5 Razones

Capitulo 3

Andrew Jones

Me encontraba tumbado en mi cama mientras comía una bolsa de papitas y miraba una película en mi televisor, el extraño mundo de Jack, era de mis películas favoritas de toda la vida.

En cuanto termino, revisé el reloj y me di cuenta de que eran las seis de la tarde, pensé que sería bueno salir a caminar, tomar aire fresco me vendrían bien.

Me cambié de ropa y Salí de mi habitación encontrándome a mi madre sentada en el sofá leyendo un libro.

-Voy a salir- informe

- ¿A dónde? - Ella me pregunto

-Solo iré a caminar, no voy a pasar mis últimos meses de vida encerrado- Le conteste tomando mi abrigo para colocármelo

Solo escuche como ella soltó un suspiro y me miro a los ojos.

- ¿Ya te tomaste tus píldoras?

-Si

-Recuerda que si te empiezas a sentir mal llámame a mí o a tu padre sin demora

-No te preocupes, lo hare.

Me despedí de mi madre y fui directo hacia un parque que quedaba cerca de mi casa.

En cuanto llegue observe a las personas pasar. Parejas, familias y niños.

A diferencia de mi ellos estaban sanos y tenían muchos años de vida, mientras que yo, por culpa del cáncer terminal solo tengo seis meses hasta el final de mis días.

Me había propuesto no dejarme consumir por la tristeza, pero el hecho de saber que no voy a poder vivir mi vida como yo quiero me llena de impotencia.

Seguí caminando hasta llegar a un puente y me asusté con lo que vi.

Parecía ser una chica, estaba sentada en la baranda del puente, trate de creer que solo se había sentado ahí para mirar el cielo, pero no fue así.

Ella se había lanzado y yo me alarme, «¿Por qué hizo eso? Esta loca» fue lo que pensé.

Tenía que hacer algo, me apresure en correr y me introduje al agua. Traté de encontrarla, tocando bajo del agua hasta que sentí un cuerpo.

La tomé entre mis brazos y la saque de ahí, no reaccionaba, le di respiración boca a boca hasta que dio señales de vida.

- ¿Te encuentras bien? - Le pregunte notablemente preocupado, me quite mi abrigo para colocárselo.

Era una chica con un largo cabello castaño y unos ojos color verde, en cuanto reacciono me miro con una cara de enojo.

- ¿Quién eres? ¿Por qué me sacaste del agua? – Me grito furiosa

-No soy nadie, solo quien, salvo tu vida, aunque no lo quisieras- Le conteste igualmente enojado.

- Mierda, ni para morir sirvo, no voy a dejar de sufrir nunca- ella murmuro para después levantarse e irse.

- Espera, ¿A dónde vas?

- A un lugar que no te incumbe- fue lo último que me dijo antes de Marcharse.

- Por lo menos dime tu nombre- le grite, pero ella no me escucho.

¿Quién es ella? ¿Qué razones tendría para hacer lo que hizo?

Samantha Taylor

Llegue a mi casa con los ojos hinchados debido a que había llorado por todo el camino. Porque justo en el momento que iba a acabar con todo mi sufrimiento tuvo que llegar alguien para impedirlo.

Entre a mi habitación y me acurruqué bajo las sabanas de la cama, abrazando la almohada donde escondí mi rostro para poder llorar en silencio. Pasaron los minutos y después me quede dormida.

Para cuando desperté, ya era de día, sentía un fuerte dolor de cabeza y algo de hambre. Mas no quería salir aun de la cama, estaba demasiado triste para hacerlo.

No sabía qué hacer, tome el control remoto y encendí el televisor de la recamara. Buscaba algo que ver, una película o serie que me subiera el ánimo o por lo menos me sirviera de distracción porque las lágrimas amenazaban con volver a salir.

Entonces encontré un video, adjunto como archivo que tenía tiempo de no ver.

Era un video de Victoria y yo.

Lo pensé bastante y al final apreté el botón de "play" para empezar el video.

"-Sam deja ya de temblar como un chihuahua- Victoria me dijo entre risas mientras nos grababa con su cámara.

-No te burles de mí, ¿es que acaso no sientes el frio que hace? - Le reclame cubriéndome con las sabanas.

-Claro que lo siento, pero no estoy temblando tanto como tú-"

Como olvidar ese día, fue cuando viajamos a Alaska, Victoria y yo estábamos muertas del frio y nos habíamos abrazado para sentir calor.

"-No puedo dormir, este frio va a acabar conmigo- Le comenté de forma dramática.

-Conozco una forma que te hace quedar dormida en un instante- Victoria se volvió a recostar a mi lado cubriéndonos a ambas con la sabana.

-No, eso es muy vergonzoso, no lo hagas- Me tape el rostro de la pena

-Vamos Sam, yo sé que te gusta-"

Después de eso Victoria empezó a cantar la canción que siempre me había cantado para dormir.

La toma del video cambio y ahora me veía ya dormida con Victoria sonriendo satisfecha.

El video había terminado y yo me encontraba llorando nuevamente. Como olvidar esos momentos, cuando todo estaba bien, cuando era feliz. Pero ahora todo había cambiado, Victoria ya no se encontraba aquí y yo no he vuelto a sentir lo que es ser feliz.

¿Cuál es el valor de la vida? ¿Cuál es el significado de la felicidad? Son las preguntas que me hago constantemente, pero nunca les hayo respuesta.

Me senté en mi cama y me abrase las rodillas, lo único que deseo en este mundo, es dejar de sufrir.