Entramos en un edificio que se alejaba del callejón principal. El fuerte olor a humo de cigarro y mezcla de madera vieja y mojada fue como una bofetada en la cara mientras seguí a Harry. Mis ojos recorrieron la habitación, solo vi cuán lleno estaba este lugar. Casi todas las mesas tenían gente sentada en grupos más grandes, incluso el área del bar estaba bastante llena. La charla abrumaba la música de fondo, casi haciendo que sonara como un molesto zumbido entre las voces.
Harry no dudó, caminó hacia la barra, dejando que su brazo descansara sobre la superficie de madera, inclinándose sobre ella, pero su cabeza estaba vuelta hacia atrás, como si se estuviera asegurando de que lo estaba siguiendo. Solo le lancé una pequeña sonrisa mientras estaba junto a él, evitando cualquier contacto con él o con la gente y los muebles que lo rodeaban.
"¡Harry! ¡Cuánto tiempo sin verte!" Sólo tomó una fracción de segundo antes de que la mujer al otro lado de la barra se diera cuenta de nosotros y nos llamara instantáneamente mientras se dirigía hacia nosotros. "Extrañaste a Mathias. Tuve que echarlo de aquí hace aproximadamente media hora. Ese bastardo borracho rompió otra silla", puso los ojos en blanco con ira, antes de reírse de sí misma, empujando un mechón de su cabello castaño chocolate detrás de ella. oreja, que se había salido del moño que colgaba bajo de su cabeza.
"Por supuesto que sí..." Harry suspiró mientras sacudía la cabeza. "De todos modos, ¿lo habitual?" ella habló por encima de él, sus voces se mezclaron, pero parecía que entendían lo que el otro decía mientras Harry continuaba hablando casi después de su decepcionado remordimiento por lo que había hecho su amigo. "No, hoy no. Una botella del mejor whisky de fuego y 4 ositos de mantequilla", sonrió y me miró fijamente antes de parpadear.
"Elegante, pero no me digas que estás bebiendo todo eso tú sola", la camarera levantó una ceja en broma. Al momento siguiente, el brazo de Harry que serpenteaba alrededor de mi cuello me empujaba hacia abajo. "No, estamos celebrando la graduación de Draco", le informó a la mujer, mientras todavía me abrazaba.
Sus ojos se movieron hacia mí, la sonrisa se volvió más amarga, pero aún permanecía en sus labios grandes, regordetes y de color rojo brillante. Sus ojos color marrón ratón ahumado me escanearon minuciosamente, sin perder ni un cabello que había caído sobre mi frente. "Nunca esperé que otro Malfoy viniera aquí..." justo cuando estaba a punto de estallar de ira, Harry la interrumpió, su voz tenía un tono tan extraño. Estaba enojado, eso es seguro, pero al mismo tiempo había varias otras emociones en su voz que ni siquiera podía distinguir.
"Gertra, no lo hagas. Estoy aquí con mi amiga saliendo por la noche, pasándola bien. No quiero que otra persona me diga que estoy cometiendo un maldito error. La última vez que revisé, puedo ser amigo de quien quiera. Incluso si es un ex mortífago. Todos tienen derecho a cambiar, incluso Draco, así que ni siquiera empieces. Ahora, ¿puedo tomar mi maldita bebida sin que todo esto saque a relucir el pasado? Él espetó, casi gritándole, haciendo que su rostro palideciera con cada palabra que había dicho.
"Harry, está bien", tragué saliva, mis manos automáticamente agarraron su camisa, tirando hacia abajo, para que me mirara. "Busquemos un lugar para sentarnos, ¿de acuerdo?" Comencé a arrastrarlo por su camisa hacia el interior del pub, lejos de la mayoría de los ojos del público. Terminamos sentándonos en una mesa al otro lado de la habitación, al lado de una ventana, que mostraba el mal iluminado Valle Diagon.
"Esta noche celebramos mi graduación. Eso es todo lo que importa, así que por favor no te enojes con nadie. Después de todo, merezco esto", le di una sonrisa semanal mientras me sentaba frente a él, mientras finalmente admitía cómo siento por el odio que recibí. "Mañana iré al Ministerio y veré si hago algo con mi vida. Realmente no puedo solicitar un trabajo hasta que tenga los resultados", cambié de tema, esperando que eso calmara a Harry y funcionara.
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Salvando a los Condenados || Drarry ||
Fiksi PenggemarPase lo que pase con él, era completamente diferente. Sus ojos perdieron el brillo, su orgullo fue pisoteado, todo lo que representaba le fue arrebatado, dejando solo un paseo por esta tierra solo, no si puedo cambiarlo.