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"¡Martin!"

Juanjo gritó con alegría cuando vio la cara de Martin en la videollamada. Era de madrugada, Juanjo todavía estaba en la bodega de sus tíos. Había bebido alguna copa de más, por lo que estaba más contento que de costumbre.

- Ay pensé que estarías dormido ya -Dijo Martin aliviado

- ¿Dormido, yo? Bebé, la fiesta acaba de empezar.

- ¿Eso que tienes en la mano es un cigarro?

- Hombre, yo avisé de que iba a fumar.

- Tampoco te pases, que luego queda el olor en toda tu ropa.

- Así que lo que te importa es poder seguir robándome la ropa, ¿eh? Muy bonito, Martin

- Sabes que tus camisetas me quedan mejor que a ti.

Martin sonrió.

- ¿Dónde estás?

- En la bodega de mis tíos, te voy a presentar a mi familia. espera.

En la videollamada apareció una multitud de personas gritando y saludando, se podía ver la pancarta del vídeo tirada por el suelo, ya en las últimas. Martin no escuchaba nada pero se rió ante el excesivo entusiasmo de la familia de Juanjo. Todos parecían estar pasándoselo bien.

- No oigo nada, pero salúdales de mi parte porfa.

- ¡Martin os dice hola a todos! -Gritó Juanjo.-Bueno, a tomar por culo que no oigo nada -Dijo mientras volvía otra vez a donde estaba él antes, un poco más apartado de la multitud.

- Oye, leí tu carta esta tarde.

Juanjo se tapó la boca con la mano. Se quedó en silencio y sonriendo embobado hasta que Martin volvió a hablar.

- Me encantó. Lloré muchísimo, pero para bien, no me esperaba que me fueras a escribir algo así ni de broma.

Juanjo le sonrió y bajó la mirada. En estos momentos le daba vergüenza hasta mirarle a través de una pantalla.

- Qué mono eres por favor. -Estaba muy nervioso- Todo lo que te dije es cierto. Solo puedo decir eso.

- Perdí la cuenta de las veces que la he leído. 

Juanjo se sonrojó y se rió por la vergüenza que le producía. 

- Por cierto, hablé con mi familia de lo nuestro.

- ¿En serio? Wow. -Se sorprendió Martin. Juanjo le había dicho que quería contarle a su entorno acerca de su relación, pero no se imaginaba que realmente pasaría. -¿Reaccionaron bien?.

- Increíble, vamos, todos se lo han tomado genial. Mis padres, mi hermano, mis tíos... Todos. Te ADORAN. Es que de verdad, ningún comentario malo, nada nada.

- Joder Juanjo, qué guay -Dijo Martin con una sonrisa enorme. -Me alegro un montón. Te voy a matar, pasaste tanto miedo para nada. 

- Estoy súper contento, no te lo imaginas.

Juanjo sonrió otra vez con la misma cara de tonto que antes. 

- Por cierto, ¿tú qué tal hoy, qué has hecho?

- Pues llegué, fui a mi casa, comí con mis padres, abuelos, bueno, toda mi familia así más cercana. Luego fui a mi cuarto para leer la carta, estuve llorando un rato hasta que me dormí, me despertó mi hermana, salí con mis amigos de toda la vida y volví a cenar. Y aquí estamos.

- Mi día parecido, creo que he visto a medio pueblo hoy, de verdad necesitaba esto. No sabes cómo están las señoras de Magallón, las tengo revolucionadas, de verdad. Bueno, y es que es salir a la calle, dar dos pasos y ya me están dando apoyo, ánimos y de todo. Esto es una fantasía, a veces me creo que estoy en un sueño.

- En una utopía -Dijo Martin imitando a Violeta.

- Es que ni las utopías de Violeta son así, es una cosa loquísima. 

- Me alegro muchísimo Juanjo, de verdad. ¡Oye! mi hermana me dijo antes por la tarde que quería saludarte.

Martin fue a buscar a María.

