Capitulo 2

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Compañía.

La compañía es lo mejor del mundo, no lo crees? Especialmente si la persona que te la brinda, es alguien a quien amas.

¿Tu me amabas, Rindou?

______ Yokuhara.

—¿Qué haces aquí? — pregunté al ver a Haitani en la puerta de mi casa.

—¿Esa es tu forma de recibir a tus visitas? — pregunto entrando, era la primera vez que lo veía solo sin su hermano. — ¿Dónde están tus padres?

—estan en el trabajo. — respondí cerrando la puerta, era un sábado por la mañana, demasiado temprano, calculaba que eran las 8:00 am cuando el rubio celestino me despertó tocando el timbre.

Hace unos días establecimos nuestro trato, nos haríamos compañía hasta que las cosas salieran a la luz, pero haríamos lo qué sea para humillarlos.

Y una vez cumplida nuestra misión, no volveríamos mantener contacto.

—¿Desayunaste? — alce la ceja ante su pregunta, es sábado, fin de semana, ¿Quien desayuna tan temprano?

Claro, de seguro el.

—no, lo haré en un rato, espérame en la sala, me iré a cambiar. — dije subiendo las escaleras.

Entre al baño de mi habitación para lavarme el rostro, luego de eso me peine para comenzar a cambiarme, aún sentía sueño, pero tampoco iba a dejar a Rindou toda la mañana esperando.

Pues pensaba que nos veríamos el domingo.

Baje hacia la cocina, en dónde Rindou ya hacía, espera...¿Estaba haciendo el desayuno?

—¿Estás haciendo el desayuno? — pregunté a su lado, el delicioso aroma inundó mis fosas nasales.

—si, estabas tardando demasiado.

—prioridades. — dije apartando mi cuerpo de el, para sentarme en el meson. — ¿A dónde iremos hoy?

—vamos a pasear. — respondió fresco. Sirviendome el desayuno.

—¿Asi le sirves el desayuno a Catara? — bromeé, pero al parecer no le causó risa, siempre andaba con ese semblante serio. — Rindou, si vamos a pasar compañía a partir de ahora, sonríe más, me haces quedar como babosa cuando bromeó.

—voy a reírme el día en el que hagas una buena broma, pero, te diré que nunca le he hecho algo de comer. Ahora termina de comer.

—Yuji quiere que vaya a su casa en la noche, para dormir y comer pizza — mencioné mientras le daba un sorbo a mi café.

—ahg, mucha grasa — dijo acomodando sus lentes, al parecer analizaba todo el desorden de la cocina. — ¿Irás? Que gran plan, ¿Nunca van a pasear o algo por el estilo?

—bueno, a Yuji le aburren esas cosas, prefiere que nos quedemos en su casa o algunas veces prefiere ir a fiestas, nunca me lleva, solo me llevo dos veces en todo el año.

—de seguro lleva a Catara. — se sentó a mi lado, la ropa que traía puesta le quedaba bien, mire hacia su pircieng.

—¿Que fue lo que te enamoro de ella? — pregunté. Me causaba curiosidad, pues ella no tenía buena relación en el colegio.

—nada, la que se declaró fue ella, y solo acepte por aburrimiento, solo la veia como un pasatiempo. — comento de manera malhumorada. — ¿Y tú, te enamoraste de Yuji?

—no realmente, la verdad es que no soy tan bonita, y nunca antes alguien había presentado interés en mi, excepto el, así que acepte salir con el por eso. — dije terminado mi desayuno, levantándome para lavar los trastes.

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