Kabe no shinobi

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8: La lucha por Trost, Parte 2
Kabe no Shinobi

Capítulo 8: Primera batalla: La lucha por Trost, Parte 2

[Descargo de responsabilidad: NO soy dueño de Naruto, Attack on Titan ni ninguno de sus personajes.]

"¿Un... ninja?"

"¿Qué es eso?"

"Ninguna pista."

Naruto escuchó su charla confusa con diversión. No era demasiado extraño que no supieran sobre los ninjas, no había encontrado ninguna mención de nada relacionado con los Shinobi en las bibliotecas.

Naruto notó que Reiner se había puesto rígido ante sus palabras. ¿Sabe qué es un ninja? Estuvo a punto de preguntar, pero las palabras murieron en sus labios cuando un repentino ruido sordo llegó a sus oídos.

Esos son-! "¡Todos, bajen!" gritó, el instante antes de que explotara el muro sur.

Había madera, piedra y vidrio por todas partes. Por el rabillo del ojo, notó que una de las aprendices, una chica que había estado parada justo al lado de la pared, fue arrojada al lado opuesto de la habitación, rompiéndose el cuello con la piedra en bruto.

Cuando los escombros se calmaron y el polvo se asentó, dos rostros enormes se asomaron por el agujero. Ambos sonriendo como bestias enloquecidas, mostrando los dientes.

Los alumnos entraron en pánico. "Mierda", maldijo Jean, "¡hay demasiada gente!"

"¡Date prisa adentro!"

"¡Correr!"

"¡¿Dónde está Mikasa?!"

"Ella se estrelló allí; ¡ya se fue!"

Fue puro caos.

Naruto hizo una mueca. Usar jutsu en espacios reducidos como estos, con tantos no shinobi alrededor, podría ser peligroso, pero si los titanes traspasaran los muros del castillo, habría innumerables muertos.

Comenzó una secuencia de señales con las manos pero se detuvo al ver un enorme puño chocando contra la primera cabeza del titánico, que se estrelló contra la siguiente, y así, la vista fue reemplazada por la de otro titán. Uno sin labios, orejas puntiagudas y músculos ondulantes.

Los ojos de Naruto se abrieron ante la vista.

"¿Q-qué es eso?" escuchó al chico a su lado susurrar. Jean, si no recordaba mal.
El titán dejó escapar un rugido primitivo que hablaba de furia hirviente y sed de sangre. Luego cargó.

"Un titán... acaba de atacar a otro titán".

Junto a ellos, una de las pocas ventanas intactas se hizo añicos y a través de ella aparecieron rostros familiares.
La primera en aterrizar fue la chica de cabello oscuro que había iniciado la carga hacia el cuartel general. El chico calvo con el que había hablado antes que ella vino después, llevando a un chico rubio más pequeño en brazos. Éste no lo reconoció.

"¡Mikasa, Armin, Connie!" -exclamó Jean-.

"Está vacío..." Connie se maravilló ante el tanque de gasolina vacío. "¡Lo logramos! ¡Apenas lo logramos!"

Jean los miró con los ojos muy abiertos. "¿Están... todos vivos?"

Connie lo ignoró y le dio una palmada en la espalda a Armin. "Lo logramos, Armin, -"

"¡Ay!"

"-¡tu plan fue un éxito!" Connie continuó. Luego se volvió hacia los alumnos reunidos y se dirigió a todos ellos con una amplia sonrisa. "¡Todos! ¡Ese titán es anormal, está masacrando a todos los demás titanes! ¡Ni siquiera le interesan los humanos! ¡Si jugamos bien nuestras cartas, todos podremos salir vivos de aquí!"