- ¡María! Estoy hablando con Juanjo. -María fue corriendo al lado de Martin y le saludó.

- ¡Holaa María! Qué guapa por favor, eres igual a tu hermano 

- ¡Juanjoo! Ala qué guay, tenía ganas de conocerte.

- Y yo a ti, Martin habla un montón de ti. 

- Bueno, tampoco tanto -Dijo Martin.

- No le hagas caso, te echa un montón de menos y me ha contado un montón de historias vuestras.

Continuaron hablando por un rato los dos hermanos y el maño, hasta que María no aguantaba más el sueño que tenía.

- ¡Buenas noches guapísima! -Se despidió Juanjo tirándole un beso.

- Buenas noches Juanjo, cuida de mi hermano porfa -Bromeó María.

- Bueno a dormir ya, ¿no?. -Saltó Martin.

Se oyeron risas y su hermana se fue a dormir.

- Bueno, bueno, bueno, Martin, me acabo de acordar de que la Narilea me ha contado unas cosas de camino a Zaragoza que vas a flipar.

- ¿El qué? ¿Lo de Salma y Violeta?

- ¿Ah que tú ya lo sabías? ¿Y no me lo cuentas?

- Pensé que Salma te lo habría contado ya, a mí me lo dijo Kiki.

- Pero no me refiero al hecho de que estén liadas, eso sí que lo sabía, digo que Violeta le dijo a Salma que iba a hablar con su novia acerca de todo el rollo que tienen. 

- ¿Qué dices? Eso sí que no lo sabía

- Le di mi número a Salma antes de saber todo esto, así que si mañana me llama y me cuenta algo, te lo digo. Bueno, y Álex, otro que tiene telita...

Se quedaron un rato hablando de los cotilleos de la academia, hasta que ambos se caían de sueño.

- Oye, me voy a dormir ya, no puedo más -Se despidió Martin.

- Vale bebé. Te echo de menos ya.

- Y yo

Los dos se hicieron pucheritos hasta que Martin se rió y ya se despidió definitivamente.

- Buenas noches Juanjo, te quiero.

- Yo más, descansa.

Martin colgó y fue a devolver el teléfono a su madre. Entró en su cuarto pero vio que estaba dormida. Entonces, se le ocurrió la brillante idea de llevarse el móvil de su madre otra vez con él. Empezó a mirar algunos clips del canal oficial de youtube. Algunos títulos llamaron su atención: "Juanjo y Martin se relajan", "Juanjo y Martin de relax", "Marruski y la vida del exterior", "Martin se emociona escuchando a...", "Martin y Juanjo pasan tiempo a solas cantando", "Merienda y chismes con las marruski"... Le parecía surrealista, le hacía gracia y le parecía raro a la vez. Todavía no era muy consciente de que realmente estaba siendo grabado todo el día. Se vio todos los vídeos, leyó los comentarios, los cuales eran la mayoría positivos. Se alegró de que la gente se divirtiera viéndole y agradecía el apoyo, pero no dejaba de ser un poco extraño para él.

Se metió en tiktok y buscó su nombre. La mayoría de vídeos era con Juanjo. Algunos eran edits de momentos bonitos entre ellos, otros eran clips del directo, o memes. También había algún clip con Álvaro, y muchos con Ruslana y Chiara. Vio también algunas de sus imitaciones, las cuales le dio un montón de vergüenza y no puedo terminar de ver. Muchos de los momentos que vio, él no los recordaba y se le hizo muy raro verlos así.

Tras un buen rato viendo vídeos, decidió que ya era suficiente, no podía ser bueno para su salud mental procesar tanta información en tan poco tiempo. Volvió a la habitación de sus padres y dejó el teléfono en su mesita de noche.

Se fue a la cama. Recordó que había escondido la carta debajo de la almohada, pero cuando fue a cogerla para leerla antes de dormir, vio que no estaba donde la había dejado.

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⏰ Última actualización: Dec 31, 2023 ⏰

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Querido MartinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora