderías de todo y de todos. Solo aléjate de mí _ intente pasar por su lado pero me tomo del brazo y me coloco donde anteriormente estaba

-Grace solo quiero hablar _ en otras circunstancias y en otro momento le hubiera dicho que si, pero esta vez no

-No… _ respondí simple y segura _ no llegaremos a nada como siempre, terminaremos discutiendo por lo puta que es tu mate… _ no sabia si me había pasado y cuando lo mire supe que si _ y obviamente por lo puto que es el mío… _ intente aligerar el ambiente incomodo que se había formado por mi culpa _ y aunque yo lo acepto y lo tomo de la mejor manera posible tu todavía no lo haces

-¿Cómo quieres que tome que llames a mi mate zorra?

-¿Vez?... _ lo señale _ Allí está otra vez a la defensiva, cuando aceptes lo que tu mate te hizo de la mejor forma posible, me llamas, para que hablemos _ volví a intentar pasar por su lado, pero de nuevo lo impidió

-No tengo la culpa de que tu mate sea una mierda de persona _ ¿eso me había dolido? Claro que sí, y no porque hablara de Leandro, sino más bien por el hecho de que era el quien lo decía aun sabiendo lo que su mate hacia

-Sigue colocando a tu mate en un pedestal, que cuando te toque bajarla del mismo no tendrás a nadie que te apoye y allí estaré yo para decirte te lo dije

-No digo lo mismo… _ se cruzo de brazos _ cuando caigas y no encuentres a nadie con quien te puedas sostener, allí estaré yo, siempre estaré _ me acerque a su rostro y hable despacio

-Prefiero quedarme en el piso o morir allí mismo antes que pedir tu ayuda para levantarme _ ahora si pude salir de allí sin que nadie me lo impidiera

No había tenido la oportunidad de conocer esta parte de Andrés, pero si según dicen por allí que haríamos cualquier cosa por nuestros mates, entonces ¿en dónde entrabamos Leandro y yo? Estoy segura que el preferiría que yo muriera antes de dar su brazo a torcer y yo, pues yo daría su vida a cambio de mi libertad