#006 | Quinta razón.

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*/Aparece y desaparece epicamente.*

Ya han pasado tres meses desde que mamá trajo a un hombre a la casa. No sé porque, pero ella quiere arreglar las cosas conmigo. Últimamente me ha estado regalando cosas nuevas y entre otras cosas. Se me hace confuso pero eso no quiere decir que me disgusta.

Eric, ¿Qué tal están tus amigos? Últimamente no veo mucho a Kyle y Kenny. A Stan sí. ¿Te haz vuelto más cercano a él por alguna razón en particular? — ella me preguntó mientras desayunábamos.

Sí, ma. Algo así. Sinceramente me siento... Ah... ¿Bien? Con él

— ¿Bien? Te refieres a que te sientes seguro con él, ¿Verdad? — No entiendo muy bien el punto pero, sí es algo así.

Supongo — contesté, sin entender bien lo que significaba — de hecho... He estado escribiendo sobre él — nunca le conté a nadie sobre mí diario secreto. Pero ella era mí mamá, y últimamente quería mí confianza. No se lo dejaría difícil, yo ya madure.

¿Escribir? ¿A qué te refieres? — ¿Qué pregunta? Yo no sé dar explicaciones. Corrí a mí habitación y le traje el cuaderno. Se lo mostré, por suerte arranco las hojas raras y las tiro a la basura. Aunque ahora creo que ya sé porque la gata escupe papel.

Mí mamá veía el cuaderno con algo de confusión. Solo habían garabatos, mensajes de odio en árabe. Hasta que llegó a esa página donde estaba escrito lo de Marsh.

— ¿Esto lo escribiste pensando en él?

¿Pues en quien más? Todos me odian

— Eric. ¿Puedo preguntarte algo?

— ¿Qué? ¿Si quiero una nueva consola? En ese caso, sí

— No. No era eso exactamente. — negó

— ¿Entonces? — La mire confundido.

— Leyendo esto... ¿No crees que quizás, te “guste” tu amigo? — ¿Gustarme? ¿Stan? Ay, porfavor. Aunque, si yo fuera alguien ajeno a mí, leyendo eso, sí me lo creería.

— ¿Qué? ¡No, mamá! No soy gay

— Ajá. Bueno tienes que irte a la escuela, amorcito

Agarre mí mochila y me fui de la casa, no sin antes irme con mí beso en la mejilla por parte de mí madre.

★ 🚀

La escuela es un castigo para Cartman. A pocos le gusta este lugar, entre ellos; Kyle y Wendy. Esos dos eran unos “nerds”. Luego estaban los normalitos a los cuales no le daban por prioridad la escuela pero tampoco la dejaban a lo último. Y después estaban él, Kenny y Stan. Aunque McCormick es un caso aparte, él incluso tiene el puesto de mayor faltas del salón. Cómo por ejemplo, hoy no vino.

Así que ahí estaban ellos, los vagos; quietos. Sin hacer mucho,
contestaban las respuestas que se sabían y las demás las dejaban sin resolver. Marsh se inclino con la silla, mirando a su compañero de la izquierda, Cartman.

— Oye, culón — lo llamo. De todas formas todos hablaban, al profesor poco le importaba

— ¿Qué quieres? — pregunto sin más

— ¿Quieres saltearnos la próxima clase, e ir a por un helado? — invito el azabache

— cuenta conmigo definitivamente — respondió de inmediato. ¿Qué? Él amaba la comida y odiaba las clases. De todas formas, a echo cosas peores

#STANMAN - 10 Razones Para AmarteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora